•Cuatro•

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— Por aquí, síganme— llevábamos unos minutos caminando siguiendo al hombre, el hogar de Mike era muy parecido a una biblioteca

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— Por aquí, síganme— llevábamos unos minutos caminando siguiendo al hombre, el hogar de Mike era muy parecido a una biblioteca.

— ¿Quieren tomar un vaso de agua?— ofreció.

— Yo no, gracias—. Negué mientras paseaba por el lugar. Había una mesa al centro con muchos papeles arriba de ella.

— Yo si quiero, Mike— el hombre asintió a lo que dijo mi esposo y salió del lugar.

— Perdóname, amor— rápidamente trata de acercarse a mi ¿enserio, William? Estábamos en la casa de su amigo, al menos debió esperar a que llegaramos al hotel en donde nos hospedariamos.

— Hablamos cuando lleguemos al hotel, Bill— hablé con molestia y me puse a observar las hojas que estaban en la mesa. Algunos eran recortes de periódicos, otros eran artículos impresos, y otras eran fotografías viejas de Derry.

— Aquí está tu vaso de agua.— Dice Mike y le da el vaso a mi esposo.

Todo iba bien, yo observaba los recortes de periódico y Mike junto con Bill hablaban sobre detener a “Eso” ¿A que se referían?

— ¿Que le pusiste?— pregunta Bill, lo miré, estaba pálido, y en ocasiones cerraba los ojos con fuerza, parecia estar mareado.

— Son solo unas hierbas, quiero que veas esto— dice y le acerca a Billy una cosa roja, la expresión en los ojos de mi esposo era de asombro, su mirada estaba pérdida. Mike le relataba algún tipo de cuento, me acerque a Bill cuando cayó al piso.

El regreso de Eso |[Bill Denbrough]|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora