Decisiones ¿Qué hago con mi vida?

Todas las rosas mueren.

Muy bien, hemos llegado a la parte que no quería llegar de alguna forma porque mmm... hay cosas que simplemente sería dejarlas tal y como están, no moverle y tratar de dejarlo en el pasado, pero realmente creo que es algo que necesito contarles. Ya les mencioné antes que yo tuve una relación la cual tuvo a su fin cuando yo estaba ya a pocos meses de ingresar a la universidad.

Bueno iniciemos contando como es que lo conocí, bueno pues el hecho de conocerlo es sencillo... era amigo del que en ese entonces era el niño que me gusta y a la vez mi mejor amigo, él se llamaba Carlos jajaja ya puedes reírte de mi por eso, porque si fui tan patética en cierto punto de mi vida que me enamoré de mi mejor amigo y después de eso una vez me presento a su amigo Manuel y pues nos volvimos inseparables los tres, nos veías para todos lados éramos el dedo, la uña y la mugre juntos jaja.

Esa amistad de nosotros se volvía cada vez más fuerte y muchas cosas fueron cambiando al transcurrir los años porque bueno les comento que ambos eran un año mayor que yo y por eso en cierto punto nos separamos un poco.... Bueno algo así Carlos si se cambió de escuela cuando entro a la prepa peeero pues Manuel no y fue ahí cuando comenzamos a ser más unidos de lo que ya éramos. A pesar de que la prepa y secundaría estuvieran divididos por una reja que se supone no podíamos pasar y así pero nos íbamos a la cancha en lo recesos en los que coincidíamos y pues ahí era cuando nos poníamos a platicar y demás, y así llegó el día en que yo también entre a la preparatoria pero ese no fue el único cambio que hubo a lo largo del tiempo. Al entrar a la prepa dentro de mí ya habían ciertos cambios aunque solo uno era el que iba a importar en todo lo que se venía próximamente creo que ustedes ya saben y los estoy aburriendo un poco con tanto choro, pero si, llego el día en que Manuel ya no solo era mi mejor amigo sino, la persona con la que quería compartir todas mis experiencias de ahora en adelante aunque honestamente yo negaba cualquier sentimiento hacia él y fingía que me gustaba alguien más.

Mi gran mentira de que me gustaba alguien más no me duró mucho tiempo porque cada vez decía o hacía cosas que me delataban y yo moría porque no quería que él se diera cuenta, entonces pues lo que no quería que pasará pasó aunque ha decir verdad fue lo mejor que pudo haber pasado porque se dio cuenta y él entonces también tomó la confianza para poder hacer algo también y entonces fue feliz al escuchar "oye, mañana quieres pasarla conmigo durante el festival" y yo por supuesto acepté sin dudarlo, ese día fue el primer dá que nuestras manos se juntaron de manera diferente a un saludo o demás, ese día algo hermoso surgió a floto y vaya que todos ya sabían que tarde o temprano iban a pasar las cosas y como de mugre película romántica nosotros no nos habíamos dado cuenta por lo mismo de que ambos teníamos la misma idea pendeja "pero y si le digo y hasta ahí quedó nuestra amistad o de seguro me va a batear y nos vamos a dejar de hablar y yo no quiero perder esa amistad" tantas veces nos torturamos a nosotros que no dejamos que nuestros sentimientos sean vistos. Aquí te va un consejo que tal vez tomes, pero seguramente no lo vas a hacer porque vas a pensar que tu no vas a correr la misma suerte, pero aún así te diré "deja de suprimir aquellos bellos sentimientos, no tienen nada de malo" obvio si no te sientes con la confianza suficiente como para hacerlo pues no te forces a hacerlos y que nadie se tomé el privilegió en convencerte para que lo hagas, es algo que solo tu puedes decidir.

Pues bueno creo que queda muy predictivo lo que sucedió en los siguientes días, empezamos a salir y las cosas se iban dando solas y todo pintaba de a mejor manera, ambos estábamos viviendo el momento, compartiendo tantas cosas que aunque fueran simples el hecho de estarlas viviendo con él hacía que todo fuera hermoso, todo se convertía en algo mágico, pero pues yo quería formalizarlo bien, quería pues que me pidiera ser su novia de una forma bonita y así, y no me importa que me llamen cursi porque yo sé que lo soy y no me importa jajaja aunque a simple vista se vea que ese tipo de cosas no me gustan soy todo lo contrario jeje. Bueno ese no es el punto, el punto es que yo sentía que nunca me lo iba a pedir y que se estaba arrepintiendo hasta que un día me pidió que me quedara hasta más tarde de mi horario porque quería que le ayudará con un trabajo de francés ya que soy buena en ese idioma y pues yo acepté.