Amor entre guerra

Capitulo III - Parte 1

Hi! mina-san ewe ... aqui vengo con la primera parte de este capitulo xD

espero que les guste :D

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Capítulo 3

Eren llegó rápido a la oficina de su sargento, un poco temeroso, de lo que podía encontrarse allí. Tocó la puerta bastante, y al abrirla lo primero que vio fue el libro, que si no fuera por su rápidos reflejos, se le hubiera estampado en pleno rostro, al recogerlo se dio cuenta que era ese dichoso y problemático libro.

- Dime Eren ¿Qué pretendías al hacer esas cosas en la biblioteca? – preguntó sombríamente Rivaille.

- Como le dije Sargento – replicó Eren – No es lo que parece – respondió sereno y confundido por el tono del mayor.

- ¡No me trates como a un tonto, mocoso! – gritó el sargento – Se lo que vi, y eran TÚ y Kirschtein besándose, con ese dichoso libro abierto – dijo señalando el libro que Eren todavía tenía en sus manos.

- Puede que sea complicado de entender señor, pero yo trataba de quitarle el libro a Jean – contestó serio el chico titán.

- Si, como no – dijo sarcástico Rivaille – Buena manera de hacerlo – espetó enojado, dejando entrever un poco sus celos.

- Sargento Rivaille – replicó entre molesto y cabreado el chico – puede que al ver visto ese libro, por estar prohibido nos amerite una sanción a mí y a mi compañero, pero… ¿no entiendo cuál es la relevancia de discutir un beso que ni siquiera tuvo sentido? – explicó ya queriendo irse de allí, odiaba cuando lo cuestionaban, y le dolía que su sargento no le creyese.

- ¡Me importa soldado porque su vida me pertenece! – dijo Rivaille molesto, sin medir lo que decía – desde que puso un pie en este cuartel, todo de usted es mío, yo soy el que decide por usted, piense que no es libre ya que su vida siempre ha estado en mis manos, si no mueres es porque yo no lo he querido – exclamó y al ver al chico se dio cuenta de su error, Eren lo miraba dolido, y sus ojos eran incluso más fríos que el propio hielo.

- Entendido señor, ahora si me disculpa seguiré con mis deberes – Eren hizo amago de retirarse, odiaba saber que solo era un objeto más para Rivaille, a pesar de ser un mounstro, él era alguien con sentimientos.

- Espera… Eren – dijo el sargento un poco abrumado, al ver que Eren seguía con la intención de irse – Es una orden – replicó y el joven no tuvo más opción que obedecer.

- ¿Qué quiere de mí? Sargento – preguntó el chico titán acercándose a Rivaille, estaba demasiado frustrado  - no sé qué es lo que espera de mí, trato y trato y nunca llego a un punto neutro.

- Solo esperamos lo que nos puedas dar… como esperanza de la humanidad, Eren – dijo Rivaille incomodo por la cercanía del su mocoso.

- No pregunté eso – replicó un poco molesto el adolescente - ¿Sabe sargento? – preguntó Eren recargándose en los apoyabrazos de la silla de Rivaille, mirando intensamente al azabache, sin dejarle escapatoria – Usted puede tener todo de mí, pero el espíritu dominante que tengo, solo sale si usted es él involucrado – dijo maliciosamente – Yo no quiero ser dominado por usted.

- No me jodas mocoso – contestó Rivaille nervioso y molesto, la cercanía de Eren lo tenía tenso, podía sentir ese mirada que hacía que le dieran placenteros escalofríos.

- Con su actitud solo me doy cuenta de una cosa, Sargento – susurró Eren en su oído, haciendo que Rivaille lo mirara a los ojos, perdiéndose en  esa mirada que lo veían como si él fuera una presa y Eren el cazador.