Destined L♡ve

-Te quiero como se quieren ciertas cosas oscuras en secreto y muy dentro del corazón, decía Pablo Neruda. Después de todo a lo mejor nos encontramos para reírnos hasta que el miedo se detenga, la tristeza se diluya, el tiempo se desvanezca y así salvarnos juntos-le dije con los ojos cristalizados, el nudo en la garganta me estaba ahorcando, en cualquier momento me derrumbaría.
-Juntos somos indescifrables, silenciosos, verdaderos cómplices. Juntos formamos un todo-me dijo él, concluyendo la oración, observándome de cerca por última vez. Estaba temblando, le hacía tan difícil como a mí. No me podía soltar, no quería hacerlo.
Dolía tanto, joder, como duele.
Me ha engañado con otra, y lo peor, a pesar de todo el daño que me causó, lo sigo amando, no puedo odiarlo. Así que lo cité. Nos queremos tanto, que nos perdonamos todo, cayó en un momento de debilidad y no quería sentir rencores hacia él, debíamos alejarnos, olvidarnos, pero lo haríamos de la mejor manera. Porque él fue un hombre genial conmigo. Y todos merecemos un final feliz por más que hayamos fallado, lo importante es estar arrepentido.
Él lo está, pero necesito un tiempo largo para volver a confiar. Me destruyó por dentro.
Pero acabamos bien.
-Algún día volveré por ti, es una promesa, te volveré a enamorar y ya no te voy a soltar, te lo juro-me dijo acercándose y depositando un suave beso sobre mis labios, tal vez sería el último, o tal vez cumpliría su promesa.
-Gracias-fue lo único que salió de mis labios, no pude pronunciar otra oración.
Mi interior gritaba, quería decirle que lo perdonaba, que lo amaba, pero sería una gran estupidez. Así que lo deje ir.
***

Los rayos de luz del sol se filtraban por la ventana de mi habitación. Me removi entre las sábanas. Uff,hoy empezaban las clases, me aburría tanto tener que ir.
No podía volver a cerrar los ojos, así que tomé el celular y observé la hora. 5:10 am.
Joder, porque rayos he despertado tan temprano. Aún faltaba como una hora para que sonara la alarma, que más da.
Aproveché la hora y me levanté, así tendría más tiempo para arreglarme.
Desperezándome, me obligué a entrar al baño, mi pelo estaba hecho mierda, mis rulos estaban más que enredados, gracias a Dios desperté temprano, me lavaría este desastre.
Abrí el grifo y dejé que el agua corriera, me relajaba tanto.
Sin prisa me vestí, me apliqué un poco de polvo y lápiz de ojos, tomé mis cosas necesarias para hoy y bajé las escaleras. Fui directo a la cocina junto a mamá.
-Buenos días-comenté.
-Hola niña, siéntate que ya está el desayuno, la hora está transcurriendo rápido-me dijo.
Durante el desayuno platicamos mucho mientras bajaba mi hermana Thania. Sin darnos cuenta se nos hizo muy pero muy tarde, faltaban 10 minutos para que las clases comenzaran y estábamos a 20 minutos del colegio.
Bajamos rápidamente del vehículo y nos adentramos hacia el patio del colegio que lleva directo a los pasillos inmensos que éste tiene.
Ya sabía que clase me tocaba, así que fui directo hacia ella.
-Buenos días, puedo pasar-pregunté algo vergonzosa.
Para mi suerte, toda la clase se quedó mirándome y se pusieron en silencio. Genial!! Lo que faltaba.
-Se puede saber por qué llegas tarde señorita-me contestó la profesora.
Comencé a explicarle todo, pero como siempre, no me creyó y tuve que hacer el ridículo en frente de todos. Hasta que por fin se dignó a decirme que tomara asiento.
Volteé para buscar un lugar vacío y sentí un cosquilleo que en años no había experimentado. A mi corazón le dio un vuelco y tragué en seco. Oh no, esto es un sueño o una pesadilla, me dije a mí misma.
No pude mover ni un sólo músculo, verlo sentado ahí, tan hermoso como siempre. Qué hacía aquí.
-Fernanda, no oíste-me dijo la profesora.
-Eh, qué-pregunté tratando de recomponerme.
-Toma asiento niña.
Caminé rápidamente a sentarme antes que me diera un infarto.
¡Todos somos vulnerables a una persona!
No he prestado atención a ninguna clase, mi mente viajaba e indagaba esos recuerdos que una vez los borré, bueno, eso pensé.
-Hey nena!
Volteé a ver ya que esa voz la podía reconocer a miles de kilómetros. Mis ojos estaban cristalizados, uff..tantos años y aún sigue causando ese efecto en mí.
-Hola Evan-le respondi.
Me dedicó una sonrisa, la más hermosa y atractiva que existía. Joder, lo amo. Nunca lo he superado. Y extrañaba esto, lo extrañaba a él.
Mis piernas flaqueaban mientras más se acercaba.
-Te extrañé tanto, no te imaginas cuánto-me susurró.
-Yo...este, no sé qué decir, por qué llegas luego de tres años. Qué ha pasado de ti-pregunté.
-A veces las preguntas son complicadas y las respuestas son simples!! Vine por ti. Te voy a recuperar Fernanda. No he podido olvidarte. Cada segundo de mi vida he pensado en ti. Te he dado tres años de tiempo, tres largos años en los que me torture. Pero ya no, aquí estoy, dispuesto a todo por ti princesa.
Sus palabras me feclaron por completo. El sabía perfectamente que yo aún seguía sintiendo esas mariposas por él.
Ha pasado tres años desde que partió, en los cuales cada uno tomó caminos diferentes para poder pensar y reflexionar un poco. Corregir y aprender de los errores. Lo he perdonado hace bastante tiempo, lo he extrañado tanto porque sé que esto podría funcionar. Y no me importa lo que haya hecho, quedó en el pasado. Tengo tantas ganas de conocer al nuevo Evan. Está muy cambiado,todo pasa por algo.
Al diablo, quiero arriesgarme de nuevo, arriesgarme a que me lastime o no. Porque a fin de cuentas así es el amor, es algo de dos. Hay obstáculos,  y tendré que aprender de ello. Aún soy muy joven. Y pues que venga lo que tenga que venir. Solo vivimos una vez, debo aprovechar el presente, dejar el pasado atrás y no pensar en lo que podía pasar en el futuro, porque si sabemos lo que vendría, jamás nos arriesgariamos a nada y nos cerrariamos por temor. Vivir el presente!! Respira ondo y sigue!!
Salté a los brazos a Evan, lo envolví en un abrazo que decía todo menos palabras.
Me sostuvo de la cintura e hizo lo que menos espere.
Me beso!!
Un beso suave, tierno, que decía tantas cosas. Tantos sentimientos abstenidos. Le correspondí fácilmente.
Fuimos intensificando el beso a uno hambriento, joder! Tantos sentimientos mezclados en un solo beso, un solo encuentro.
-Te amo, siempre te amé. Jamás pude olvidarte-me dijo en un susurro sobre mis labios.
-No me sueltes por favor-suplique.
-Nunca más princesa.
Y así es!!
Estoy segura de que este encuentro es el principio de una nueva historia. En donde la protagonista seré yo, porque aquí no acaba.
Esto recién empieza, Evan es mi todo.
Es mi complemento.
Evan...
Pues Evan es mío!!!