Capitulo II

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Me adentré en los oscuros pasillos del edificio. No mires demasiado, tu único rol es entrar, limpiar y salir, sin involucrarte -Resonaron en mi mente las palabras del director de la empresa,  Cleanest. Puse los ojos en blanco, como si fuera tan fácil, ademas eso activa mi curiosidad.

El lugar estaba increíblemente impecable, todo parecía en su lugar, tan organizado. Creo que nunca había visto un lugar tan limpio, todavía no entendía que se supone que yo hacía aquí.  —Tu debe ser la señora Alice Gallagher, ¿Cierto?

Salí de mi ensoñamiento, y divisé una joven mujer delgada, con el mismo uniforme formal que tenían los guardias en la entrada. Los mismos, que revisaron mis pertenencias y me escanearon, para el colmo no me habían permitido traer mi celular. Asentí hacia ella. Este lugar me pareció muy intrigante, había caminado tan ensimismada en la decoración elegante blanca y gris, que no me percaté que había chocado con la recepción. —De acuerdo, señora.

—Solo Alice, por favor. Me haces sentir un poco vieja diciéndome señora— Sonreí amablemente, ella continuó de forma indiferente, en su discurso me explicaba que debía tomar asiento y que una persona pronto me guiaría y me indicaría los protocolos del lugar.

Seguí de forma obediente sus ordenes, la verdad es que me sentía un poco intimidada por el lugar. Crucé mis tobillos y levanté el pecho, en un intento de verme mas elegante, aunque mi ridículo atuendo no me ayudaba, como es de esperarse tenía una camisa verde vomito con grandes letras en amarillo "Cleanest" y un pantalón cafe, acompañado de un carnet donde mi yo más absurda esbozaba una gran sonrisa. Lo observé y me sonrojé ¡Diablos! lo oculté inmediatamente, aunque quizás el guardia de seguridad y la recepcionista ya lo habían observado.

—Señora Gallagher— Levanté la mirada, otra chica con la misma falda en tubo y la camisa negra, intentaba llamar mi atención. Todos se veían extrañamente perfectos e iguales a la misma vez, parecían clones.—Sígame, por favor. Necesito que mantenga la cabeza hacia abajo y la mirada siempre enfocada en el suelo.

Me levanté rápidamente, intenté peinar mi desordenada cola, pero los rebeldes rizos no cedieron. Expulsé un bufido y la mujer volvió la mirada hacia mí.—No, no era a ti, disculpa.

Me maldecí internamente, y sin más preámbulos la seguí. Alice, por favor, contrólate.

Obedecí sus ordenes y la seguí, bonita cerámica, totalmente blanca e impecable. Estaba muy distraída, intentando seguirla y no caer, cuando escuché como se abría una puerta, y la mujer se movía hacia un lado para permitirme entrar. — Puedes levantar la mirada.

Observé la gran oficina, era una combinación elegante de gris en las paredes y blanco en muebles, tanto escritorios y sillas. Parecía un lugar meramente de tratar asuntos cibernéticos por las gran cantidad de aparatos electrónicos, Mac books, teléfonos e impresoras 3D y otros aparatos que no pude descifrar, todo conectado a una gran fuente de energía de gran tamaño.

Al enfocar la visión hacia esa maraña de cables y cajones, al fondo arruinando el hermoso color gris había una mancha de moho verde, que parecía extenderse desde los grandes conductos de aire acondicionado hacia el piso. —Hemos tenido este problema desde hace meses —señaló la parede— Ha sido imposible corregirlo, al parecer crece y crece cada vez más, los contratamos porque son los mejores en esta área. Por eso específicamente solicitamos una mujer porque sería difícil que un hombre pudiera introducirse en el conducto si fuese necesario.

— Si, es moho, parece ser del tipo invasivo. Sino  lo tratamos a tiempo sera difícil evitar que continúe creciendo.—Me acerqué y toqué la consistencia, estaba húmedo, definitivamente tendría que escalar hacia el conducto del aire acondicionado. — Necesito mis herramientas, por favor.

La clon señaló, hacia una esquina, donde yacía mi kit y mi escalera desplegable. Al parecer ya se habían adelantado, ¿Por dónde? Los seguridades del frente se habían quedado con todo, bueno quizás existía una puerta trasera. Supongo que si, con la inmensidad de este edificio de al menos diez niveles. Revisé mis pertenecían de trabajo - Mi celular y mi bolso no están aquí.

- No se preocupe por eso, se le será entregado en la salida. Procure avanzar todo lo que pueda y al final escribir lo que realizó, porque mañana se requerirá otra compañera para continuar su trabajo. Un guardia estará monitoreando las cámaras y otro fuera de la puerta, limítese a hacer su trabajo.

Sin más que agregar, la mujer se retiró. Qué complicados, tomé mi cepillo, bicarbonato, y jabón para el moho y comencé mi trabajo. Mis rutas eran del baño de la oficina para recoger agua hacia la pared para frotar y frotar.

Cuatro horas después estaba agotada, y totalmente sudada, más aún porque empujaba mi pequeño cuerpo por los conductos que sorprendentemente eran bastante amplios, empujaba el tubo de la aspiradora y de la limpiadora que tenía una punta de cepillo, para ir tratando de eliminar toda la suciedad y restos de moho verduzco. Tenía una mascarilla protectoras, guantes y mi traje, estaba totalmente sucia y sudada especialmente en lugares que no debería estarlo.

Necesitas el dinero, lo necesitas Alice.

Este lugar necesitaría, varias limpiezas, por suerte ya no estaba contratada al parecer no querían ser visitados por las mismas personas ¡Enhorabuena para mí! No tendría que introducirme y arrastrarme por aquí otra vez, podría volver a mis elegantes limpiezas de edificios normales y pequeños.

Por las magnitudes de la invasión de esta plaga, tenía años aquí y era un agente silencioso porque se estaba expandiendo por las rejillas, invadiendo más oficinas, llegue a la primera rejilla. ¿Debería entrar o no? Esto tenía que ser limpiado, aunque aparentemente no había nada, al inicio esto es microscópico. Es decir que aunque no se viera en la pared de esta oficina aún así estaría aquí, bueno puedo entrar, rocear el antifúngico e irme, quizás me den una propina extra por hacer mi trabajo bien y vaya que la necesito.

Tomé el destornillador multiuso, y desaté los tornillos de la rejilla hasta retirarla por completo, maniobré mi cuerpo hacía adelante y logré salir encontrándome con una gigante oficina totalmente masculina, su tamaño era equivalente a mi pequeño apartamento, era blanca y de un tono gris aun más oscuro que le daba una apariencia sobria
Al fondo había una exquisita pintura gigante, y no tener mi celular para tomarle una foto.

Quería tocarla para ver su textura, parecía rugosa, sin embargo, escuché una fuerte y profunda voz acompañada del movimiento de una silla.

— ¿Quién eres? ¿Y porque acabas de interrumpirme?

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⏰ Última actualización: Apr 26, 2022 ⏰

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Cole W. (Sons Of Delvilry #2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora