Rescue Me [Sterek]

Capítulo 8/ Ojos rojos

Cuando Stiles llegó de la escuela no pudo evitar derrumbarse una vez dentro de la casa, se preguntaba qué empeño tenía la vida en hacerlo sufrir y que lo maltrataran, no lo entendía, lo único que quería era un poco de paz y creía que al llegar a este pueblo la conseguiría pero no, lo único que había logrado era encontrar más golpes y personas que lo rechacen, no había sido mucho el cambio y le dolía no tener a su amigo pero estaba haciéndolo por él, estaba soportando todo por su pequeño amigo... Aquel que tanto lo había ayudado desde que era un niño y que siempre lo ha defendido, así que se permitió desahogarse y calmarse para evitar un ataque de pánico que no pudiera controlar pero eso sí, recordaba la forma en como aquel chico azabache lo había defendido y por alguna razón... Lo atesoraba. Una vez que se calmó, se dispuso a subir a su habitación y bañarse, cambiar su ropa puesto que esa le traía malas sensaciones por lo sucedido esa mañana y luego saco sus cuadernos y los que el chico Scott le había prestado para ponerse al día y por suerte no era mucho lo que habían estado haciendo esas semanas, otra cosa era esa, Scott, el chico le había agradado como amigo y era el único que se había comportado bien con él, que no lo miraba como bicho raro o algo más sino que intentaba hacer que se olvidará de lo malo que las personas comentaban de él a su alrededor, como lo hacía Liam y lo agradecía aunque él sabía que las personas cambiaban y lo mejor no era hacerse ilusiones con amistades así que mejor dejaría que el tiempo pasará, siendo así dejo sus pensamientos de lado ( o eso trato) puesto que una parte del suceso no dejaba de rondar su mente y eso lo abrumaba lo cual para él no era bueno.

Llegada la noche, Stiles ya había hecho sus tareas y puesto al día con sus libros y cuadernos. Se preparó un sándwich y un vaso con leche y eso fue lo que ceno; cuándo llegó el momento de irse a dormir su mente reproducía una y otra vez la escena de hoy en la escuela lo cual le daba tristeza e impotencia pero también algo sobrecogía su corazón de una forma que hacía mucho no sentía, la forma en que aquel hombre de cabello azabache y ojos verdes lo había defendido, lo había hecho sentir seguro de alguna manera, nunca nadie, aparte de Liam, lo había defendido. Soltó un suspiro resignado y no fue consciente de su comisura elevada en un intento de sonrisa, él pensaba que el azabache seguro lo hizo por le daba lástima, así que simplemente cerró los ojos y decidió dejarse llevar si es que podía dormir a causa de las pesadillas y por más que no quiso pensar, la mirada del mayor se venía una y otra vez a su mente... Consiguiendo que por muy extraño y loco que pareciera, por primera vez en años, pudiera dormir solo con un recuerdo bueno.

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A la mañana siguiente stiles se levantó temprano, se estiró una vez sentado en la orilla de la cama y se puso de pie para irse a bañar. Por otro lado Scott y la manada estaban casi igual, Scott se levantó de la cama adormilado que ni cuenta se dio que iba contra la pared del cuarto de baño de su habitación hasta que sintió el golpe en su frente:

— ¡Auch! - exclamo quejándose sobándose la zona afectada. -

Derek quién estaba en la sala de su loft tomando un café tranquilamente mientras leía el periódico al escuchar el golpe detuvo su tasa de café caliente a medio llegar a sus labios cuando escuchó el golpe y la queja, enarco una ceja mirando en dirección hacia el pasillo de la habitación de Scott y luego siguió como si nada mientras que Scott finalmente entro al baño consciente.

Minutos después ya stiles estaba listo así que salió de su habitación, caminó por el pasillo hasta las escaleras, bajó y se dirigió a la cocina por un café.

Por otro lado, Scott salía corriendo de su habitación con la mochila en su hombro.

— ¡Derek! ¡Date prisa, vamos...- la palabra quedó en el aire al verle tan relajado y bebiendo terminando su café - ¿Porque estás tranquilo? - pregunto con el ceño fruncido confundido - entramos en 20 minutos a la escuela y tú ni siquiera te mueves - Derek le señaló el reloj en la pared, Scott extrañado miró y cuando vio que apenas eran las 6 y 20 minutos, dejo caer la mochila de su hombro y miró a Derek quién lo miraba con burla - Adelantaste mi reloj, ¿Cierto? -