LA SIRENITA KATHERINE

En una bella ciudad, cerca de la playa. Existía una niña llamada Katherine la cual constantemente pasaba encerrada en su cuarto. Debido a que vivía con su madrastra Rosario, y su hermana Nicole. Katherine no salía, ya que no la dejaban.

Fueron varios los años en los que Katherine pasó mirando la luz del sol y el cómo disfrutaba la gente del mar, por medio de su ventana. Nicole siempre era la preferida de Rosario, constantemente dejaba que ella saliera a pasear, a bañarse a sentir el mar.

A Katherine le gustaba bailar y aprovechaba cada vez que Rosario no estaba, para colocar música y hacer al distinto a su vez divertirse. De repente, un día su madrastra la vio bailando, se enojó tanto que la castigó de tal manera que cerró la ventana para que ya no pueda ver el atardecer que tanto le gustaba. Nicole durante el tiempo que ella estaba castigada le llevaba comida.

Katherine: Gracias hermana, pero no lo vuelvas a hacer Rosario se va a dar cuenta y nos castigará a ambas.

Nicole: No te preocupes no sabrá nada.

Su gran sueño era salir y bailar, porque había ensayado durante toda su vida. Su cumpleaños se acercaba y ella continuaba castigada, llegó el gran día y su hermana le regaló unas zapatillas de ballet. Katherine estaba muy feliz.

Al probarse sus zapatillas sintió algo extraño en ellas, habían sido mágicas. Cada vez que se las ponía podía crear un portal pata transportarse a otros lugares, aprovechó que no había nadie en casa para salir y se transportó al mar exactamente en la mitad, y cuando sintió que se ahogaba se convirtió en una sirena. Ya ella no entendía nada de lo que pasaba todo era muy extraño. Por tanto, decidió abrir otro portal e ir a la casa.

Al llegar a casa decidió leer varios libros y en uno de ellos encontró el origen de las sirenas mediante zapatillas mágicas, espero a que llegue Nicole para contarle.

Al siguiente día nuevamente fue hacia el mar, de la misma manera. Vio a muchos más parecidos a él, siguió a uno y descubrió un reino bajo el mar. Incluso había un salón de clases bajo el agua. Se fijaron que ella estaba viendo y le dijeron que se integrara. Ese día vieron corales y escucharon una historia de la profesora, de cómo se había quedado atrapada en un coral parecido hace muchos años. Volvió a casa ese día muy tarde prometiendo volver al siguiente día.

Katherine, tenía un inmenso parecido a la profesora, al día siguiente que fue conversó con ella. Y le confesó que ella había tenido una hija pero nació humana y por tanto a sus días de nacida la entregó en adopción. Katherine recordó que su madrastra le había dicho de sus padres, su madre era una sirena y su padre era un humano pero que no deseaba quedarse con ella y nunca más volvió a saber de ella.

Luego de esto le contó que le gustaba bailar y que las zapatillas que le regalaron la transportaron hacia allá. Pararon días tras días de que Katherine no llegaba a casa donde su madrastra. De pronto, un día decidió volver a llevarse ciertas cosas que creía que eran necesarias. Rosario la vio y se negó rotundamente a que ella se fuera.

Pasaron las horas y la madre de Katherine estaba preocupada porque no regresaba como lo había dicho. Resulta que la había encerrado nuevamente. Mediante una ola gigante, el cual tenía suficiente agua para cubrir sus aletas fueron a buscarla.

Rosario había creado un hechizo que solamente una persona de puro corazón podría salir de allí. Katherine sabía que el hechizo no se podría romper pero al tener el apoyo de las sirenas decidió intentar salir de allí creando un portal con sus zapatillas. Al volver su madrastra se dio cuenta que ella no estaba. Entró a la casa sin recordar lo que ya había dicho, al intentar salir de allí no pudo hacerlo
debido al daño que siempre le causó a Katherine.

Regresaron hasta el fondo de la superficie al castillo, ella estaba muy triste porque nunca más iba a poder bailar ya que no tenía sus piernas. Pero no fue así, su mamá le hizo un collar en el que siempre que desee volver a ser humana solo tenía que decirlo y fue así que después de tanto sufrimiento en la vida de Katherine ella pudo encontrar a su verdadera madre y un buen hogar y así vivieron felices por siempre.