PARTE ÚNICA

86 9 27
                                    

ADVERTENCIA: Si hay algún error ortográfico agradecería hacermelo saber.










Sentado sobre aquel banco algo desgastado Seokjin no sabía exactamente cómo es que había terminado en ese bar a las once en punto, él, un hombre que se caracterizaba por salir muy pocas veces o no hacerlo prácticamente. Un hombre de negocios como él ya no podía verse involucrado en situaciones como estas, tenía una reputación que mantener.

Él simplemente no lo supo, pero ya se había dejado arrastrar por su amigo Taemin a aquel bar decorado pobremente, con luces neón que no dejaban visualizar adecuadamente los rostros de personas que buscaban divertirse desesperadamente. Bebidas por aquí, música en muy alto volumen, chicos y chicas que intentaban ligarse entre sí, posiblemente buscando algún polvo de una noche; no era exactamente a lo que estaba acostumbrado. Desde que llegó se sintió literalmente fuera de lugar.

Hacía rato había perdido de vista a Taemin, el cual posiblemente estaba besándose con algún desconocido por algún rincón de aquel establecimiento. Ya no lo aguantaba y posiblemente iba a permanecer ahí por algunos minutos más antes de mandarle un mensaje a su acompañante avisándole que se iría a casa, incluso los pantalones que traía puesto le eran incómodos.
Se había bebido shots de tequila cuando escuchó a alguien sentarse a su lado.

―Mierda Taemin, te dije que no me gustaría este lugar, creo que ya me iré― casi gritó para poder ser escuchado por encima de la música volteándose ligeramente y percatándose de que no era su amigo al que le había hablado sino un chico de cabellos oscuros. ―Oh, lo siento, creí que eras mi amigo― dijo mientras el susodicho lo miraba intensamente.

―No pasa nada― sonrió ligeramente hacia el mayor. ― ¿es tu primera vez aquí?

―No, no, bueno sí, vine con un amigo que al parecer olvidó que venía acompañado― sonrió ligeramente hacia el desconocido, extrañamente no se sintió cohibido y lo atribuyo al hecho de que ya se había bebido algunas copas― ¿y qué me dices de ti?― un pequeño destello en los ojos del contrario lo abrumó, el chico al menos era unos diez años menor que él, si es que éramos positivos, de cabellos negros que caían desordenadamente sobre su frente, la piel de su rostro era blanquecina con pequeñas pecas que apenas se podían visualizar por la poca iluminación del lugar, ojos negros, muy parecidos al de un gatito, suaves labios de rosas que eran mordidos ligeramente, todo en aquel muchacho era precioso.

―Suelo venir mucho aquí, me relaja― crispó los labios― no es por ser insistente o algo así, pero aun no me has dicho tu nombre.

―Seokjin― casi gritó― me llamo Seokjin― se encogió de hombros―Me gusta, Seokjin, me llamo Yoongi. ―dijo mientras acaricia con la yema de los dedos el brazo del mayor. Un ligero escalofrió se instaló en la espalda del rubio ante esta acción. Una pequeña sonrisita se formó en los labios del contrario.

―Creo que ya es... algo tarde, debería irme ya― cogió su chaqueta que estaba sobre una de las sillas y se puso de pie para retirarse, el pelinegro no perdió tiempo y lo sostuvo de la muñeca― Vamos, al menos bébete un trago conmigo, no te voy a comer, si es que no quieres, cariño. ― por alguna extraña razón el mayor accedió a aquella propuesta y se sentó. ―Pediré otra ronda, yo invito― dijo mientras llamaba a uno de los camareros. Un chico delgado de un escandaloso cabello rojo se acercó hacia la mesa que compartían, era bastante alto, traía una camisa blanca con algunos botones sueltos que se ceñían sobre un delgado, pero bien trabajado torso, el pantalón negro se amoldaba a unas esbeltas piernas. Seokjin se preguntó si acaso todos los que iban a aquel lugar era modelos o alguna cosa así pues no comprendía como es que podían verse tan bien con ropa tan común.

Cuando el pelirrojo se acercó lo suficiente pudo percatarse que también traía unos aretes. Él simplemente no dijo nada mientras veía como su nuevo acompañante pedía otra ronda de tequila mientras movía las manos, como utilizando algún extraño código entre ellos dos; al despedirse pudo percatarse como el pelinegro le daba una pequeña nalgada al camarero y este solo se volteaba sonriendo maliciosamente, al parecer se conocían muy bien.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: May 06, 2020 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Entre besos y tragos [SuJin/YoonJin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora