De Herrores Y Orrores [Jikook]

58

— ¿Vas a dejarme mi carta o me tendrás esperando por más tiempo?

Jungkook se quedó petrificado en su lugar y con la mano con la carta en el aire sin ser consciente de que estaba conteniendo el aliento hasta que sintió ahogarse, respiró temblorosamente y lo más despacio que pudo para evitar atragantarse mientras sentía que su corazón estaba a punto de salirse de su pecho.

Se giró poco a poco con las piernas temblándole como gelatina, nunca lo había escuchado hablar, o al menos no de cerca, pero estaba cien por ciento seguro de que aquel timbre de voz era perteneciente al de su querido crush. Su mirada se mantuvo gacha cuando se volteó, lo primero que vio fueron unos tenis blancos y unos pantalones de mezclina azul marino. A pesar de que él sintió una eternidad, Jimin se mantuvo paciente en su lugar sin decir nada hasta que Jungkook tomó una gran respiración y decidió subir la mirada encontrándose con una sonrisa y cálida mirada que le derritieron el alma y causó estragos en su pobre corazón.

— Hola Jungkook, al fin nos conocemos.

Los labios de Jungkook se movieron sin emitir sonido alguno por más que intentara decir algo, simplemente las palabras no salían. Vio a Jimin fruncir el ceño, sin embargo la sonrisa nunca se borró. 

— ¿Qué pasa? En las notas eras muy hablador.— volvió a decir Jimin riendo, en un intento de que el muchacho frente a él le contestara, quería escucharlo hablar. Sus ojos recorrieron sin disimulo al castaño frente a él y se detuvieron en la carta que tenía aferrada en su mano.— ¿Puedo tomarla?

— Yo... N-no, es... es personal.

— Pero esa carta es mía, ¿no?— ladeó la cabeza Jimin.— Ibas a ponerla en mi casillero ¿No es así?

— Sí, pero... pero ya no.

— ¿Ya no?— cuestionó Jimin riendo.— ¿Por qué? Estoy muy curioso por el qué me habrá escrito aquel chico misterioso que deja notas en mi casillero después de dos semanas de desaparecido.

En ese momento algo en Jungkook hizo clic. 

— ¿Cómo sabes que soy yo?— preguntó Jungkook ladeando la cabeza completamente confundido, ya que Jimin lo había saludado como si realmente lo conociera, como si supiera desde el inicio que era él.

Vio a Jimin abrir los ojos y sus labios fruncirse, para luego dar paso a un fuerte sonrojo en sus mejillas.

— Es... Ya sabes... No creo que... Yo...— lo escuchó balbucear cosas sin sentido, sus miradas se cruzaron y Jimin le manda una mirada avergonzada para luego entrecerrar los ojos.— Fue tu culpa ¿Ok?

—¿Mi culpa?— boqueó Jungkook.— ¿Por qué es mía?

— Claro que si, no te hagas el desentendido Jungkook.— recriminó Jimin.— Primero me mandas notas mal escritas, luego le pides ayuda a Jin Hyung.— dijo pronunciando lo último en tono de burla ganándose un gesto de asombro por parte de Jungkook.— Que pareciera que lo hicieras a propósito con todas las veces que lo mencionas, por cierto. Luego, no quieres que nos veamos y como si no fuera suficiente para confundirme más, me dejas de hablar. Y todavía preguntas por qué es tu culpa.

— En primer lugar, te recuerdo que mandarte notas nunca fue parte de mi plan, solo me iba a declarar.— dijo Jungkook olvidando momentáneamente la vergüenza de tener a su crush frente a él.— Y tú fuiste el que me dijo que tenía que mejorar, por eso le pedí ayuda a Jin huyng, no entiendo porque le haces burla y eres grosero cuando ni siquiera lo conoces.

— No necesito conocerlo, gracias.— interrumpió Jimin.— Y te dije que necesitabas mejorar, ¡Te hice un bien!

— No he terminado, Jimin.¿Por qué te comportas así?— reprochó Jungkook haciendo que Jimin frunciera los labios.— Te aclaré que no quería que nos viéramos porque me daba pena, ¿acaso no lo recuerdas?. Además qué haces recriminándome cuando tú ya acababas de conocer a alguien, ¿qué esperabas que hiciera? Simplemente no podía hablarte.