La Desición

capitulo 1

Había llegado una nevada a ciudad playa, ya todos habían olvidado el desastroso día cuando una vez más una gema había intentado destruir su hogar, el héroe de la galaxia Steven Universe estaba tomando una taza de chocolate caliente, arropado hasta las orejas por el frío que hacia en ese momento cuando un sonido muy peculiar había llegado a sus oídos, era el comunicador del domo.

Que podrán querer ahora las Diamantes en este momento -se preguntaba el joven mientras dejaba la manta y su chocolate en la mesita del centro de su sala e iba a ver qué querían ahora sus nuevas hermanas, camino a su habitación y salió por el balcón para ir a responder la llamada.

Cuando salió una ráfaga de aire helado topo su cara dejándole la cara un poco congelada, hacia un frío arrazador esa noche, entro rápido y cerró la puerta tras de si, fue al comunicador y deslizó la mano en el tablero para aceptar la llamada.

Que se les ofrece a mis hermanas mayores ahora? -hizo una reverencia y cerró los ojos, río por lo bajo, la relación de las Diamantes y Steven había mejorado bastante, todo estaba en paz y calma con ellas, tanto que ellas ya no le decían que se fuera a vivir al palacio, solo querían que las visitará más seguido, y así fue durante un tiempo; cómo no tenía respuesta del otro lado abrió los ojos viendo que en la pantalla no había nadie, le sorprendió mucho.
Blanco? Amarillo? -decía con cierta extrañeza, levanto su ceja- ah ya se, Azulita! Ya puedes salir de dónde estés... -no hubo respuesta, se estaba poniendo un poco nervioso ya que anteriormente eso hacia que Azul saliera de algún lado con una gran sonrisa en su cara, esta vez no paso- ok, chicas ya me asustaron, ya pueden salir... -se volteo y puso su mano en la barbilla-
STEVEN!!! -grito una gema magenta mientras salía de abajo de la pantalla del palacio riendo fuerte, ya que en el domo el chico de rizos callo hacia atrás asustandose y soltando un grito no tan varonil- jajaja debiste ver tu cara -seguía riendo Spinela mientras se secaba las lagrimas- solo porque está cosa no deja grabar las videollamadas que se hacen.

Spinela!! -Steven se levantó agarrándose el corazón por el pequeño micro infarto que le había dado por el susto- soy mitad humano pude haber muerto del susto, que es lo haces ahí, acaso las Diamantes dijeron que me llamaras?

Duh obvio no, que no ves quien está aquí medio hablando contigo tonto -ya había dejado de reír y fue lo único que se le ocurrió decirle- verás lo que pasa es que desde que no has venido me eh sentido sola, las Diamantes se encuentran ocupadas aún liberando colonias, tenían muchas después de todo -no sabía el porque quería llamarlo a el, tenía a las perlas para hablar y divertirse con ellas pero desde hace un tiempo en lo único que podía pensar la gema era en una persona: Steven- no se cómo pero desde un tiempo has estado en mis pensamientos últimamente y solo quería verte una vez más.

La relación de Steven y Spinela había mejorado bastante también, habían pasado meses de juegos, risas y charlas que habían fortalecido su amistad, Steven aún no le había enseñado nada sobre el amor ya que en palabras de el, "ella lo tenía que descubrir poco a poco" ambos habían llevado su relación a mejores amigos aún que Spinela sabía que en esa relación había algo más.

A Steven se le enrojecieron un poco las mejillas, podía ocultarlo ya que en esa habitación estaba haciendo un poco de frío, no sabía que pensar ante las palabras de la gema de corazón invertido pero sabía que lo había dicho con sinceridad, ya que ella no titubeó al decirlo.
Wow Spinela no sabía que te sentias tan sola, lo lamento si no he podido ir a visitarte, en estás fechas la familia se reúne para hacer una fiesta y eh estado ayudando todo para que salga bien -se sintió un poco mal por no haber pensado o haberla visitado durante ese mes, pero como había dicho, los de la casa Universe se estaban preparando para la llegada de la Navidad, y había estado ocupado adornando la casa y revisando las cosas que les hacían falta a la familia para comprar los regalos de los demás, al momento se le abrieron los ojos de par en par, las Diamantes y ahora Spinela eran su familia-

Steven, Steven.... Steven!!! -grito Spinela sacando de sus pensamientos al joven híbrido volteando a ver a la pantalla sorprendido por el grito de la gema-
Eh, que que pasa? No me digas que me adentre a mis pensamientos.. -se rascó la nuca, suspiro mientras bajaba la vista- lo siento, solo que pensé en algo que no había llegado a pensar últimamente, pero ya dejemos todo de lado, dime para que me necesitabas, hace frío y quiero entrar para mantenerme en calor.
Oh pobrecito humano débil, tiene.. frío? -retorcio su mano hasta su barbilla- y que es el frío?
Verás el frío es -no logró terminar la frase ya que alguien había llegado del otro lado de la pantalla, se le notaba su pierna- Amarillo? -dijo mientras veía detrás de la gema curiosa-
Amarillo? Porque.. -se dio cuenta muy tarde y volteo a ver detrás de ella mientras tragaba duro- Steven por favor ayudame, ellas... -no logró decir nada ya que la comunicación había terminado, dejando a un Steven confundido y perplejo por lo que había ocurrido-

Se quedó parado ahí viendo la pantalla apagada, un escalofrío recorrió su espalda y decidió regresar adentro, no quería morir congelado en esa habitación, las últimas palabras de la gema le invadieron el pensamiento.
Que me habrá querido decir? -entro, cerró la puerta y regreso al sillón del cual se había levantado hace varios minutos, tomo su manta y se cubrió, regresando poco a poco al calor del cual se separó, se enderezó a tomar su chocolate, estaba frío ahora y suspiro, no sabía que pensar ante lo que vio. Una mano tomo su hombro y enderezó su cabeza para ver de quién se trataba, era una de sus tan amadas gemas, Garner.

Que es lo que pasa por tu mente mi pequeño hombre? -sonrió para transmitir la comodidad de que podía contarle lo que pasaba, un tono maternal siempre estaba en la voz de Garner para quien pudiera ayudar-
Spinela llamo hace un momento y cuando iba a decirme algo importante Amarillo apagó la transmisión, no supe que hacer y ahora estoy preocupado por ella -levanto sus piernas y las abrazo haciendo que Garner le acariciara el cabello para calmarlo-

No te puedo decir que es lo que hagas ya que tú decides tu camino, eres el protagonista de tu propia historia... Pero si puedo darte un pequeño atajo -dijo mientras está se acercaba a él y le depositaba un pequeño beso en la frente dándole un poco de su poder de visión futura-

Pasaron no más de cinco segundos y Steven se sorprendió ante lo que había visto, después un pequeño sonrojo apareció en sus mejillas.
Garnet, de verdad ese es mi futuro!? -seguia un poco rojo y se cubrió más con la manta para que su amiga no lo notara-
No sé que es lo que viste, pero desde aquí tú decides que hacer para saber si llegas a el -Garnet sonrió, bajo sus lentes y le guiño uno de sus tres ojos y se retiró no sin antes acariciar por debajo la mejilla de Steven, el chico miro como se iba, dejándolo solo con sus pensamientos mientras decidía algo con gran entusiasmo en su mirada, al día siguiente iría al planeta madre.