Chiquillo

6.4K 486 594
                                    

Hola a todos los que han llegado a "Chiquillo"
Está es la primer historia que publico en el 2020, aunque fue escrita el año pasado.
Antes de que inicien la lectura, quiero advertir que se trata de un fanfic con contenido "Shota" ¿Es necesario que les explique que es eso? No creo, y además imagino que por la imagen de portada se pueden dar una idea de quién es el adulto y quién es el niño.
Siendo sincera con ustedes, es la primera vez que escribo algo de este género y si les contara cómo fue que nació esta historia... Uff!! No se preocupen no crean que está basada en hechos reales.
También les advierto que hay algo de "Boruto" aunque no se si llamarlo "spoiler" porque lo cambio un poco, así que como tal no creo que sea apropiado advertir de eso.
Por último, si no saben que significa el título quiero decirles que en México "chiquillo" es una persona de poca edad.
Listo, se tenía que decir y se dijo... disfruten la lectura.

Chiquillo
Por: Adriana Jongcheveevat

Él era un adulto, y se suponía que esa etapa de su vida representaba estabilidad y vigor físico, esto último sabía que no le faltaba, al contrario seguía tan en forma como cuando era un joven ninja de dieciséis años que juraba vengar a su hermano y se enfrentaba a enemigos que muchas veces le doblaban la edad.

Sin embargo, la estabilidad era algo que en realidad aún no había logrado a pesar de ser uno de los ninjas más poderosos del mundo shinobi, solo después del hokage de la aldea oculta entre las hojas; seguía siendo un viajero errante aunque ya tenía una esposa y una hija esperándolo en casa; todos sabían, incluida su propia familia, que esa vida no era para nada lo que el Uchiha quería, no obstante él pensaba que tenía que sobrellevar dicha situación como parte de su penitencia por todos los errores y crímenes cometidos en su pasado.

Pero ahora, en ese instante de su vida, justo en ese momento, su supuesto y preciado equilibrio mental estaba a punto de desaparecer. Suspiró profundamente, no podía creer que se encontraba en la Konoha del pasado, en la época en la que él se había ido dejando todo atrás, ignorando advertencias, consejos y sermones de las personas que lo rodeaban, desatendiendo el afligido y conmovedor discurso de la persona que se auto proclamaba "su mejor amigo" suplicándole que no se fuera, nada le importo cuando partió en busca de tan ansiado poder que quería para poder enfrentar a su hermano mayor. ¡Cuán equivocado había estado!

Y si bien ahora no estaba ahí para remendar sus errores pasados, no podía evitar sentir nostalgia y arrepentimiento por no haber escuchado a cierto rubio que le decía una y otra vez que solo estaba cometiendo un terrible error al aceptar la propuesta de Orochimaru. En ese momento solo tenía como misión salvaguardar la vida y la integridad física de su amigo, ese que le rogó que no se fuera. Un nuevo enemigo ambicionaba el extraordinario y casi ilimitado poder del zorro de las nueve colas, el famoso "Kyubi" que residía en el Uzumaki y al no poder obtener el poderoso chakra en su tiempo actual había decidido acudir al pasado para robarlo, justo en una época en la cual Naruto aún no manejaba bien el poder el zorro, justo cuando se encontraba mucho más vulnerable.

Sin dudarlo acudió en compañía del hijo del hokage a la aldea del pasado para salvar al rubio de un poderoso enemigo como lo era Urashiki, sin embargo, nunca imaginó que se sentiría tan aturdido de ver a un Naruto de doce años, de observar cómo había vivido su amigo su partida y lo difícil que había sido para el Uzumaki soportar su pérdida. Nunca se lo preguntó, no se sentía cómodo hablando de sus fatídicas decisiones que lo llevaron a tener una vida que, sinceramente no disfrutaba. Así que la ansiedad y la inquietud que sentía de encontrarse con el rubio lo atormentaban.

Y como si la vida se burlara en su cara de su padecer, el rubio y su maestro de ese entonces, Jiraya, aparecieron en su camino. Su rostro no se inmutó, pero su corazón empezó a latir aceleradamente, no podía creer lo que sus ojos veían, un joven y escandaloso rubio de doce años estaba frente a él, y aunque parecía ser el mismo ninja revoltoso de siempre, lo cierto es que en sus ojos ponía notar una profunda tristeza, ellos hermosos ojos azul zafiro no brillaban como antes, estaban apagados, sin vida, sin fulgor. Tantos recuerdos golpearon su mente que dudó por un momento de poder llevar a cabo su misión: cuidarlo. Sabía de ante mano que cualquier interacción con la gente del pasado, por pequeña que fuera podría causar grande cambios en el futuro, podría alterarlo tanto que, gente de su época podía desaparecer para siempre.

ChiquilloWhere stories live. Discover now