Dos

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Narrador:

Sao caminaba por la escuela oyendo las burlas de sus compañeros. Ya que  no poseia olor a su edad, lo juzgaban de raro porque siempre leia y estaba solo.

Un chico le puso cabe para que se cayera, empezo a recoger todos sus libros, los demás empezarón a reirse y burlarse de él.

Hasta que aparecio Mario y los callo a todos.

-- Te ayudo -- dijo el castaño.

-- No es necesario ya estoy acostumbrado a sus burlas -- dijo el pelinegro.

-- Oye solo te queria decir...emm te gustaria tener una cita conmigo?-- dijo el castaño nervioso.

-- Yo pues...umm no se es que jamas he ido a una cita -- dijo nervioso.

-- Ese no es problema nos divertiremos mucho -- dijo sonriendo.

-- Esta bien -- dijo el pelinegro.

-- Entonces mañana a las 3:00 -- dijo feliz.

--Ok umm Mario gracias por defenderme -- dijo con una pequeña sonrisa.

-- No te preocupes siempre estaré para ti -- dijo revoloteando el pelo de Sao.

Sao se sonrojo levemente.

Al dia siguiente quedarón de encontrarse en el parque más cercano.
Sao ya estaba listo y muy nervioso lo estaba esperando en un banco del parque.

-- Siento la tardanza -- dijo el castaño agitado de correr.

-- No te preocupes, acabo de llegar y bien como es esto de las citas -- dijo algo nervioso.

-- Bueno primero planeaba llevarte a un parque de diversiones -- dijo sonriendo.

Luego de decir eso el castaño observo
Bien al pelinegro le sorprendio la manera en la que venia vestido se veia muy lindo en su punto de vista, haciendo sonrojar a Sao.

Luego de decir eso el castaño observoBien al pelinegro le sorprendio la manera en la que venia vestido se veia muy lindo en su punto de vista, haciendo sonrojar a Sao

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(Asi se veia)

El resto del dia Mario llevo a varios lados a Sao, mientras tanto un pequeño omega se iba enamorando mas del alfa.

Mario se dio cuenta de eso y decidio aprovechar la oprtunidad.

El castaño lo llevo a su casa y en el camino le dio algo que sorprendio a Sao.

Pov. Sao:

Mientras ibamos caminando hacia mi casa Mario y yo hablabamos de temas triviales, me sonroje bastante cuando pregunto si aun era virgen pero al final le dije que si sorprendiendole mucho luego se rio levemente pero ¿porque?.

Justo antes de llegar a casa Mario me agarro de desprevenido y me beso.

Sus labios eran suaves y la calidez con la que me sujetaba me encantaba, queria detener el tiempo y quedarme asi para siempre pero por falta de aire nos separamos, ese fue mi primer beso.

--  p-porque -- dije nervioso

-- La verdad es que me gustas mucho Sao -- dijo firme.

Despues de esas palabras caí a sus pies , no sabia que decirle tenia miedo de lo que fuera a pensar si lo aceptaba tan rapido ya que nos conocemos poco pero me arriesgue por él.

Que tonto fui.

-- A mi tambien me gustas Mario -- dije, con mis ojos apunto de llorar.

Luego de eso Mario me volvio a besar y me cargo en sus brazos los dos sonreiamos en ese momento de mi vida me sentia muy feliz, ya eramos novios.

Al llegar a casa vi a mi padre con unas botellas de licor lo bueno es que estaba dormido si no me ubiera golpeado.

Cuando entre a mi cuarto coji mi diario que estaba debajo de mi colchón y empeze a escribir con detalle todo lo que habia pasado hoy era como decirle a mi madre todo lo que sentia.

                      Estaba feliz.


























                            O eso creia.

XXPROSTITUTOXXDonde viven las historias. Descúbrelo ahora