Cap. 2

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— Terminamos.

— ¿Q-qué? —Ante la sorpresa el alquimista de hielo soltó la muñeca de la menor en estatura, esta misma se acarició levemente la zona mientras daba un paso atrás.

— Como Juvia dijo, terminamos Gray-san.

— ¿Gray-san?

La peliazul ignoró su pregunta, suspiró para luego comenzar a caminar dirección al gremio.

— Y Juvia espera que acepte su decisión.

El pelinegro aún impactado se quedó de piedra en su lugar, cuando notó que la chica estaba bastante alejada comenzó a correr para alcanzarla y nuevamente tomarla de la muñeca.

— ¿Y por qué quieres terminar conmigo? ¿Qué excusa dirás?

Juvia se giró sorprendida, tiró con fuerza su brazo logrando zafarse del agarre del mayor.

— ¿Excusa? ¿Acaso es una excusa que Juvia mencioné su infidelidad?

El alquimista se tensó ante tal declaración, apretó sus manos hechas puños mientras reprimía una expresión que delatara culpabilidad.

— ¿En serio? ¿Realmente crees que yo sería capaz de eso?

— Juvia no lo hubiera creído antes...

Gray sonrió de lado, totalmente confiado de que la maga de agua cambiaría de opinión.

— Pero ahora Juvia no sabe que creer.

La chica suspiró un tanto cansada, aunque le amaba sabía que no lograría sacar nada bueno de él.

El amor es de dos, no de uno.

Y ella no quiere ser la única idiota manteniendo "viva" la relación.

— Lo siento Gray-san, aunque no tanto como el haber aceptado ser su novia aún sabiendo que nunca amaría a Juvia.

El pelinegro se quedó quieto en su lugar escuchando atentamente a la chica, quien no dudó en expresar cada pensamiento que cruzaba por su mente.

— Juvia está harta de todo esto, por eso si quiere hacer finalmente un bien por Juvia... Hay que terminar esta farsa.

El chico suspiró a la vez que revolvía sus cabellos, por la mirada de su ¿exnovia? Sabía que ya no podría hacer nada para seguir juntos, acercándose más a ella dejó un pequeño beso en su frente para luego volver a distanciarse.

— Lamento todo el daño que cause...

La mirada azul de la menor estaba cristalina, pensó que terminarían de una mala manera. Al parecer Gray le quería lo suficiente como para aceptar sin problemas su pedido, o por lo menos luego de unas cuantas palabras de su parte.

— Cuando me perdones completamente... ¿Podemos volver a ser amigos?

La chica asintió ante lo pedido, se dieron un último abrazo para luego ser el pelinegro el primero en irse aunque por otra dirección.

— ¡Gracias por todo Gray-san!

El chico sin voltear sonrió con levedad y alzando una de sus manos se despidió sin necesidad de palabras.

Limpiandose las lágrimas que no notó cuando dejó salir retomó su camino hacia el gremio, lo mejor en ese momento era distraerse y su única opción era haciendo una misión, necesitaba alejarse unos días o por lo menos horas de la ciudad.

— "Y quizás pueda encontrar otra pareja o grupo momentáneo para realizarlo"

Regresando al tan famoso gremio se podía ver a Natsu quien regresaba un tanto cabizbajo, aunque no lo suficiente como para negar una sonrisa. Se acercó a Happy quien lo abrazó nada más verlo en el lugar, se sentaron un momento junto a su amiga Pelirroja y la pequeña Marvell quienes le sonrieron con levedad.

Luego de unos minutos Gajeel junto a Panther Lily se acercaron a la mesa donde estaba el grupo anteriormente mencionado.

— Salamander, necesito hablar contigo.

Por el tono de voz que utilizó el dragón slayer de hierro ya sabía de que trataba, así que soltando un suspiro y recargándose ligeramente en la mesa decidió soltar la bomba.

— Si es sobre lo de la infidelidad de Fullbuster y Heartfilia te quiero decir que ya terminé con ella.

Todos quedaron en silencio por varios minutos, o por lo menos eso paso con el grupo de ellos.

— ¿Cuándo...

— Hace menos de semana, pero recién hoy tomé el valor para encararla y finalmente terminar con ella... Decidí pensarlo por unos días para aclarar mi mente, ya que bueno... Saben que la amo.

— Bien hecho Salamander, aunque pensé que no lo habías notado.

— Sus olores estaban mezclados... Era obvio que lo notaría.

— Entonces Natsu-san hizo bien en terminar con Heartfilia-san, ella se lo busco.

Las palabras antes dicha por la hija de Grandeeney provocó que todos los que conformaban el grupo se sorprendieran.

— Vaya, no esperaba esas palabras de tu parte.

— Es una Dragón slayer, era obvio que opinaría lo mayormente posible a lo que nosotros hacemos... Es parte de nuestro instinto —Respondió el chico con piercings a la vez que revolvía los cabellos de la peliazul, quien rió levemente ante esto.

— Hierritos tiene razón, aunque eso no quiere decir que alguno no pueda opinar distinto —Ahora fue el turno de Dragneel para hablar, quien con una de sus manos ordenó los cabellos de Wendy—  Es sólo que concordamos en muchos temas.

— Ahora que lo pienso... ¿Juvia lo sabe?

Todos miraron al pelinegro quien asintió ante la pregunta de Titanía.

— Lo hablé con ella hace no mucho, por lo que está completamente consciente del problema. Ahora ella tiene que ver como resolverlo.

Concluyendo eso decidieron cambiar de tema por otro, el hijo de Igneel agradecía internamente que sus amigos actuaran como siempre.

Regresando con cierta maga de agua quien estaba cerca del gremio se detuvo frente a una tienda en donde decidió entrar por unos instantes, admiró cada prenda que había en el recinto pensando en comprar una en específico después de realizar alguna misión.

Retomando su caminar llegó al gremio yendo directamente hacia el tablero de misiones saludando en el proceso a algunos magos, sobre todo chicas. Mirando algunos anuncios se decidió por tomar uno chocando su mano con la de otro mago, se giró levemente notando que era el dragón slayer de fuego.

— Natsu-san...

— Juvia... —Fue como un pequeño saludo entre ellos antes de quedar nuevamente en silencio, un tanto incómodo a decir verdad.

Natsu miró nuevamente la papel que iban a tomar y sonriendo como tan sólo él sabe volvió a mirar a la maga peliazul.

— Juvia, ¿y si hacemos la misión juntos?

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Porque mi extraño corazón no podía odiar por siempre a Gray no lo puedo dejar como el malo, amo demasiado a ese personaje para hacerle eso.

(Él es uno de mis tantos husbandos 7u7)

"¿Por qué carajos soy tan demorosa para todo?" Un pensamiento que cruzó por la mente de Xenia comparando fechas de diversos capítulos.

"¿Por qué me distraigo tan fácil?" Otro pensamiento de ella, quién sin darse cuenta dejó de lado el fic por mirar una mosca que la desconcentró completamente.

Pd: ¡Ctm! Mañana —O mejor dicho hoy en unas horas xD—, doy la PSU y no sirve de nada el maldito puntaje. >:P

Espero conseguir el puntaje para lo que quiero estudiar, si no pos a trabajar.

Nos leemos en el próximo capítulo~

El ; Del Corazón. - NaviaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora