TWITTER WAR | Larry Stylinson

16- Tatuajes

Capítulo 16:

Había intentado ignorar los primeros rayos de luz en la mañana, pero no lo había soportado por tanto tiempo ya que su cuerpo se encontraba pegado a otro y el calor causado lo había hecho sudar, así que se puso de pie rápidamente intentando encontrar alguna fuente de frío para bajar su temperatura, pero no conseguía nada y se sentía asquerosamente pegajoso, así que simplemente entró al baño y lanzó un poco de agua fría sobre su rostro.

Cuanto regresó a la habitación se encontró con un hombre recién despierto en su celular, así que se acercó antes de saltar sobre él obligándolo a hacer su celular un lado mientras su rostro le era llenado por pequeños besos. Lo tomó firmemente de la cintura cuando sus labios se encontraron pero no se movían, simplemente se tocaban con suavidad.

-Mm buenos días, muy buenos en realidad- Rió apartándolo suavemente -¿a que se debe tanta felicidad?

-A que te tengo junto a mi- se encogió de hombros -aunque odio que sea así, odio tanto el verano, hace mucho calor- hizo puchero

-Bien, vamos a encender la calefacción ¿te parece?- asintió apartándose -y podemos desayunar juntos en paz- ambos se pusieron de pie tomando sus manos

-Si, tengo mucha hambre- murmuró siguiéndolo

-Siempre tienes hambre.

-Ya ves que por eso estoy gordo.

-No exageres, no estás gordo- sonrió -quizá con un poco de grasa, pero si te cuidaras...- el menor soltó un bufido

-No me importa en realidad, ya se que tú serás el de mejor cuerpo- mordisqueó su labio mirando su abdomen desnudo -y eres mío, entonces es casi lo mismo- acercó su mano libre al abdomen de Harry haciéndole cosquillas

-No toques.

-Estás muy bueno.

-Eres insoportable, de verdad- rodó los ojos

Harry prendió la calefacción bajándole la temperatura antes de ir a la cocina junto a un Louis muy juguetón, este lo había abrazado por la espalda acariciando su abdomen marcado y hubiera continuado haciéndolo si no hubiera sido porque lo había detenido tomándolo por las muñecas. Lo atrajo halándolo fuertemente hasta que sus cuerpos chocaron tomándolo por sorpresa, sus curiosas manos tocaban el cuerpo de Louis cubierto por la camisa que le había prestado y le quedaba perfecta.

Intercambiaron miradas llenas de picardía dejando caer sus largos dedos sobre los botones de la camisa que empezó a arrancar a su paso, terminó por abrir la camisa se dio el placer de ver aquellos tatuajes que solían cubrir las vestimentas que usaba, no había tenido la oportunidad y estaba disfrutando con su tacto.

-¿Te gustan?- susurró débilmente

-Todo lo que venga de ti me gusta- asintió pasándole la camisa por los hombros dejándola caer al suelo -eres precioso.

-¿Puedo besarte?- preguntó dubitativo

-Por favor.

-Me encanta esta necesidad que tengo de tenerte cerca.

Juntó sus bocas suavemente tocando nuevamente el abdomen desnudo de su pareja, sus labios se acariciaban y sus lenguas danzaban apasionadamente, le estaba robando el aliento al mismo tiempo que le bajaban sutilmente los bóxers y le acariciaban el trasero haciéndolo gemir. Lo apartó con un pequeño empujón obligándolo a girar, puso su pecho contra la isla que había en medio de la cocina recibiendo una cachetada en su trasero.

-¿Puedo preguntar sobre este tatuaje en tu trasero?- señaló

-Nope- negó

-Es gracioso, muy curioso- Rió -me gusta.

-A mi no, pero por suerte está en el trasero.

-Pues ya llegó alguien que te lo verá en varias ocasiones.

-Solo no lo menciones con nadie y podrás hacerlo cuanto puedas- se encogió de hombros

Se removió con desespero pero lo tenían firmemente de las caderas en una posición un poco incómoda, chupó un poco sus dedos empujando uno de ello en la entrada del castaño haciéndolo gemir, no se sentía para nada bien hasta introducir otro de sus dedos y moverlos en su interior, cerró sus ojos moviendo sus caderas entre jadeos.

El mayor bajó sus pantalones levemente escupiendo en su pene bombeándolo suavemente para lubricarlo, sacó sus dedos rozando su glande con la rosada entrada de Louis gruñendo entre dientes, sumergió sus dedos en las caderas del menor empujando hacia su interior, estaba demasiado estrecho pero realmente se sentía tan bien. Las embestidas eran lentas y profundas golpeando contra su próstata, estaba tocando su punto dulce sacándole de su boca sucias palabras y gemidos incontrolables.

-Diablos Harry, es muy grande- jadeó

-Y tú estás tan estrecho- gimió -Louis mierda- gruñó acelerando sus movimientos

-Voy a caer, voy a caer.

-No digas tonterías- bufó

-¡Mierda, mierda!

Estaba tan débil, sus piernas temblaban y probablemente si lo soltaban terminaría cayendo al suelo, secó sus mejillas antes de tomar su pene y empezar a bombearlo rápidamente, podía como alcanzaba el punto climax dejándose envolver por un fuerte orgasmo que terminó ensuciando su mano y seguido de él, Harry tuvo su orgasmo. Se había visto obligado a darse un buen baño en el cual fue acompañado limpiando toda su suciedad, jamás se había sentido mejor en su vida y estaba feliz de encontrarse acompañado de una persona como Harry, un hombre tan cariñoso hasta el punto de mimar a su pareja con algunas caricias, inclusive lo había ayudado a secarse el cabello con un secador.

-Eres un encanto- susurró

-Bueno- Rió inclinándose a su oído -siempre lo he sido contigo- lo tomó de las mejillas apretándolas

-Te odio- murmuró recibiendo un beso -Harry detente...- se quejó repitiendo una y otra vez esos castos besos

-¿Vamos a hablar?

-¿Sobre qué?- frunció el ceño

-Ya sabes a lo que me refiero, eso que no quieres mencionar.

-Bueno, no lo quiero mencionar como ya dijiste- sus mejillas fueron liberadas -¿Podemos hacerlo más adelante? Aún intento procesar nuestra relación.

-Bien- asintió

-Mejor dame más de esos besos- susurró -por favor- hizo puchero haciéndolo reír

-Pídeme todos los que quieras.

-Hasta que ya no sintamos los labios.