Siempre juntos

capítulo 15

Estoy muy molesto, Adrién se ha ido corriendo, seguramente a buscar a Marinette. Empiezo a caminar, quiero estar lo más calmado posible para hablar con Marinette, pasan unos minutos y le llamo, sin embargo no me contesta.Doy la vuelta al parque, estar ahí me calmará bastante.

Voy caminando y en una banca están Marinette y Adrién sentados, seguramente le esta contando lo que pasó.

Me acercó un poco más, Marinette se pone de pie, Adrién le ha dicho algo y ella se ve conmocionada, doy más pasos y de pronto se besan.

Sentí horrible, no había vuelto a tener este sentimiento desde hace años, desde que Marinette y yo nós hicimos novios todo a sido hermoso, hemos pasado distancias y eso, pero mi corazón siempre ha estado feliz.

Siento pánico, si, pánico me da terror pensar que Adrién logre lo que me dijo, que Marinette despierte lo que en algún momento sintió por el y entonces yo la pierda, todo por un malentendido.

A caso Adrién tendrá razón? Yo no amo a Marinette como debe ser? A caso dejar que ella sea libre, fuerte y autosufuciente no es lo que debo hacer para demostrar mi amor, admiración y devoción por ella?

Quiero quedarme y explicar lo que pasó pero mi pánico es más fuerte así que me voy sin ser visto, debo calmarme.

Voy caminando sin darme cuenta de nada y mi teléfono suena, pero no contesto, no tengo el valor para hablar sin quebrarme.

Hace tanto que no vengo aquí, quería venir cuando todo estuviese en su lugar y que ella estuviese a mi lado, pero necesito sentirme seguro. Entro y me siento en el suelo, los recuerdos vienen a mi cabeza. El día que traje a Marinette aquí, la vez que la encontré dormida, las veces que venimos de noche a escondidas a mirar la luna.

Respiro lento y profundo, logro calmarme. Debo hablar con Marinette, tiene que escucharme. Saco mi teléfono del bolsillo y antes de desbloquearlo entra la llamada de Marinette.

Dudo al contestar, pero al segundo repique contesto.

Lu—Marinette...

M—Luka?—un silencio que parece una eternidad me hiela la sangre—debemos hablar, donde estas?

Lu—te veo en el puente esta bien?

M—de acuerdo...

Lu—te amo!—ella ha colgado, no se si me ha escuchado. Él pánico vuelve a mi, la he perdido?

Salgo y camino hacia él puente, jamás en la vida había estado tan asustado como hoy.