Con mil pretendientes y yo sin ganas. puuff!!

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Llego en un momento de mi vida en que estaba perdida no sabia que hacer, intentaba que las cosas fueran para bien,pero no podía más el mundo se me caía encima. Ya no quería saber nada de nadie que pedí a mi madre que me lleve a la casa de mis abuelos y estuve allí una temporada, y tuve mucha suerte porque no me acordaba nada malo,solo cosas buenas, no tenia tiempo de pensar en mis demonios, mis primo hacían que yo estuviera despejada total de todo.

Me encanta estar allí, poder respirar otra vez, sentirme querida por todos, es lo mejor.

Como no pudo llevarme mi madre, tuvo que llamar a mi tía, para que me recoja. Tuvimos un viaje bastante largo y cansado,pero mereció la pena.

Cuando llegue vi que cerca el rancho de mis abuelos había una cancha muy grande, ya que ahí estaban practicando fútbol. Al pasar por allí todos se me quedaban mirando raro, como si me desnudaran con los ojos, pero no le di mucha importancia a ello.

Al llegar vi a mis abuelos sentados en el porche, mi abuelo con un bastón de madera muy bonito y mi abuela con su cabellera con canas ya y con trenza. Al llegar y verlos así me puse a llorar, porque ver que el tiempo pasa muy rápido y no poder estar con ellos, duele mucho en verdad.

Abuela: mi hija querida, te extrañamos muchísimo.

Abuelo: has crecido tanto, no puedo creer que ya te estas haciendo toda una mujer. Muy pronto tendrás mucho pretendientes- mi tía que se metió en la conversación les contó lo sucedido al pasar por la cancha, yo estaba mas roja que un tomate y mi abuelo solo reía.

Me dejaron ir a dejar las cosas y acomodarme un poco

-Nunca vi a los chicos mirar así- dice mi tía con cara picarona-porque sera?-

-Que quieres decir tia?-

-Que creo, que no te van a dejar sola aquí. Tendrás muchos pretendientes eh sobrina.-

-Ya basta tía-le dije con un poco de molestia ademas no estaba en esa situación de enamorarme y mas de lo que pasó en mi otra casa.

Para despejarme un poco mi prima me enseñaba los lugares aunque en verdad no había mucho que mirar, y así pasando la tarde conocí a toda la familia, primos, tíos, sobrinos.. etc, que de seguro se me olvidarían sus nombres al día siguiente.

Al día siguiente se acerca mi prima y me dice que unos de los chicos que estaban jugando al fútbol que quiere conocerme, a mi no me apetecía mucho la verdad pero acepte, había venido para divertirme así que no puedo decir que no, porque se daría cuenta de que algo me esta pasando.

Sentadas en el jardín aburridas sin saber que hacer, fue llegando un chico, para mi gusto no estaba mal, era un poco moreno, de ojos color miel igual que el cabello, muy alto 2'15m. Nos presentamos un poco y estuvimos hablando ya que mi prima nos dejo sola.

Mi vida sin sentido!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora