Something About Us |YooMin|

II

Tú has estado en mi mente y cada día te aprecio más, me pierdo en el tiempo pensando en tu rostro, solo Dios sabe por qué me está llevando tanto tiempo despejar mis dudas, pero tú eres lo único que quiero.

—Adele

Unas piernitas pataleaban en su torso y se escuchaban unos balbuceos en intentos de formular una palabra, pronto una boquita chupaba sus dedos y lo miraban fijamente, Park sonrió al pequeño ser frente a él. Min Jungkook miraba a su mami dormir mientras él ocupaba el lugar que suponía debía ser de su papá; el castaño sacó sus dedos de la boquita de su niño y miro las pequeñas marquitas rojas en estos.

—Kookie, muerdes mucho a papi Jimin. Te comprare otro juguete para morder, bebé.

El pequeño solo miraba a su papi cuando este se paraba y se estiraba, luego escuchaba que los llamaban desde la sala para desayunar, el pequeño de cabellos negros solo admiraba balbuceando a su papi mientras este se cambiaba a unos pantalones ajustados y una camisa algo grande para él y como venía hacia él con ropita para cambiarle y que se viera bonito.

Los días con Kookie eran así para el pequeño disfrutando al máximo a su papi. Bajaron con ropa fresca y vio a su adorado tío Jin y tío Tae, por la noche siempre admiraba como sus tíos Nam y Hobi los dejaban en su casa y pasaban un rato con ellos hasta que el bebé caía dormido.

—Buenos días Jiminie, dame a esa bolita de amor para que desayunes— con sus manitas estiradas al chico de cabello rosa.

—Jin-hyung, no necesita hacer esto— hizo una pausa viendo a su pequeño niño lanzarse a sus brazos siendo consentido por su alto tío—. Hace un año que lo haces, no es necesario.

—Lo es, es necesario hasta que tu marca sea una bonita y no amarilla como la tienes— intervino su mejor amigo, Taehyung le paso su collar para taparlo, no por disgusto personal, si no por quejas en donde trabajaban.

El castaño bajó la mirada un poco entristecido, nunca deseo aquello pero no podía hacer mucho por su alfa y menos con una orden de alejamiento firmada por él mismo. Sin más quejas se dispuso a comer lo que sus amigos hicieron para él, mirándolos como hacían comer al pequeño Min-Park; cuando llegó la hora de ir a su trabajo dejaron todo limpio y el plato relleno del gato de Jimin, Chimmy solo bostezaba desde el sillón mirando salir a su dueño. Entraron al auto del mayor del grupo, acomodaron al niño en la sillita para bebes que estaba instalada en el auto y dar camino hacia el trabajo de los tres.

De camino pasaron por aquella gran empresa musical, Tae miraba a Jimin por el retrovisor del auto, él como su carita se entristecía mirando hacia adentro, no podía hacer nada por su amigo en esos momentos, la vía alterna que tomaban siempre estaba cerrada por construcciones y si daban la vuelta al lugar llegarían tarde a la tienda. Jin mordía su labio al ver la tristeza del castaño, como odiaba a aquella familia que lo rechazó y lo dejó en la calle sin nada como si se tratara de un perro, rompiendo su corazón, después de cómo presentaron aquella orden de alejamiento rompiendo completamente a su amigo; Jimin se refugió con sus Hyungs pero al poco tiempo encontró aquel pequeño y acogedor departamento para no molestarlos, pero causó más preocupación que "alivio" cuando se fue.

—No me miren así chicos, algún día tendré que aceptarlo— su voz salía triste y el olor que desprendía también.

—Vamos Jimin, debe— se vio interrumpido por el mismo.

—Se van a casar, su madre me lo restregó los planes para dentro de unos meses en la cara; no hay más qué hacer, Kookie y yo seremos felices juntos.

—¿Y cuando te pregunte por su padre alfa?— Tae estaba preocupado por lo mal que se veía aquello.

—Le diré que murió.