Mi diario

"Hasta que la muerte nos separe"

He crecido y aun así no entiendo  cómo te has podido ir así, dejándome sola con un gran problema, que sola tuve que solucionar. No sé si te acuerdas aquella tarde de diciembre que el sol brillaba con todo su esplendor y hacia unos 35° de temperatura, fuimos a comer un helado, yo tenía puesto un hermoso vestido rosa y vos tenias puesto una camisa blanca, con un jean azul, tirantes y un moño, nos gustaba vestirnos a la moda de aquellos días. Aquella tarde te conté lo que había hecho el papa de mi hermana, como le pegaba a mi madre, come me tocaba y nos maltrataba. Vos te habías enojado, tenias ganas de matarlo. Yo intentaba consolarte y que te tranquilizaras. Me senté en tus piernas y te abrace. Me dijiste que nos escapáramos juntos, que  me protegerías, que te quedarías conmigo toda la vida.”HASTA QUE LA MUERTENOS SEPARE” recuerdo que dijiste bromeando. Yo accedí, me gustaba la idea de no viv ir en ese infierno y vivir contigo. Esa noche en mi casa, vos no  quisiste tirar al papa de mi hermana por las escaleras, vos solo querías salvarme y el te intento pegar. No fue tu culpa él empezó el forcejeo, sin querer lo tiraste por las escaleras. Después de llamar a  emergencias para intentar salvarlo darnos  cuenta que ya era tarde, que ya estaba muerto. Vos dijiste que te ibas a quedar con mi madre, con mi hermana, y conmigo y nos  cuidarías. Yo para  calmar  los nervios del momento te respondí “HASTA QUE LA MUERTE NOS SEPARE”  y vos me respondiste “CLARO” con una sonrisa y luego un abrazo. Más tarde esa  noche, al ver lo  deprimida que estaba mi hermana, la angustia  en los ojos de mi madre y mi preocupación, vos me dijiste que  te sentías culpable, pero no le di mucha importancia. Solo te dije  “todo va a estar bien”. Cuando  nos despedimos esa noche, te dije que te amaba y luego te di un beso. Vos simplemente me dijiste “te amo”  “adiós” muy seco, frio y amargo, tu amarga despedida me preocupó un poco pero yo te respondí “recuerda querido, hasta que la muerte nos separe” si saber que esas iban a hacer las últimas palabras que te diría. Quien iba a decir que te suicidarías por sentirte muy culpable, que no te atreverías a volver a mi casa y que no te querías borrar de mi vida  o “irte sin mi” como decía tu carta. Pero te fuiste, me dejaste sola con un gran problema y rompiste tus promesas.
                                                                                                                 Soojinny  Seo