𝗛𝗘𝗔𝗩𝗘𝗡 ♡

✦﹒◟ 04 (+18)

"Noona, perdóname por favor." susurró el chico en un inútil intento de tomar su mano. "Ya detente Yoongi." soltó ella sin despegar su vista de la carretera, aún conduciendo a una velocidad moderada.

"Pero mami..." Retrucó viéndola con el ceño fruncido en un lindo puchero. "¡Ya basta, cállate!" Su novia alzó la voz asustándolo, este se mantuvo cabizbajo mientras resguarda a las ganas de llorar que lo habían llenado por completo.

"Ni se te ocurra." La mayor comentó en un tono seco y amargo. Sin embargo eso no fue para mejor, los sollozos de Yoon comenzaron a notarse fácilmente. En ese momento las amenazas de ella le importaron muy poco, se sentía dolido.

Se notaba que ninguno daría el brazo a torcer ya que ella lo ignoró totalmente hasta llegar a la casa, al llegar el menor corrió al dormitorio tan rápido como pudo e ignorandola hasta encerrarse y asegurar la puerta con su contraseña. En cierto modo ella también había actuado mal, y sentía que debía disculparse con él.

"Bebé, vamos, abre la puerta." Murmuró ella con calma, aún oyendo como trataba de tapar su llanto ahogado seguido de pasos aproximándose. "C-contraseña." Habló Yoon con la voz rota, tomando aire después de la oración. Se notaba que su llanto había sido agotador. La muchacha al recordar su contraseña.

- 03/07/17.- contestó casi al instante, no fue difícil, esa era la fecha en la comenzaron a salir. Unos segundos después la puerta fue abierta seguido de un "Beep", los rojizos e hinchados ojos la observaron pasar dentro de la habitación mientras él se mantenia con el cabello despeinado y los brazos cruzados.

Una vez dentro sostuvo la mano de YoonGi para llevarlo directamente a la cama, sentandolo en su regazo, acarició sus cabellos dorados y lo observó esquivar su mirada.

"Príncipe, ¿si sabes que lo que hiciste no estuvo bien?" Cuestionó acariciando su espalda mientras lo dejaba descansar sobre su pecho con su rostro ardiendo de la vergüenza.

"Si mami, no debí hacerlo." Habló sorbiendo su nariz, tomando más confianza y abrazando su cuello con ambas manos.- ¿por qué te quedaste dormido en la clase del señor Gyeom?

- no he estado durmiendo muy bien, noona.- comentó bajándose de su regazo y corriendo hacia su armario, de ahí sacó una pequeña cajita en forma de corazón. De lo poco que logró ver, el envoltorio era blanco, con unos lindos detalles de brillantina que formaban ambas iniciales.

Volvió a subirse a mi regazo mientras mantenía la caja detrás de su espalda con timidez, suspiró y la sacó de su escondite dejando ver esa tierna caja, él mismo la había hecho como regalo para ella. Con sus manos temblando, se la acercó a su mayor para que ella la sostuviera.

- oh, mi amor esto es tan hermoso. - rió dejándola a un lado y besando todo el rostro de su chico, realmente había amado ese simple pero dulce presente. YoonGi comenzó a reír por las cosquillas que causaban los besos de su mami, tenerlo sonriendo era la cosa más hermosa que ella jamás había visto.- oh mi rey, ¿por ésto no dormiste ayer? wow, nunca lo imaginé.- habló ella sonriendo y tomando la cajita de nuevo para admirarla mejor.
- sí noona, ayer estuve decorando la tapa ¡fue un trabajo duro! - estimó haciendo señas con sus brazos.
- eso se nota precioso, toda buena acción merece una recompensa ¿no crees? quizás podría dejar de lado tu castigo, ¿hmm? - ella lo observó teñir sus cachetes al rojo más ardiente.
- te amo, mami.- susurró Suga, sus ojos gatunos bajaron a los labios de ella, sin esperar tomó sus mejillas con sus dedos, casi sin tocarla.