La 13va poseedora (Akise Aru y tu) [Cancelada]

Capítulo 17

Un hombre de cabello rosa y ojos del mismo color se encontraba llegando a su casa.

Al entrar pudo percibir el olor de la comida, dejando su maletín en el sofá, se fue acercando a la cocina, al estar en la puerta pudo observar  a su esposa la cual tenía unos hermoso ojos morados y su cabello tenía el mismo color, ella se  encontraba haciendo la cena mientras tarareaba una canción, decidió que lo mejor seria ir a su habitación a cambiarse por algo más cómodo , al darse vuelta observó a un pequeño niño de unos 3 años viéndole con un brillo en sus ojos, el solo se agachó y abrió sus brazos.

-PAPÁ- gritó el pequeño niño mientras corría a los brazos de su padre

En el momento en el que su hijo lo abrazo un gran sentimiento de culpa lo invadió, sabía que estaba haciendo mal pero su lujuria podía con él así insitandole a seguir con su amante.

Término por corresponder el abrazo que su hijo le proporcionaba, lo cargo y fue hacia la cocina donde depositó a su hijo en una de las sillas.

Amaba a su familia pero también a sus deseos .

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En la habitación de un Hotel se podían escuchar el sonido de las pieles chocando, los jadeos y gemidos, en ese momento solo eran aquellos dos individuos entregándose el uno al otro como las anteriores veces.

Ya habían olvidado cuántas veces se habían hecho uno pero eso realmente no importaba, todo a su alrededor desaparecía cuando solo estaban ellos dos solos.

Entre ellos solo había actos sexuales no había ni abrazos, palabras bonitas o el "Te amo" dos palabras que anhelaba aquella mujer castaña la cual no podía articular ninguna palabra ya que el placer dominaba en ella.

Puede que aquel hombre no recordara cómo conoció a la chica que penetraba sin embargo la chica si lo recordaba ya que ese era su recuerdo más preciado pero lo que no sabía aquella mujer es que se estaba metiendo con un hombre casado.

Los dos habían sido dominados por el placer que olvidaron protegerse.

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Su esposa se encontraba distante con él, empezaba a temer de que su esposa se hubiera enterado de que le era infiel, su temor aumentó cuando su esposa le dijo que tenían que hablar.

-Escucha cariño se que he estado un poco distante pero es porque te tengo una sorpresa

La mujer le tendió un caja bien decorada, el lo tomo y justo su hijo intrigado se quedó observando la escena.

Abrió la caja con temor a que fueran fotos de su infidelidad.

Dentro de la caja había dos pañaleros de color amarillo un color neutral cuando no se sabe si el bebé es niño o niña, había dos gorritos del mismo color y dos pares de zapatos del mismo color.

Esa sorpresa lo había tomado con la guardia baja, iba a tener otro bebé.

-¿Estás embarazada?

La mujer solo asintió con una sonrisa.

-Esto me hace muy feliz, amor pero ¿porque dos pares de zapatos?

-Porque van a ser dos

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