4.🎀🎀🎀🎀

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Cuando tenia diez años nos hicieron una prueba para ver cual era mi genero segundario, mi pequeño yo estaba emocionado por presumirle a su amiguitos que él era un fuerte alfa, lleno de valentía y fuerza, cuando tuve el sobre entre mis manitos fui muy feliz, estaba emocionado por leer las grandes letras en negro "ALFA" eso tenía que decir, pero cuando abrí el sobre decía claramente "OMEGA" mi felicidad se esfumo quería llorar pero mis ojos parecían estar congelados sobre esa palabra; Dicen que cuando el cerebro recibe una noticia muy impactante se reinicia provocando un desmayo instantáneo. Ese día me desmaye, no llore, no grite, no gruñí, solo me desvanecí cayendo al suelo bajo la asombrada mirada de mis compañeros, ese día Sung Gyu tubo que dejar su clase anatomía para ir por mi a la escuela debido a que ninguno de mis padres estaba en la ciudad, esa misma tarde cuando desperté llore, llore hasta que no pude más, recuerdo como mi mentecita frágil se rompía y dolía por pensar en que había echo mal para merecer eso, pero entonces comprendía...porque su madre lo obligo a tomar clases de etiqueta, jardinería, piano, violín y en ese momento me estaba enseñando a cocinar, y hacer pasteles, todo en esa pequeña mente comenzó a cobrar sentido, las ropas elegantes con colores cremas que jamás vestiría alguno de sus hermanaos y hermana, por qué le había prohibido jugar futbol y básquet para ser remplazado con el aburrido tenis, las clases para servir bien el té y muchas cosas más, ese niño de diez años lloro mucho ese día incluso lloro mas cuando su madre lo regaño por hacer un alboroto debido a eso. Ese niño nunca quiso ser un omega, pero lo era y nada cambiaria ese hecho, por eso al crecer se acostumbró fingía cuando era necesario, vestía adecuadamente para aparentar que era un omega perfecto con aptitudes para ser un buen esposo o incluso hasta un buen amante, pero cuando un alfa le faltaba el respeto que se merecía...luchaba, mordía y gritaba como una fiera.

Me desperté confundido, cerré mis ojos con fuerza al sentir un feo mareo, me senté en la cama y recordé lo que había pasado antes de que me desmayara, miré un punto fijo en el piso y puse mis manos sobre mi vientre

- ¡Sung Jong! -el grito enfurecido de mi madre me hizo mirar la puerta, la abrió de un golpe y me miro y su expresión se relajó- levántate tenemos invitados-solo dijo eso y se marchó, me levante con sumo cuidado y me puse una camisa de ceda de color crema, un collar de protección aterciopelado, jeans negros ajustados y unos zapatos formales, tome un suéter de color gris y baje con él colgando de mi brazo por si me daba frio. Escuche risa, muchas risas, me acerque al marco sin puerta y mire a las personas sentadas en el sofá

-al fin, cariño te he dicho cientos de veces que detesto que faltes a la cena-comento mi padre acercándose a mi para empujarme dentro del salón a

-lo siento padre-dije suavemente sonriendo con cansancio

-bueno ahora que estamos todo, es hora de ir a cenar-comento mi madre mirando a sus invitados, mire a las personas que se paraban para seguirla, eran la familia Park junto con su perfecta hija Choa, los señores Kim y para finalizar mis hermanos y mi cuñado, iba a seguirles el paso cuando oí la puerta deje mi suéter sobre él sitial de color crema y me encamine hasta la puerta, un olor a brisa marina inundo mis pulmones dejándome levemente aturdido

Myung Soo

imposible, se fue a estudiar a Inglaterra y la boda de nuestros hermanos es el mes siguiente, pero nadie que yo conozca tiene este aroma tan particular, suspire ya abrí la puerta con lentitud

- ¡Sung Jong! -me sonrió y termino de abrir la puerta-mírate estas tan grande-sus manos se levantaron provocando una respuesta de alerta y protección, me cubrí con los brazos y me hice hacia atrás soltando un chillido del susto

- ¡Jjongie! -me escondí detrás de Yeol y lo abracé con fuerza, suspiro- ¿Qué haces aquí?

-volví...antes-me asomé para ver a Myung Soo, es mas alto que la última vez que lo vi incluso se ve mas guapo que aquella vez en el aeropuerto, puede incluso que sea mas maduro que esa vez, su aroma esta mas acentuado e incluso esta provocando cosas raras en mi cuerpo, mis mejillas se calentaron de forma violenta al notar lo hermoso que se ve bajo la luz del salón

- ¿Qué le hiciste?

-nada, solo quería acomodar su cabello-reclamo- dile a tu hermano que no te hice nada-Yeol me miro preocupado, lo mire y baje la vista para que no notara mis mejillas enrojecidas

-solo me asuste-dije bajito mientras sobaba mi brazo

-supongo que nunca dejaras de ser idiota-olvídenlo es imbécil igual que antes, respire profundo

-me voy-caminé hasta el salón para tomar mi suéter, me lo puse y me senté en mi asiento

- ¿Por qué tardaste tanto? -pregunto mi madre

-tuve que abrir la puerta-comente mientras acomodaba mi camisa

-miren quien llego-Yeol regreso con Myung Soo detrás de él, el aludido sonrió y se encamino a la silla que estaba entre Choa y yo, se acomodó ignorando a todas las personas que le hablaban, posando su mirada sobre mi cuerpo

- ¿necesitas algo? -pregunte en voz baja notablemente incomodo por la mirada del alfa sobre mi cuerpo

-no me respondiste

- ¿disculpa?

-eso, no me respondiste-apoyo su codo en la mesa dándole la espalda a la omega que se acomodaba el cabello con mucha desesperación para verse linda para Soo- a la ofensa-lo mire confundido- ¿ya no discutirás conmigo? - ¿esto es enserio? No nos vemos durante tres años y como si fuera poco me humillas en pleno aeropuerto y es lo primero que me dices

-Myung Soo, no estoy de humor, podrías por favor dejar de mirarme...me hace sentir incomodo-mire hacia el frente, pero me arrepentí al notar el color amarillento del pure, mi estomago se revolvió de una manera brutal provocando que tragara duro

- ¿todo bien? -asentí en silencio, tome un buen poco de agua y me acomode en la silla respirando profundo para controlar las ganas de vomitar, Myung Soo comenzó a charlar con sus padre y mis hermanos todo era risa y diversión, mi estomago se estaba comportando mejor que hace un rato y eso era un alivio, pero mi olfato comenzó a detectar el aroma de Choa mezclado con fuerte olor a chocolate que desprendía el pastel sumado a los demás aromas, me levante y corrí al baño con todas mi fuerzas, apenas abrí la taza del baño deje ir todo, mi estomago se contrajo para empujar mas comida por mi boca dejando un cuerpo tembloroso y un feo dolor de cabeza, comencé a soltar lagrimas y por primera vez en mi vida me sentí de nuevo como ese niño de diez años, es pequeño ser que no quería ver la realidad, que se sentía tan débil e indefenso

-Jjongie-Kyung Ri se puso de cuclillas a mi lado y acaricio mi espalda- ¿Qué pasa? Ayer te paso lo mismo-tragué las ganas de llorar, pero no pude comencé a llorar- ¿Qué pasa cariño? -me abrazo y comenzó acariciando mi cabello, mi corazón se estrujo al recordar la prueba, mordí mi labio antes de decirle la verdad

-no es nada-murmure-solo estoy enfermo-suspire, me aleje de ella y le sonreí-tomare algo y regreso a al mesa-ella me miro con cierta desconfianza, pero asintió

-avísame si necesitas algo-asentí, ella me dejo solo, me levante y me mire en el espejo y un sentimiento de extrañeza se instaló en mi corazón, esta persona no soy yo, el reflejo de mis ojos era tan opaco como ese día, como esa vez, pero ahora es diferente porque se que yo no soy esto, se que no soy así, se que puedo con esto...con ellos, con el miedo, la vergüenza, el dolor, el cansancio, el pánico...yo puedo ¿verdad?

Orgullo de Omega 🎀 myungjongDonde viven las historias. Descúbrelo ahora