Cuando me desperté ya no estaba en la bañera con Adonis
Estaba sola en la cama y mojada, estaba desnuda y las sabanas estaban a un lado mío
Me cubrí y salí de la cama, fuí al baño siguiendo el ruído del agua y golpeé a la puerta
-Ocupado-me quedé esperando a un lado de la puerta hasta que Adonis salió del baño
-Hola-dijo secamente y entonces lo entendí
Anoche había sido la mejor noche de mi vida y él no lo recordaba
Me metí al baño sin responderle nada, sentía que si intentaba hablar mi voz fallaría y solo terminaría llorando a moco tendido
Cerré con pestillo y me metí a la ducha
Casi me resbalo como dos veces por no prestar atención y pisar el jabón pero me es imposible concentrarme teniendo delante de mi la bañera donde anoche Adonis y yo habíamos hecho el amor
Sus manos acariciandome delicadamente, como si temiera que me rompiera, sus embestidas lentas y controladas, sus besos y jadeos en mi boca
Sin darme cuenta comencé a llorar era una maldita llorona que desperdiciaba lágrimas por el que alguna vez había sido su secuestrador
Negué
Esta no soy yo, no lo amo como para estar llorando por él, éstas cosas pasan
Carajo!
Caí de la ducha pero no me importó
Me levanté, me quité todo el jabón del cuerpo y aún sin terminar salí
Me sequé, me vestí y corrí hacia la puerta de salida
-¿A dónde vas?-no le respondí y salí
Aporré a la puerta y tiré de la mano del primero que se asomó
Para mi mala suerte era Jort
-Necesito pastillas-rió
-Con todo lo que te pasó sigues siendo irresponsable-lo fulminé con la mirada
Él me sonrió y amagó a meterse dentro del departamento de nuevo
Tiré de su brazo
-Vamos-bufó y salimos del edificio
Compramos las pastillas y cuando llegamos me volví al departamento
Adonis estaba mirando la TV y no me prestó mucha atención
Tomé un vaso, lo llené con agua y me tomé una pastilla
-¿Qué te duele?-dí un saltito del susto
-La cabeza-mentí y oculté las pastillas en mi pantalón
-¿Cómo llegué aquí? Lo último que recuerdo fue estar en un bar peleandome con unos borrachos-dijo, no lo miré
Estaba tan enojada porque no recordara y avergonzada porque yo sí lo hacía y me importaba, que no quería mirarlo
-¿Cómo tú?-solté bruscamente y sin pensar
Él se me quedó mirando sin decír nada
-Voy a terminar de ducharme-murmuré y me dirigí al baño, con otra toalla pero para mi mala suerte solo quedaba ropa de Adonis así que tome una de sus remeras
Cuando salí él estaba quitando las sabanas mojadas de la cama
-¿Anoche te lastimé?-fruncí el ceño
-No-mentí
Me lastimaste esta mañana al no recordar
-¿Te golpeé?-preguntó preocupado y negué-Nes dime la verdad, ¿Por qué tienes esos hematomas en los muslos?-no respondí y lo ayudé con la cama
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(+18) Viviendo Con Adonis (P2)
RomanceEsta historia es la secuela de "Secuestrada por Adonis Las nuevas princesas son revolucionarias. Vuelven a su casa a las doce de la noche, portan arcos y flechas y ellas son las que descongelan por amor, no al revés. Ya no dicen "TE AMO" mandar a la...