¿Are you kidding me?; BaekHarem.

Colores parte 3.

Ok, ya no sabía a donde estaba yendo, solo tomaba caminos al azar lo suficientemente confusos para perder a MinHo.

Sentía como su corazón estaba acelerado, la "adrenalina" corriendo a través de su cuerpo, haciendo que correr no fuera nada, pues la "adrenalina" (que en realidad era el miedo) lo mantenía a raya.

No quería morir, y menos que luego su asesino se suicidara para "pasar toda la eternidad juntos".

Dios no quería eso.

No sabía cuánto tiempo había pasado, peor el sentía que eran horas, estaba perdiendo las esperanzas de que alguien fuera por el, no se escuchaba ningún ruido además del de su acelerada respiración y sus pasos.

Pero no se iba a rendir, saldría, aunque fuera solo, pero lo haría.

Bastaron unos segundos hasta que los inconfundibles gritos de sus amigos se escucharan.

Oh dios, ¡si!

Paro bruscamente y cambio el sentido de su carrera y luego dobló, y así siguió buscando desesperadamente a sus amigos.

Al parece correr lo ponía en una situación en la que pensaba, pues mientras corría pensó, ¿y si a MinHo le da por ir a buscar a mis amigos y los asesina? ellos nunca lo sabrían pues el no podía gritar" pero él no podía gritar porque o si no él se arriesgaba a que MinHo lo encontrara, ¿pero ellos debían gritar y arriesgarse a sí mismos, para el salir bien de toda esta situación?

Cuando menos se dio cuenta él también se encontraba gritando el nombre de sus amigos.

—¡Byun BaekHyun! no grites—la inconfundible voz de JunMyeon se hizo presente.

Más él ni hizo caso y siguió gritando, podía escuchar los gritos de los demás tan cerca, que una euforia y una nueva adrenalina lo consumió.

Sus magullados pies, corrían y corrían, no paraba hasta que solo debía doblar a la izquierda y llegaría, de repente, frente a él por el otro pasillo apareció MinHo.

BaekHyun abrió sus ojos y dobló rápidamente no se iba a rendir ahora, no lo haría, ahí lo esperaban sus chicos, si, sus chicos. Baek nunca se había sentido más alegre en toda su vida, la emoción lo embargo completamente, a pesar de las lágrimas que empañaban sus ojos, podía ver todo claramente.

Se lanzó a los brazos del primero que vio y se dejó caer, desfalleció, confió plenamente en la seguridad que ellos le brindaban, confió plena y ciegamente en ellos.

—MinHo..viene..—fue lo que atinó a decir BaekHyun en su deplorable estado.

La historia siguió así, los policías aparecieron en el momento en el que MinHo estaba preparado para dispararles a todos los chicos que hacían un escudo humano al rededor de Baek.

Lo último que vio BaekHyun fue la insana mirada de MinHo sobre el, antes de ver todo negro.