Pokéfilia - Pedidos (Lo que quieras y más).

3. Mi pequeña.

Pedido por papurikolino537

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Entrenador (M) x Zorua (F).

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Los Zorua, se dice que son una especie engañosa, juguetona, pícara y traviesa.

Bueno... para ponerlo en palabras simples, sí, lo son, pero por experiencia descubrí que no es eso su completo ser, gracias a Julie, mi Zorua, lo sé.

La conocí por casualidad cuando iba a hacer algo simple, comprar ingredientes para hacer comida en mi departamento.
Regresaba ya, en el punto exacto del atardecer, tenía que caminar lejos, así que conforme avanzaba se oscureció del todo.

Caminaba en un parque, necesario por el camino hasta la casa, cuando comenzó a moverse un arbusto, me asusté, pero a la vez esperé para ver que era la criatura que hacía esos ruiditos.

De pronto salió un Zorua, me gruñó y se puso en posición para saltar a por mí, no quería ningún problema, así que intente alejarme, pero el Zorua nuevamente se puso frente a mí gruñendome, veía las bolsas que tenía y de pronto escuché su estómago rugir.

- ¿Mmh?, ¿Tienes hambre?. - Dije agachándome para estar a su altura... más o menos.

Como respuesta solo obtuve un quejido y que el Zorua mirara a otro lado.

- Oye, no esta mal pedir ayuda, ¿sabes?.

Le di unas cuantas rebanadas de jamón, al principio se veía como si no las quisiera, pero después agarró algo de confianza y las tomó de mi mano y salió corriendo.

Esto se repitió unas cuántas veces, cada semana el mismo Zorua aparecía, y yo le daba comida, hasta que un día le dije:

- Veo que siempre vienes a que te de algo de comida, ¿qué te parece si vamos a mi casa?, ahí puedo darte una mejor cena.

El Zorua se quedó pensando un tiempo y respondió.

- ¿Y por qué quieres que vaya a tu casa?.

- ¡Oh!, sabes hablar.

- ¡Claro que sé, ¿por qué no lo sabría?!

- Nunca lo habías hecho hasta ahora.

Zorua miro hacia un lado, se quejó entre dientes y le dijo:

- ¿Y por qué me das comida cada que vengo?

- No sé, parecías quererla así que ahora compro un extra para tí.

- ¿Y por qué haces eso?.

- No lo sé, ¿por qué no?

- Es sospechoso, y ahora dices que quieres llevarme a tu casa.

- ¡¿Q-q-que?!, ¡N-no me refería a eso!

- Jijiji, no sé yo, quizá empiece a gritar por ayuda.

- N-no hagas eso por favor, no tengo esas intenciones, de verdad. - Dije nervioso.

- Jajaja, que inocente eres, es broma, hombre.

- No es gracioso.

- Yo digo que sí lo es, en fin, ¿cómo te llamas?

- Me llamo Carlos.

- Ok, yo soy Juliet, pero dime Julie, es mejor.

- Ok, Julie, ¿quieres venir?.

- Esta bien, pero que sepas que no puedo pagarte nada.

- Sí, no quiero que lo hagas igualmente.