Mal Entendido

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-Gracias por lo de anoche Kazemaru.

- No es nada, al contrario, fue todo un placer. – le respondió al portero.

- No fue para tanto, fue la primera vez que lo hice.

- ¿En serio? No se notó para nada, parecías un profesional.

- Solo lo dices para que no me sienta mal.

- Lo digo en serio Genda. Has sido el mejor hasta ahora.

- ¿Tienes punto de comparación? ¿Con quién?

- Con Miyasaka. Pero no fue tan dulce como tú anoche...

- ¿Miyasaka? Ah cierto, tu ex compañero del club de atletismo. – recordaba levemente su mención en medio de alguna plática.

- Ese mismo.

- ¿Qué ocurrió?

- Para empezar, ni te digo como quedó mi casa.

- ¿Lo hicieron en tu casa? ¿No es mejor hacerlo en casa de la persona que invita?

- Sí, no vuelvo a cometer ese error... Aparte de que no hubo preparación previa de nada, solo metió todo lo que pudo meter y fue realmente brusco en todo el proceso, no se comparaba en nada con lo que se ve en internet.

- No pensé que fueras de los que buscaban eso en internet.

- Bueno... - se sonrojo levemente – No lo hago muy seguido, pero a mi también me da curiosidad. – tosió aclarándose la garganta para continuar – Por eso te digo, contigo fue mucho mejor.

- Gracias, Kazemaru. Aunque sigo creyendo que exageras un poco, no creo parecerme en nada a las personas que ves en internet.

- A mí me gustó y no salí herido. Ya eso es ganar para mí.

- ¿Saliste herido antes?

- Sí. – recordó con pesar – Me dolía la cadera al día siguiente y no pude ir a las prácticas del club de futbol.

- ¿Tan mal estabas?... ¿Qué fue lo que pasó?

- Solo diré que el piso y yo no somos buenos amigos.

- ¡¿Terminaste en el piso?!

- Y con Miyasaka sobre mí... créeme fue horrible.

- ¿Y el resultado final? Es decir, no pudo salir todo taaaaaan mal.

- Bueno, aquello no creció para nada. Por más que esperamos y la sacarlo solo había una cosa viscosa poco agradable a la vista. Ni siquiera se veía apetitoso como para darle una probada.

- Lamento que tu primera vez fuera así.

- Ya nada puedo hacer, por eso lo pasé tan bien anoche contigo, lo disfruté mucho y hasta me dejaste quedarme a dormir cuando terminamos.

- Bueno, era bastante tarde y me preocupara que estuvieras solo a esas horas.

- Eres muy amable Genda...

Esos dos siguieron con su conversación tranquilamente ignorando a todos los que estaban alrededor. No notaron a sus compañeros de salón estáticos y blancos como figuras de papel, en diferentes lugares o las personas desmayadas en el piso, mucho menos a el alma de Sakuma que escapaba de su cuerpo o a Fudo a punto de sufrir un paro cardiaco.

¡¿QUÉ DIABLOS HICIERON ESOS DOS ANOCHE?!

Se estaban preguntando todos, porque no daban buenas señales.

-Pero sabes quedé con ganas de más. – le comentó Kazemaru a Genda.

- Creo que puedo ayudarte con eso en el receso.

Mal EntendidoWhere stories live. Discover now