La confesión

8 1 0
                                    


3 meses después

Pablo y yo nos llevamos muy bien, quedamos todos los viernes con los amigos y a veces quedamos para estudiar en mi casa. Hoy le he pedido que nos veamos en el parque porque tengo que decirle una cosa, que me gusta, no sé cómo se lo va a tomar, espero que bien, no quiero pasar por el mismo infierno que pase cuando Alex me dejo con esas palabras tan malas.

Al llegar al parque me encuentro con Pablo sentado al lado de la gran fuente de cuarzo rosa, me acerco a él y me saluda con la mano y me señala que me siente a su lado.

-Bueno te tengo que confesar una cosa –Le dije seria y con voz neutra.

-¿Pasa algo Kira? Te noto preocupada.

-No, es que no sé cómo vas a reaccionar... y no sé por dónde empezar.

-Bueno tú tranquila y empieza por el principio.

Respiro hondo y espero unos segundos antes de lanzarle las palabras que tanto deseo.

-La vedad es que yo también tengo algo que decirte –Me dice justo antes de que yo empezara a hablar, y en ese momento me pongo mucho más nerviosa de lo que ya estaba en un principio.

-Bueno pues empiezo yo –Digo de repente sin pensar.

-Vale, pues empieza.

-El día que tu llegaste al instituto me pareciste bastante mono y... pues me gustas...

-Kira te tengo que confesar una cosa que no se lo he dicho a nadie, ni siquiera a mi familia. ¿Estás preparada?

Asiento

-Hace unos 2 años en Italia me llamaron para que viniera a España, para infiltrarme en un instituto para investigar a una chica totalmente diferente a las demás, los que me llamaron sospechaban que era una agente secreta como... yo, y la chica a la que investigo eres tu... pero eso no cambia nada de lo que ha pasado desde que te conocí.

En ese momento me quede atónica y no sabía lo que hacer, si irme corriendo o quedarme, darle un fuerte abrazo y llorar en su hombro por poder confesarme aquello, pero de repente siento como Pablo se acerca a mi lentamente y me da un beso para decirme que lo siente y que no me valla. Después de unos segundos se separa y yo le doy un abrazo y pongo a llorar mientras él me acaricia el pelo poco a poco.

Mi abuelo siempre me decía que siempre se puede empezar de nuevo, que las cosas malas se intercambian por otras buena y que no me fijara en las cosas malas que me pasaran, que mirara las cosas tan bonitas que me han pasado en mi vida, desde bien pequeña mi abuelo me contaba historias de princesas y lo felices que eran, no tenían ningún problema, con su príncipe y sus grandes castillos lo tenían todo hecho, pero en la realidad eso no es así, siempre te vas a caer por algo pero siempre tienes que tener fuerza para levantarte que siempre puedes empezar de nuevo y que no te rindas, y yo no lo he hecho.

------------------------------

Hola! no se si os estará gustando la historia, la verdad es que nunca me he planteado escribir y nunca me han dicho que lo haga bien.

You've reached the end of published parts.

⏰ Last updated: Jan 20, 2020 ⏰

Add this story to your Library to get notified about new parts!

ReineWhere stories live. Discover now