Eres tú ❤

¿Era él?

Ca: me prometes que no te iras como mamá - alzó su meñique

V: te lo prometo - enlazo su dedo con el de la pequeña  - te amo pequeña

Victoria y Cesar se despidieron verse al día siguiente.

Al llegar a casa Victoria y se encontró con Ricardo en la puerta

V: Hola, Ricardo que haces aquí, tan noche?

R: llevó horas esperándote - se acercó- ¿donde estabas?

V: Ricardo ¿que pasa? - molesta - no me avisaste que venias - abrió la puerta

R: ahora tengo que avisar que vengo a verte, antes no lo hacía, porque ahora si? ¿Dónde estabas?

V: Basta ok, no entiendo esta actitud

R: Victoria perdoname, es solo que llevo mucho tiempo esperandote y cuando llegas lo único que dices es que que hago aquí - se supone que debes estar feliz de verme

V: Ricardo...

R: Vic yo se que mi actitud no fue la correcta pero ya lo hablamos, estaba muy preocupado por ti, por eso reaccione así

V: Eso no justifica nada, no me gusta que me trates así, mira creo que hoy no es día para hablar, los dos estamos algo alterados y así las cosas no se pueden, lo mejor es que nos veamos otro día

R: Victoria...

V: por favor - suspiro

R: esta bien, pero mañana en la salida paso por ti al colegio

V: pero...

R: no aceptó un no como respuesta, mañana nos vemos, te amo - se acercó a Victoria e intento besarla pero ella corrió la casa

V: hasta mañana.

Aunque Victoria creía que conocía a Ricardo la realidad era que no, él apareció en uno de los momentos más difíciles de su vida, primero como su amigo y después como su pareja, llevaban mucho tiempo juntos, y si, lo quería pero no lo amaba, eso podía comprobarlo, solo se sentía plena cuando estaba en los brazos de Cesar.

Pero Ricardo no estaba dispuesto a perder, sabía que Victoria no podía entrgarse del todo a él y a su amor, porque había alguien del pasado al que ella le había entregado todo, pero era capaz de cualquier cosa para que ella permaneciera a su lado.

Las semanas pasaron, Victoria y Cesar estaban más felices que nunca, disfrutaban de su compañía y de ese amor que los seguía uniendo.

Un día estaban reunidos en su Casa, compartían una rica comida y reían de las ocurrencias de la pequeña Camila pero el agradable momento fue interrumpido por el insistente sonido de un celular

Ca: miss otra vez suena tu celular - comentó

V: si pequeña, debe ser algo urgente, contestó rápido y regresó con ustedes - sonrió

Ca: ok

Victoria se dirigió a la sala y contestó

V: bueno?

R: ¿Por qué no me contestabas?¿Dónde estás?

V: estoy algo ocupada ¿que pasa?

R: y todavia lo preguntas, por Dios Vic llegó días queriendo verte y tú nunca tienes tiempo - reclamo molesto -

V: bajale a tu tono!

R: no Victoria bajale tú, no me creas estúpido! Tienes mucho tiempo evadiendome y por si no lo recuerdas soy tu prometido, dentro de muy poco nos vamos a casar!

V: a mi no me vas a hablar así! Se perfectamente quien eres, creeme lo que recuerdo todos los benditos días - comentó sarcástica -

R: sabes que hablamos cuando estés más calmada! Ni tu solo te aguantas! - colgó

V: desgraciado! - murmuró enojada

Ce: ¿paso algo mi amor? - se acercó a ella

V: Pasa que estoy harta! - comento molesta

C: ¿era él? - preguntó serio

V: si, Cesar traté de hacer que esto fuera lo menos doloroso pero es él quien lo hace imposible, últimamente solo llama para reclamarme! Y para recordame la boda, pero esto se acabó, hablaré con él y se lo diré todo-  lo miró-

C: si eso es lo quieres hacer yo te voy a apoyar en todo, te amo Victoria - la beso-

V: y yo a ti - contestó entre besos

Juntos regresaron al comedor y siguieron disfrutando de la comida, Victoria en instantes se mostraba distraída toda esa situación con Ricardo ya la estaba cansado, pero afortunadamente tenía a Cesar a su lado recordandole en todo momento que no estaba sola.