.1.

106 11 10
                                    

A veces suelo pensar en como una pareja de 5 años de matrimonio y con un niño de dos años puede pasar de tener buenos momentos a directamente romperse todo en cuestión de cinco segundos y eso fue directamente lo que me pasó.

48 horas antes

- Ya está, se le había caído su peluche de Stitch - dije volviéndome a sentar otra vez en el sofá junto a emilio, el cual parecía estar de mal humor - Amor, ¿estás bien?

- No, no estoy bien Joaco. Me a manchado la chaqueta y las composiciones. Encima tú sabiendo que mañana tengo el ensayo general para el concierto de "Plaza Condesa" no lo vigilas.

- Emilio tranquilízate - le acaricie sus hermosos chinos - el solo quería jugar a ser diseñador como su papá.

Sabía que estaba teniendo mucha presión últimamente,  su manager no paraba de llamar un día sí y al otro también. Tiene muchos ensayos, los cuales terminan demasiado tarde y eso hace que el no pueda dormir bien. Lo que conlleva a que muchas veces este de mal humor y pierda los nervios.

- Últimamente has tenido mucha presión cariño- le empiezo a dar un masaje por los hombros - pero no deberías pagarlo con él, sabemos lo mucho que te esfuerzas tahi.

- Lose y encima e perdido los nervios con el que tiene menos culpa. Sólo quiero que todo salga bien, este concierto es el más importante, ya sabes que viene la productora y necesito que no haya ningún error.

- Emilio todo va a salir bien - le cojo de la barbilla para que me mire a los ojos - confía en ti, vales oro. Y ahora pon la peli.

- Es que ahora no me apetece - se levanta y se marcha hacia la habitación - me voy a la cama.

- Pero emilio.....

No sé, por qué, pero sentía que nos íbamos distanciando cada vez más. Y eso me estaba dando miedo. Me dirigí a la cocina para hacerme algo rápido de comer. Después de tomar un sándwich, me fui a dormir. La habitación estaba a oscuras, Emilio ya había caído en los brazos de Morfeo. Me puse el pijama y acto seguido me metí en la cama, le di un beso en la mejilla y me dispuse a dormir.

24 horas antes

Hoy era un día muy especial, el segundo cumpleaños de nuestro pequeño Nico. Me desperté gracias al reflejo del sol que se colaba por la ventana, aproveche el tiempo que tenía antes de que se despertara el pequeño para ir preparando mi desayuno y después proseguir con los preparativos de la fiesta que montaremos por la tarde en el jardín. Pero no estaré solo, sino que Niko y Diego (los padrinos de nicolau) me ayudarán con todo lo de la fiesta. Y os preguntaréis, que ahí de emilio, bueno pues tuvo que ir al estudio a grabar y después al ensayo final para el gran concierto de mañana.

Iba preparándome el café cuando escuché el sonido do timbre, directamente ni me moleste en preguntar quién era.

- Joaquín Bondoni Marcos, !se puede saber qué haces todavía en pijama¡- exclamó el rubio.

- Acabo de despertarme Niko, además voy a estar aquí en casa preparando las cosas con ustedes y no me voy a cambiar hasta que sea la hora de la siesta - empecé a buscar con la mirada al chino - A todo esto dónde está tu marido.

- Aparcando, pero déjame pasar por dios que parezco un vendedor de biblias. - entró directamente en casa. - Y emilio?

- Se fue al estudio y después al ensayo final para lo de mañana - dije sin mucho ánimo

- ¿En el cumpleaños de su hijo? Pensé que hoy se lo tomaría libre.

- Yo también pensé lo mismo, pero ya sabes que para el su carrera es demasiado importante. Sobre todo que ahora la estúpida esa de la tal steisy le a conseguido que el promotor americano vaya al concierto para así hacer una gira mundial. Y encima su padre está tan feliz de que ella sea su manager que.. agg es que la odio - empecé a ponerme nervioso y furioso.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jan 14, 2020 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Todo por la fama Donde viven las historias. Descúbrelo ahora