La situación era bastante extraña. Ray estaba abrazado cariñosamente a Wen, mientras se daban mustras de afecto en una parte de la capicueva. Por otro lado, en el sillón giratorio, Henry estaba sentado sobre Jasper, acariciando su mejilla con la del alfa, para impregnarse con su olor, y a veces dando besos en ella, repitiéndole que lo amaba.
De vez en cuando Jasper acariciaba su cabello para complacerlo, solo para que no se enoje, y recibiendo ronroneos felices del omega, que liberaba feromonas alegres.
Ambos betas se habían acostumbrado a ver a Ray y Henry así (tal vez no en ese extremo) pero si dándose besos y algunas veces al rubio en el regazo del mayor, pero ver a los dos mejores amigos juntos... era extraño.
Charlotte y Schwoz se encontraban buscando información en los monitores, sin saber muy bien qué hacer con ambos chicos para que se les pase el efecto de los muffins de Wen.
La mujer, en cambio, se notaba feliz y los miraba de forma malévola, claramente tenía un plan trabajando en su estúpida mente (como la llamó Charlotte) al ya saber las identidades de Capitán Man y Kid Danger.
Wen le susurró algo al alfa, que ninguno pudo escuchar excepto él, quien asintió y le dio un beso. Después de eso, la mujer se fue por el tubo, dándole un mirada triunfante a los betas.
Cuando ya no estaba, ambos fueron con el alfa, quien sonreía embobado hacia donde antes estaba la omega.
"Ray... Wen te hizo un hechizo, o algo así" habló Charlotte, "ella le puso algo a sus muffins y después te los ofreció para que te enamoraras"'dijo seria.
"¡Esa mujerzuela te está utilizando, Ray!" soltó de pronto Schwoz, alzando la voz, llamando un poco la atención de Henry y Jasper.
"¡Wen no me está utilizando! ¡Nos amamos!" a pesar de que Ray estaba usando la voz, ninguno de los betas se intimidó. El único omega presente se escondió en el cuello de Jasper mientras lo abrazaba, y el rizado solo le daba palmaditas en la espalda.
"¡Lo que pasa es que eres un anciano, y no puedes entenderlo!" Charlotte dio en el clavo, sabiendo lo mucho que le molestaba a su jefe que digan cosas respecto a su edad.
"¡¿ANCIANO?! ¡Solo tengo treinta y dos!" se enojó, liberando feromonas. "¡Y parezco de veinticinco!"
"¡No es cierto, Ray!"
Así siguieron por unos minutos, peleándose y enojándose el uno con el otro, mientras Schwoz se alejaba lentamente de ellos.
Cuando Ray fue a agarrar una de las armas para apuntarle a la beta, sintió un dolor de cabeza profundo, que hizo que se lleve las manos a esta zona.
Empezó a tambalearse hasta que finalmente cayó en un golpe seco al piso, que pareció resonar en toda la capicueva. Charlotte y Schwoz fueron rápidamente con él, que de a poco se iba despertando.
Jasper también quiso ir. A pesar de no tener buena relación con su jefe, se preocupó por el estado en que estaba.
"Quédate conmigo" susurró Henry en su oído, mordiendo a penas su cuello y liberando un poco de sus feromonas. El ruloso rodó los ojos, sin embargo, se quedó.
Ray quedó acostado en el piso, boca arriba y parapadeando confundido. Recordaba pocas cosas de lo sucedido.
"¿Ray...?" preguntó cautelosamente la chica. "¿Eres tú de nuevo?"
"¿Recuerdas lo que pasó?" le siguió el hombre, haciendo que se siente en el piso, de espaldas a Henry.
"S-si, soy yo y... Al-algo" murmuró, llevándose una mano a la frente. "No debí aceptar esos estúpidos muffins de la chica... Eh..." chasqueó un poco los dedos, "Wen".
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𝐌𝐔𝐅𝐅𝐈𝐍𝐒 𝐃𝐄𝐋 𝐀𝐌𝐎𝐑
FanfictionHenry y Ray estaban iniciando una especie de relación, pero las esperanzas de Henry de formalizar se van a la basura cuando ray le cuenta a él y los demás que se va a casar con una linda omega, la cual no tiene ni dos días de conocerla. 𝗼 Henry ama...