Una vez me fui corriendo y llorando por una chica, en eso mi amigo me pregunta por qué estaba tan triste y yo le respondí “sabía que ella me amaba pero no supe valorar todo el cariño que me dió, por eso ahora estoy llorando...” Él me respondió:

Lloras por ella porque sabes que ella algún día lloró por ti...

Y fue ahí que me dí cuenta de cuánta razón tenía mi amigo.




Remitente desconocido

Pensamientos de una escritoraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora