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Andrew es insípido entre las olas de caos y pesadillas que lo arrullan por las noches de abril.

Todo en él se acelera, se balancea y todo huye de sí como ráfagas de gas, y es inaudito porque la presencia de Tauro siempre ha sido tan templada -encerrada en su propio dolor- y su alma se revuelve en las sábanas hasta que terminan en el suelo marchitado de su habitación, peleando por respirar.

Al día siguiente todo parece volver a como era antes.

Excepto por-

Oh.

Y todos lo notan, sus sonrisas de cuarto de luna están idas y las manchas púrpuras bajo sus ojitos apagados de granate destrozada parecen durar más que sus propias respuestas sobre la mesa. Entonces están Capricornio y Virgo, meditadores perenne, angustiados hasta la médula por su compañero, que voltea a un lado y les evita la mirada ansiosa.

"Pero yo estoy bien" 

Y Capricornio es el primero en entender, piensa con las extremidades encogiendose de cansancio, cuando asiente en silencio y se retira con elegancia.

Está Tauro lavandose la cara cada 5 minutos, con las manitos de papel en la cabeza para mantenerla en su lugar y fuera de -la paroniria- que es dormir.

Entonces,

Ross aparece en su camino y desea evitar su presencia por siempre,

o al menos

hasta que su periodo de vigilia desaparezca y pueda pegar el ojo sin revivir las horribles escenas de guerra una y otra vez en su tormento.

Luego, el día parece continuar su curso sin otro percance, y llega la noche y Andrew va por su quinta taza de café. Aprendió rápido que si no quería dormir, tendría que hacer algo más para mantenerse desvelado.

"Entre menos duermo, más pienso
y entre más pienso menos olvido"

El primer recuerdo que se le viene a la mente es la imagen de Venus.

Está Venus mirándolo con adoración y ligera, preocupada, tristeza en su rincón leyendo un libro nuevo (que se siente como bloque de cemento que rompe y al mismo tiempo sana.) Está Venus con sus mejillas de rosal y sonrisa de origami cósmico sobre la mesa. Está Venus abrazando su cuerpo tímido y soso contra su amoroso ser, lo envuelve y asfixia como espinas de rosas.

Espinas de rosas.

Está-

Está Libra faroleando sobre sus miles de amigos nuevos en el pequeño parque de juegos, está Libra devolviéndole la mirada retadora cuando acaba de llegar junto a la luna deslumbrante. También están Libra y él llorando entre risas brillantes y ligeras sobre la montaña, el cariño fraternal florece debajo de sus pies.

De repente todo es rojo y negro y blanco y--

Él aparece una vez más y con él la guerra y cuando piensa tanto siente que no puede respirar.

Decide no hacerlo.

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⏰ Última actualización: Jan 22, 2020 ⏰

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Ceux qui rêvent  ;  Tauro THS Donde viven las historias. Descúbrelo ahora