03. Love me as shit |YM|

5.

-¿Jimin? —Preguntó al aire YoonGi, justo en el momento que, al tantear a su lado, no encontraba al mayor.

Se sentó sobre el colchón y su espalda se mantuvo recargada en el respaldo de la cama, con su mano derecha tallaba sus adormilados ojos, para finalmente soltar un bostezo.

-Has despertado —Afirmó el mayor, que se encontraba entrando nuevamente a la habitación, solo que esta vez acompañado de una taza de café— Te preparé esto...Espero te guste.

YoonGi le sonrió aún con sus ojos un poco entrecerrados, y con un pequeña inclinación, aceptó la bebida tomando de ella.

Dos tragos le bastaron para suspirar satisfactoriamente, en señal de que era de su gusto, y para también crear un silencio difícil de explicar.
Jimin tomó asiento a la orilla la cama, justo a su lado, sin dejar de verlo de una manera inquietante.

-¿Sucede algo? —Preguntó Min tomando nuevamente de la taza— Me estás mirando de una manera muy extraña.

El rubio soltó una incómoda risa— Lo siento, simplemente...No puedo creer que estés aquí.

-Pues hazlo rápido, porque tú mirada me asusta —Después de decir aquello, de manera distante, se levantó del colchón obligando a Jimin a hacer lo mismo, solo que este le veía confundido.

-Disculpa, ¿Te molesta haberte extrañado con todas mis fuerzas, y que finalmente al tenerte frente a mi, sienta como si fuera un sueño del cual no quiera despertar? —Se encontraba ligeramente ofendido por la actitud del pálido, quién a mitad de la alcoba suspiró y le encaró nuevamente.

-No es eso.

- ¿Entonces? —Jimin se encaminó de igual manera hasta dónde se encontraba el otro— Mira, si solo viniste hasta aquí por un poco de sexo, puedes tomar tus maletas de regreso y volver a donde sea que estuviste dos malditos meses, de los cuales, por cierto, no supe absolutamente nada de ti —Chocó hombro con hombro para después salir de la habitación, totalmente con sus ánimos en el suelo.

Sus pasos fueron directamente a la cocina, tenía que hacerse desayuno ya que su turno comenzaba en una hora, y ni siquiera había tomado una ducha.

Por su parte, YoonGi rodó los ojos una vez solo en la habitación, suspiró negando con la cabeza y de un solo trago terminó casi toda su taza. Caminó igualmente a la cocina, dejando el recipiente sobre la barra, y encontrándose con un Jimin partiendo verduras más enojado que nunca.

-Lo siento —Fue lo primero que dijo el menor una vez llegó ahí, pero no obtuvo respuesta alguna— No me expresé bien, no soy una persona de mañanas y...No lo sé, no pensé al hablar y mi intención no era herirte. Solamente me sentí extrañado de qué me vieras tan fijamente.

Jimin vertió agresivamente un puñado de diferentes verduras sobre una sartén previamente calentada y con poco aceite, volvió a poner la tabla y el cuchillo sobre la repisa de apoyo, y le vió más intensamente que la vez anterior.

-Ah ya veo...Eso resuelve tu manera de ausentarte dos meses —Nuevamente su torso se giró, volviendo con su comida que tenía que ser revuelta— Sin embargo, también disculpame por ponerme tan a la defensiva, pero ¿sabes cuál es el problema?

YoonGi le aceptó su disculpa desde sus adentros, mientras que el rubio dejaba la estufa para dirigirse a su refrigerador.

- ¿Cuál es? —Min tomó asiento sobre uno de los bancos junto a la barra.

-El problema es... —Su voz sonaba amortiguada, debido a su inclinación buscando el siguiente ingrediente— ...Qué por dos meses no supe absolutamente nada de ti, no contestabas el teléfono, HoSeok parecía tu maldita contestadora diciendo una y otra vez: "Yo no puedo decirte, YoonGi lo hará" ...—Sacó un recipiente transparente y con un portazo cerró el refrigerador— ...Cada noche dormía con una ansiedad por saber de ti, me decía a mí mismo que estabas bien y, de alguna jodida manera, llego después de una jornada agotadora a casa y resulta qué...—Destapó el recipiente y sirvió el arroz que había dentro de él sobre la sartén, agregó un poco de mantequilla y con fuerza comenzó a mezclarlos—...Tu, todo un experto en rebeldía callejera, entras a mi departamento como si fuera tu casa, dejas tus maletas sin una jodida nota y sales a quien sabe dónde. Haces que mis nervios salgan a flote por una gigantesca confusión, vuelves nuevamente como si nada, me preguntas si quiero una jodida ramen y después tienes sexo conmigo. Y justo cuando después de eso quiero hablar sobre lo ocurrido, sobre cómo coño entraste aquí, decides hacer que guarde silencio y duerma, entonces yo a la mañana siguiente te hago un puto café y admiró tu jodida belleza, creyendo que todo es irreal para que tu, el señor Min YoonGi quien no es persona de mañana, me respondas como si solo tratara de joderte la vida.— apagó la estufa y se dió media vuelta— Eso amigo mío, es mi maldito problema de hoy.

YoonGi le vió sin expresión alguna, totalmente bombardeado por todos los reclamos dichos.
Los cuales eran ciertos, sin embargo también era claro que el enojo de Jimin los exageraba aún más.

—Yo... —

—Tu nada YoonGi —De nuevo, suspiró sonoramente y comenzó a servirse la recién comida hecha. Una ves sentado sobre la barra volvió a hablar— No quiero sonar exagerado, obviamente ya lo hice, pero de verdad es que tu...-

—Tienes razón —el menor tomó lugar frente a él, viéndole directamente y recargado sobre la superficie— Mereces explicaciones que ahorita no puedo darte.

Y aquello fue el colmo para el mayor.

Soltó su tenedor y la comida dentro su boca dejó de ser masticada, para ver sin expresión alguna al contrario. Totalmente en su punto de explosión

—¿Me estás bromeando?, De verdad ¿Es en serio? —volteó los ojos y se puso de pie— Simplemente eres increíble.

—Jimin espera —Pidió cansino cuando vió al contrario empezar a tomar sus cosas y meterlas dentro de una mochila negra— No dije que nunca te voy a explicar, solo...-

—¿Solo ocupas un año más para abrir tu maldita boca? Muy bien, mientras tanto yo estaré en el trabajo —Chocó con su hombro al contrario después de dirigir su camino a la salida— Y como ya me dejaste en claro que tienes confianza para estar aquí, en la estufa y refrigerador hay comida, la clave del internet está a un lado del televisor y pues irte al demonio. Adiós.

Y sin más, cerró de un portazo la entrada principal.

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Holaaaaaaa

No me morí, andaba llorando en mi habitación u.u

MIL DISCULPAS POR LA TARDANZA
Los golpes de bloqueos son horribles.
Pero espero poco a poco estar más al corriente en mis historias, tengan paciencia xfa.

Y bueno ¿Les gustó?
Creo que ya saben para dónde se va la trama de esta historia jiji

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I'm just saying...👀

Cuídense, les amo.