Catalina despertó a las 9:30 de la mañana, tenia cara de sueño, se paro a la cocina por un vaso de agua y regreso a su cuarto rápidamente. Supe que tendría que hablar con ella.Fui a su cuarto y abrí la puerta lentamente.
-Catalina, tenemos que hablar. -Dije mientras me sentaba a su lado y acariciaba su cabeza.-
-¿Sobre que? -Dijo a la vez que se sentó rápidamente y abrazo sus piernas.-
-Escúchame Cata, si quieres vivir aquí habrán ciertas reglas que tendrás que cumplir entendido? tu no puedas llegar aquí y hacer lo que te de la gana jovencita.
-Ella no dijo nada y agacho su cabeza-
-Cata, si ayer te castigue fue porque me importas, y no quiero que te pase nada. -Me acerque y le di un beso en la mejilla, ella sonrió y me abrazo rápidamente.-
-Te quiero. -Me dijo a la vez que me abrazaba fuertemente.-
-La tome de la cintura y la senté en mis piernas - Y yo te quiero a ti - Le dijo sin dejar de abrazarla.-
-¿Cuales son las reglas? -Me dijo tímidamente a la vez que me miraba a los ojos.-
-Mira linda, tienes prohibido tomar alcohol, mucho menos consumir ningún tipo de droga. Tu hora de dormir sera a las 10 pm y no es negociable, ¿queda claro?
-Si... -Me dijo, a lo que yo le respondí-
-Se dice si señor.
-Si señor...-Me dijo volviendo a bajar su cabeza.-
-Tampoco quiero que vuelvas a usar tangas ¿entendido? - Acaricie su mejilla -
-Que? pero por que? -Dijo algo extrañada.-
-Porque no me gusta que las uses, y punto. -Le dije a la vez que la puse de pie, y empece a bajar su short lentamente-
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Nalgadas a mi inquilina universitaria
RomanceCata era una chica de 18 años, había entrado a estudiar Derecho, carrera que desde siempre había querido estudiar. Lastimosamente (por suerte) en su pueblo no habían universidades, así que tuvo que venir a vivir a mi ciudad cuyo nombre es indiferent...