Dmitry forma parte de una banda delictiva que se dedica a la trata de blancas, siendo él quien se dedique a monitorear los alrededores se topa con la preciosa Ketzaly.
Las palabras de su superior "No a los de la zona" son las que controlan sus impu...
ARRIBA ABAJO AL CENTRO __________________&__________________
PA' DENTRO.
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La mitad de las chicas habían sido vendidas, era hora de conseguir más, se presentaron un par de problemas con algunos compradores al diferir por la virginidad de algunas de ellas, claro estaba que el culpable de todo era el compañero del Ruso.
Su jefe los había castigado a ambos y los dejó fuera de acción por un tiempo, serían sus marionetas para no levantar sospechas, después de todo era su único trabajo y lo estaban arruinando por la visita nocturna de uno de ellos a sus chicas.
Rusia estaba molesto y no cedía ante la odiosa pregunta de su compañero.
Aa! qué la verga, ¿Jalas o eres culo?-
El eslavo lo miró con el entrecejo fruncido, le molestaba el tono en el que el otro le hablaba pero no era mala idea ir a la feria del pueblo, quizás pueda ver a su prenda* amada otra vez, y acercarse siquiera un poco sin importarle el tipo que se hace llamar su novio. Acepto la invitación de una forma déspota pero no se imaginó que el otro tendría una buena reacción al respecto.
Awilson, espérame aquí carnal-
El tope chico salió de la habitación del Country con una sonrisa maliciosa en los labios, lo cual confundió al ruso. Dió la vuelta sobre sus talones restandole importancia, debía buscar algo decente para ponerse, quería verse presentable y apuesto para ella, sin embargo su compañero se adelantó y en un rápido movimiento le quitó la sudadera Adidas de las manos para dejar frente a su rostro un conjunto de camisa, pantalón, botas y un curioso sombrero. Rusia hizo un ademán con una de sus manos para rechazar lo que sea que había dado a entender el chico sin esperar su respuesta.
-Le vas a gustar más así...
El de ushanka se estremeció ante el comentario, lo miró de reojo y la sonrisa que mantenía el chico lo puso más nervioso. сколькотызнаешь? (¿Cuánto sabes?). Cuestionó el ruso ante la inminente violación de su privacidad.
Mira mi champiñón, estos ojos que se han de comer los gusanos ya han visto las fotos que quitas y pones en esa pared, no te voy a juzgar... Pero al chile estás bien enfermo-
El chico se comenzó a reír de forma sonora y el ruso se enfureció aún más, tomó al chico del cuello de su camisa y lo azotó contra el ropero.
Cálmate cabrón, podrás partirme la madre pero limpio de nos buenos putazos míos no sales-
Al ruso le daba igual todo lo que el otro le decía para que lo soltase, sin embargo el golpe que amenazaba en dar su puño elevado nunca llegó al rostro del odioso y delgado sujeto. ¿Tendrá razón? La pregunta rebotaba en la mente de Rusia, miró el conjunto que le había mostrado hace unos momentos, ahora estaba en el suelo pero no se veía tan mal después de todo; soltó el agarre de su mano dejando al chico caer al suelo y tomar bocanadas de aire para sentir a su pulmones respirar otra vez.
