Capítulo 1: ✧La Primera✧

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Llega el momento en la vida de toda persona en que se da cuenta de quién es y que es lo quiere.

Yo ya tenia en mente lo que quería hacer y sabía claramente en quien me convertiría después de eso, solo faltaba iniciar.

También sabía quién tendría ese privilegio, quien seria la primera víctima, quien me haría ser, quien me haría cumplir mis fantasías, solo me faltaba detallar un plan.

Viernes por la noche.

Después de imaginarme miles de formas de matarla sin dejar rastro, miles de detalles que terminaban en un callejón sin salida, de dedicarle decenas de horas y más, después de tanto me decidí por una.

Una simple pero especial para la mujer que ocupaba mi mente y pensamientos, para la mujer que me motivaba a realizar mis planes.

La víctima - ahhh que bien sonaba ese apodo mientras me la imaginaba - había salido como todo viernes, llegaría a las 23:30 pm como era costumbre y me encantaba eso de ella, su puntualidad, su precisión, su apego a la rutina, por eso ella era perfecta.

Le iba a dedicar mi primera vez y aunque me hubiese gustado darle algo más sofisticado no podía, necesitaba experiencia.

Asique no sería algo sangriento y doloroso, seria algo simple y sencillo.

La sencillez como la mayor muestra de sofisticación.

Tomé un hierro delgado, pero próximamente mortal, de la fogata que nadie extrañaría, esperé pacientemente unos 10 minutos y tan puntual como siempre mi bella dama llegó, yo le sonreí aunque ella no me viera.

Yo estaba en una esquina oscura fuera de su casa listo para darle la mayor sorpresa de su vida una vez que se acerque lo suficiente, pasar desaparecibido era facil y aún más si ella estaba distraída, distraída irradiando tanta vida y calor corporal... Un tanto que se convertiría en nada.

Estaba oscuro pero la luz de su movil iluminaba su rostro, sus expresiones no eran relajadas, se la notaba enojada.

Venía grabando un audio y con odio en su vos la escuché decir.

__ Me quiero morir Ricky, la puta madre. Te odio, te juro que nunca más volverás a verme en lo que te queda de vida.

Sentí como si esa frase fuese dicha para hacer mi gran entrada, una invocación para mí presencia.

__ Cuidado con lo que deseas. - mencioné cuando término su audio.

Yo estaba parado detrás de ella así que se volteó rápidamente a verme. Hubiese querido observar más su rostro, alargar el momento pero ¿Que genio hacía esperar a su amo por su deseo?

Así que en contra de mis propios deseos no esperé su respuesta.

Regla 1: Nunca se debe jugar con la presa porque está se puede escapar.

Sin dudar golpeé con fuerza su cabeza con el fierro que tenia entre mis manos, la velocidad con la que el metal se pronunció sobre el hueso fue indescriptible y despiadada.

Ya estaba hecho, el efecto fue instantáneo, su débil cuerpo cayó en cámara lenta mientras la sangre empezaba a fluír de su cráneo, ella aún estaba viva pero sabia que no por mucho.

Pensé en golpearla nuevamente para agilizar las cosas pero no lo hice, no estaba en el plan.

La herida era lo suficientemente gravé, quise tocarla y decirle que ella me había quitado todo el sueño de los últimos días, que ella era mi musa y yo su genio. Porque en eso me volví cuando ella deseó desaparecer, quise hacerle mil cosas porque está situación mil cosas despertaban en mi.

Collar de CráneosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora