Desde que Tawna dejó la casa de los bandicuts, dicho hogar no fue el mismo desde entonces. Siempre que Scyther estaba con los demás trataba de fingir alegría y normalidad, pero Coco y Aku Aku no eran ignorantes, sabían que aún estaba mal por lo de su ex novia. Cada vez que lo veían intentaban hablar con él o realizar alguna actividad juntos para animarlo, pero siempre se negaba diciendo que no era necesario. Decía que estaba bien, pero era todo mentira.
Desde esa experiencia desagradable, el joven bandicut ya no era feliz y extrovertido como antes, y sus sonrisas falsas eran bastante forzadas. En el fondo estaba deprimido, pero no le gustaba demostrarlo a su familia. No quería que su depresión los arrastrara también a ellos, por lo que sus únicas opciones eran fingir alegría cada vez que ellos estuvieran presentes y estar varios ratos a solas antes de que noten su verdadero estado de ánimo.
Parecía que Scyther nunca sería el mismo otra vez, pero todo eso estaba a punto de cambiar.
Ha pasado un mes desde aquel día triste. Coco estaba preparando tarta de fruta Wumpa con panqueques, el desayuno favorito de Scyther. No soportaba ver a su hermano en tan mal estado, por lo que nunca dejaba pasar una oportunidad que pudiera animarlo.
–Perfecto –dijo Coco con aire de satisfacción –. Si este desayuno no lo anima, nada lo hará.
–¿Estás segura, Coco? –preguntó Aku Aku bastante dudoso –. Es tu sexto intento en lo que va de mes.
Esas palabras hicieron que ella se sentara en el comedor y se apoyara en la mesa, resignada.
–Lo siento, hija –se disculpó la máscara –. No fue mi intención hacerte sentir mal. Es solo que cada intento que damos siempre es en vano.
–Lo sé, pero quiero ayudarlo. Quiero que vuelva a ser el mismo hermano feliz y travieso que solía ser. Esa persona que siempre nos sacaba una sonrisa en los malos momentos –dijo ella con tristeza, la cual no tardó en transformarse en enfado al recordar a cierta bandicut alta y rubia –. Desearía que él nunca hubiera conocido a esa bruja. Te juro que si la vuelvo a ver, le partiré la cara.
–Coco, la violencia no es la solución –dijo Aku Aku con suavidad. Entendía perfectamente su rabia –. Yo sé dónde está Tawna porque puedo sentir su presencia, pero ir a enfrentarla es una mala idea. Solo podría empeorar la situación, en especial para Scyther.
–Pero… –Coco intentó pensar en un buen argumento a su favor, pero la conversación terminó cuando oyeron a alguien entrar en la cocina.
Era Scyther. Su rostro era un desastre, demostrando que acababa de pasar otra mala noche. Sin embargo, hizo su mayor esfuerzo para parecer feliz.
–Buenos días, Scyther –Aku Aku saludó al recién levantado bandicut –. Tu hermana te ha preparado tu desayuno favorito. ¿Por qué no comemos todos juntos?
–Me encantaría, chicos –les agradeció –. Pero es hora de mi paseo diario. Creo que me llevaré el desayuno conmigo.
Scyther puso la comida en una canasta de picnic y se dirigió hacia la puerta, pero Coco lo detuvo.
–Hermanito, por favor, come con nosotros –le pidió –. Estás mucho más distante últimamente. Esos "paseos" tuyos a veces llegan a durar un día entero. Comprende que solo queremos ayudarte.
–¿Pero por qué? Estoy bien –dijo Scyther con una sonrisa forzada –. Además, siempre vuelvo, aunque sea a la hora de la cena.
Sin más que decir, Scyther salió por la puerta. En el fondo se sentía terrible por tener que estar mintiendo a su familia.
–Ojalá pudiéramos creerte, hermano –dijo Coco mientras se le escapaban unas lágrimas.
–Tranquila Coco –dijo Aku Aku tratando de consolarla –. Encontraremos una solución. Te lo prometo.
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Capitulo 2:Una Visita Inesperada
FanfictionAlgo que olvidé aclarar es que todos los personajes poseen la misma apariencia que en Nitro-Fueled. También que a las pocas horas de publicar un capítulo lo iré editando para que quede lo más coherente posible. Sin más que decir, empecemos con el ca...