Si te vieras con mis ojos te darías cuenta que eres la perfección más perfecta del mundo. Si te vieras con mis ojos te darías cuenta que eres un universo inmenso que jamás podría ser descubierto al cien por ciento por un hombre, eres la mujer más hermosa de aquí y de allá.
Tu cuerpo tan perfectamente imperfecto, las curvas de tu sonrisa que alinean el sol con tu forma tan ideal de ver el mundo rendido ante ti. Tienes los ojos rellenos de café dulce que por las mañanas nadie sería capaz de resistirte.
Tu valor es inalcanzable, y no hay quien pueda pagar el valor de tus caderas que sin importar las cicatrices que marcan tu cuerpo vuelven locos a los hombres que solo pueden verlas por fuera pero no por dentro; oh hermosa mía, como desearía poder ser la luna dentro de tu mundo para poder marcar el paso que sigues.
Tu no eres gordita ni flaca; tu no eres morena ni eres de piel clara; tus ojos nos son de color negro ni de color café, menos de color azul; tu cabello no es corto ni largo, amada mía, tu eres igual ante mis ojos, eres la perfección más perfecta creada por aquel que nos dio la vida, tu eres la mujer que con sus defectos vuelve loco a un pobre ser como yo.
Mírate ante tu espejo y dime como eres, luego te presto mis ojos para que veas que eres el ser que hace nuestros días los más felices, y que nunca debes de dejarte caer, que nunca debes de dejar de valorar tu hermosura porque tu, tu eres la perfección completa y que cualquier hombre desearía estar contigo. Tu no eres el juego, tu eres el premio de oro que es difícil de alcanzar para los niños inexpertos.
Tu eres la melodía que entona un nuevo comienzo, eres el instrumento que debe tocarse con las caricias más suaves.
Amate, y déjate AMAR.
Ownership of Image - Lucy A. Grace
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