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"Ignorado"

—Muy bien, ya termine con esta parte, ¿Necesitas ayuda con algo mas Charlie?— Hablaba el albino demonio terminando de apilar una de las muchas cajas que habían llegado al hotel, las cuales estaban llenas de nuevas cosas para el mismo.

—No, tranquilo Ángel, solo terminaré con las nuevas solicitudes y luego iré a repartir los nuevos folletos.—Hablaba Charlie en un tono cansado, puesto que, había estado todo el dia ocupandose de asuntos de el hotel, el cual poco a poco iba  atrayendo más residentes.

—Si quieres puedo ayudarte con las solicitudes, igual no tengo nada mas que hacer—El chico hablaba con un tono indiferente pero la verdad tambien esstaba muy cansado cansado.

—¡¿Enserio?! ¡Me sería de mucha ayuda!—Hablaba la chica mientras agarraba las manos del contrario en modo de agradecimiento.

—Claro, no hay problema

—Gracias, bueno voy de salida, cuanto mas rapido me vaya mas rapido terminaré, adiós Angel.

—Adiós.

El demonio siguio con la mirada a la chica con una sonrisa en su rostro hasta que la vio desaparecer por la puerta del hotel. En cuanto vio que la chica se fue,borró rápidamente su sonrisa, suspiró pesadamente y se tumbó en uno de los muebles del recibidor. Estaba malditamente agotado por todo lo que había tenido que hacer en el día.

—Tranquilo Angel, puedes hacerlo, valdrá la pena al final—Hablaba el chico convenciéndose a si mismo. Antes de levantarse del cómodo sofá y comenzar con el aburrido papeleo.

[...]

—¿Angel?... ¡¿Angel?! —Llamaba el demonio mas poderoso que ocupaba aquel hotel buscando a su actual pareja.

Si, pareja, después de unos cuantos meses de convivir juntos en el hotel, lograron darse cuenta de la gran atracción física que sentían el uno por el otro. Lo que comenzó como una mera diversión para ambos al principio, poco a poco fue transformándose en un inmenso cariño que crecia con el paso de los días.

Ninguno de los dos había querido hacer publica su relación con sus amigos, puesto que, tener su relación escondida (En su opinión),les deba más posibilidades de pasar tiempo juntos sin que nadie los molestara.

Ninguno de los dos había tenido una relación estable, ni en vida, ni en su actual no-vida, asi que aún no sabían muy bien como actuar el uno con el otro. Angel tenía un poco mas de experiencia en el contacto físico, pero nada en el aspecto sentimental. En conclusión: Era un un tema inexplorado para ambos, asi que no habían logrado pasar mas que suaves caricias y cortos besos en algunos rincones del hotel.

Luego de unos minutos buscando a el albino, lo encontró en el recibidor de el hotel, dormido,acostado sobre la mesa principal con unos cuantos papeles en las manos; respiraba tranquilo y transmitía un aura de tranquilidad por todo el lugar, en el cual no se escuchaba mas que los sueves ronquidos del albino.

Alastor lo observo con adoración por unos segundos, no pensaba despertarlo, puesto que se le veía realmente cansado. Asi que dejo su característico bastón a un lado y con mucho cuidado levanto al menor de la mesa y lo cargo dispuesto a llevarlo a su habitación para que descanse más cómodamente.

Pero para su sorpresa, el chico abrió los ojos abruptamente, había olvidado que su pequeña arañita tenia el sueño ligero.

—¿Al?—Mencionó el chico aún un poco adormilado.

—Arañita

—No es que me queje pero ... ¿Puedo saber por que me estas cargando?

—Te quedaste dormido en la mesa junto a unos papeles, pensaba en llevarte a tu habitación para que descanses mejor.—Hablaba el mayor con voz tranquila mientras seguía caminando hacía la habitación de angel.