The corner of the Land of Dawn

CAPÍTULO 42

Al cabo de unos minutos la luz se desvaneció, las heridas de Alucard y los demás desaparecieron, Alucard se despertó y vio a Miya tirada en el suelo inconsciente, ella había recobrado su apariencia normal, se acercó a ella y la tomó en sus brazos, por mientras los demás iban despertando uno a uno.
-Alucard: Miya, despierta por favor.
Al haber salido la luz de dentro de Miya, ella había perdido sus fuerzas para poder ayudar a todos, a pesar de que seguía con vida necesitaba descansar, los demás se acercaron a Alucard.
-Rafaela: Tranquilo, se pondrá bien, solo necesita descansar.
-Estes: Hay que salir de aquí, Rafaela y yo fabricaremos una camilla para Miya, así será más fácil llevarla.
-Alucard: Muchas gracias.
Harith fue a la parte de la sala donde estaba Ruby amarrada, la liberó y ella cayó en sus brazos.
-Ruby: Gracias por salvarme.
-Harith: *Sonrojado* De nada.
Alucard y los demás salieron de la cueva, Lancelot los invito a quedarse en el castillo para que Miya se recuperase, fueron caminando por el bosque hacia allí, pasadas unas horas llegaron por fin, metieron a Miya en una habitación y Alucard se quedó con ella, por mientras los demás se disponían a cenar en el comedor, pasado un rato uno de los sirvientes de Lancelot le subió algo de comer a Alucard, después de haber comido un poco se sentó al lado de la cama de Miya.
-Alucard: Ya verás como te pondrás bien, tu eres fuerte pequeña.
Pasaron los días y Miya aún no despertaba, Alucard estaba preocupado, Rafaela y Estes subieron a la habitación.
-Rafaela: La salud de Miya está bien, que tarde en despertar es algo normal, se que te puede preocupar, pero tranquilo Alucard, ella solo necesita descansar un poco más, en cualquier momento se despertará.
-Alucard: Está bien, tendré paciencia.
Por mientras los sirvientes de Lancelot estaban decorando el palacio con motivo del año nuevo chino, él y los demás se vistieron con trajes de color rojo, cuando Odette apareció en la sala, Lancelot se quedó anonadado y sin poder pronunciar una palabra, al igual que los demás.
-Odette: Acaba de pasar un fantasma? Que os habéis quedado mudos jajaja.
Lancelot: Estás.. HERMOSAAA!!
Lancelot la cogió en brazos y empezó a dar vueltas hasta que la bajo al suelo.
-Lancelot: Mi dulce y hermosa Odette, estás deslumbrante está noche.
-Odette: *Se sonroja* tu también estás muy guapo Lancelot.
Alucard decidió bajar a la fiesta, a pesar de que seguía preocupado por Miya, pasaron unas horas y mientras estaban hablando, uno de los sirvientes bajo corriendo a la sala.
-Sirviente: Disculpen la interrupción señores.
-Lancelot: Helen, ha pasado algo?
-Helen: La señorita Miya se ha despertado.
Al escuchar eso, Alucard se levantó y subió inmediatamente a la habitación, entró y fue corriendo hacía donde estaba Miya.
-Alucard: MIYA!!
Miya estaba mirando por la ventana, se giró y abrió sus brazos al ver a Alucard, él la abrazó.
-Miya: Alu, mi amor *dijo entre llanto* pensé que te había perdido.
-Alucard: Eso mismo pensé yo, me moriría si no estás.
-Miya: Pero que pasó? Solo recuerdo haberme caído donde la mascota esa y luego nada más.
-Alucard: En serio no recuerdas nada?
-Miya: No, que ocurrió?
-Alucard: Tenías un aspecto totalmente diferente, una armadura brillante con detalles morados y plumas y tu pelo era morado, eras totalmente distinta, tú sola derrotaste a Roger y nos salvaste, vi como cayó al suelo, después de eso me quedé inconsciente, al rato desperté sin heridas y había recuperado mis fuerzas, te vi en el suelo, pero habías vuelto a ser tú, luego volvimos aquí al castillo y has estado por días sin despertar, hasta ahora.
-Miya: Totalmente distinta? Porque no recuerdo nada? Me hubiera gustado verme con esa armadura y esas cosas lindas de las que hablas, pero bueno, lo importante es que están todos bien y estamos juntos de nuevo.
-Alucard: Lo importante es que tú estás bien, te amo.
-Miya: Te amo.
*CONTINUARÁ*