Why not?

Cap 1

Ring, ring, ring

Eso que escuchas no, no es una abeja, es mi jodido despertador, es decir que hoy comenzaré mi primer día de mi antes penúltimo año escolar.

Otro estúpido año de pura mierda.
Trataré de que este año las cosas no me afecten, trataré.

Me levanté de la cama para ducharme y hacer mi rutina de mañana, me vestí con un pantalón jean negro y una blusa blanca para luego ponerme una sudadera y mis anteojos negros, me dejé mi pelo al natural ya que mi pelo es de lo poco de mí que me gusta.

Mi madre me llamó pa desayunar asi que me puse mis calcetas blancas y agarré mis tenis blancos para ponérmelos luego.

Todo iba bien hasta que recordé que tenía que ir a la escuela.
- Buenos días pequeña- mi madre dibujó una gran sonrisa en su rostro.
-Buenos días- forcé una sonrisa- ¿donde esta papá?, ¿otra vez no estará con nosotras para desayunar?- dije ya sin mi forzada sonrisa.

A mi madre se le fue la sonrisa que llevaba pero volvió a aparecer al instante.

-No querida, el tuvo que ir a su oficina a hacer unos papeles para unos negocios que tiene que hacer lo antes posible-
-Oh, bien- ya estaba acostumbrada a no ver casi a mi padre, la mayoría de veces se iba a trabajar temprano y llegaba tarde así que ya no me afectaba tanto como antes.
- Pero mira el lado bueno, quizás venga a cenar hoy.- mi madre trató de alegrar la conversación
-Bien- no me lo creía

Terminé de desayunar y me despedí de mi madre con un beso en la mejilla para luego ir a la escuela. Fui caminando, no iba a buscar mi auto, quería caminar.

Al llegar a la gran puerta de lo que los profesores llaman "segunda casa", busqué con la mirada a mi mejor amiga Alexa pero no la encontré.

Seguí caminando hasta que encontré con una cabellera rubia que me gritó desde que me vió.

-¡Hola!- dijo ella con emoción.
-hey-
-Este año llegaron muchas personas nuevas y hay chicos que están buenos como el vino, pero no me voy a mostrar tan emocionada, me haré la difícil- en su cara apareció una sonrisa pícara.
-Bien por tí- comencé a caminar junto a ella por los pasillos- te encontrará con el dios griego que tanto querías- alargué la "a" de tantos.
-¿Pero que tonterías dices?!, ¡es tu oportunidad de conseguirte a uno super guapo!, y ¿adivina qué?- me miró a los ojos esbozando una sonrisa pícara igual que antes.
-¿Qué?- volteé mis ojos ya cansada de el mismo tema del que tanto habla.
-Se van a hacer amigos y vamos a tener citas dobles y nos casaremos juntos y...- la interrumpí.
-¡Basta!- ya estoy harta de lo mismo- sabes que ¡odio! este tema tuyo, sabes que no me gusta que me hieran, salí bastante afectada de la ultima vez, no me va a querer nadie, sabes todo lo que hablan de mí, ha sido asi todos los años y ¡no cambiará ahora!, sabes todo lo que me hacen, tu mas que nadie debes de saberlo-

Ella suavizó la mirada, se quedó un momento en silencio hasta que finalmente habló.

-Sabes algo Eri.- la miré interrogante- eres una de las chicas mas linda  y buena, se que no es fácil nada de lo que pasas en este estúpido lugar, pero, por favor, entiende que lo malo no dura para siempre, encontraras a ese alguien que te haga feliz y que te quiera de verdad, no todos los chicos son iguales- parece a mi mamá cuando me da un consejo.- Aunque déjame decirte que aprovecharé a estos bombones que llegaron y llamare la atención de algunos para hacerme la difícil y así atraerlos mas- volvió a ser la misma.
Reí ante lo que dijo
-Gracias- dije simplemente, si la contradigo, no ganaré la pelea- adiós, buscaré mi horario a la secretaría, te veo luego.-
Me dió una sonrisa en forma de asentimiento y al instante se fué.

Caminaba hacia la secretaría hasta que choqué con una persona y perdí el equilibrio haciéndome caer.
-Zorra- dijo una voz masculina, sigo en el suelo sin verle la cara.
-estúpido- espeté entre dientes, rogando a que no me haya escuchado pero al parecer si lo hizo por que cuando me puse de pie y seguí mi camino, me agarró fuertemente de la muñeca haciéndome soltar un leve quejido.
Miré hacia arriba para ver su cara y vi a un chico alto, pelo oscuro al igual que sus ojos, piel clara y por lo poco que ví, tiene un buen cuerpo.

No voy a mentir, esta bueno, pero al parecer su personalidad se asemeja a la mierda.
-¿Qué dijiste?- dijo molesto.
No respondí, ya me estaba poniendo nerviosa.
Primer día de escuela y ya se va a arruinar mi paz interior.
-Ya, tranquilo Jason, no la molestes- habló un chico que hasta ahora no había visto detrás de el.

Agradecí interiormente cuando el chico que me acabo de enterar que se llama Jason me soltó la muñeca, me dio una ultima mirada y dijo "vámonos" al chico, se dió la vuelta y se fue junto a su amigo que no se su nombre y tampoco me interesa.

Seguí caminando en dirección a la secretaría y mi día transcurrió tranquilo.
Se basó en presentaciones y presentaciones ya que en verdad, así como dijo Alexa, este años llegaron muchas personas nuevas.
En cuanto al chico ese,  Jason, lo vi e un par de clases pero por suerte no se dignó a continuar la "discusión" de esta mañana.

No me fue tan mal después de todo.

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