un lugar muy loco

Temporada 3-Capitulo 24(final de temporada)

climbed the path of deep sleep/subido al camino del sueño profundo.

-Muy bien, ya casi llego-dice Miguel, sentado en el autobús.

Era una mañana clara con un toque de veranal, Miguel viajaba en el autobús hacia la casa de sus padres para un almuerzo y reunión familiar. Su sonrisa estaba llena de brillo y pureza, como si no recordara lo que alguna vez paso con ellos. El tiempo además era favorable para esto, sabia lo callados que podrían llegar a estar, no le importaba por lo que se veía.

10 minutos despues, el autobús lo dejo al frente de la casa, sus manos sudaba y temblaban un poco. Cruzo la calle y con suavidad toco la puerta.

-Mamá, landor, papá-dijo Miguel *vuelve a tocar la puerta*
-Un momento-dijo su madre, poco mas de un minuto abrió y lo abrazo.

Miguel entro en la casa y un enorme espacio se veía, poco despues se presentó landor, su cabello negro ahora se veía un ligero tono mas claro, quedando como un gris demaciado oscuro.

-Veo que has querido ver a tu familia, me sorprende-dijo landor de manera seria y hasta sarcástica.
-Esta bien, lo admito pero yo si note el error que cometemos al hacer todo eso del secuestro y venta de órganos-dijo Miguel.
-Eso fue lo que nos saco a flote. Cambiando el tema, ¿que has hecho?-dijo landor.
-Eh... Estuve bajando durante los últimos 2 meses-dijo Miguel-es entretenido-
-Me alegro-dice su madre *lleva los platos a la mesa*

Un extraño sonido envolvía el lugar a donde Miguel iba, similar a la palpitaciones del corazón y eso confundía a Miguel. Landor junto a Miguel subieron las escaleras para despues caminar un pasillo lleno de puertas y fotos, algunas fotos se aprecian a sus antepasados. Al llegar al final de el pasillo, estaba una puerta con un pequeño cartel que decía "Miguel".

-Mira tu habitación, sigue intacta despues de casi un año-dijo landor.

Miguel abrió la puerta y fue deslumbrado por la luz que venía de la ventana que aun estaba abierta. La cama estaba destendida y la ropa del canasto aun no se había lavado, la pintura azul se despegaba de la pared y dejando ver el color verde lima que cubría por detrás. Así es como había quedado, nada se había movido ni medio centímetro.

5 minutos despues, bajaron para el almuerzo, este fue servido en plato de porcelana y la bebida en un vaso de vidrio transparente.

-Muy bien. ¿Quien quiere oír la historia de como yo llegue a donde estoy ahora?-dijo Donoban Cog.
-No otra vez, siempre la cuentas-dijo su madre.
-mamá, déjalo aunque sea por última-dijo Miguel.
-Muy bien-dijo su madre. Rodó los ojos.
-Esta bien, cuando to estaba en la universidad, pero especialmente en segundo año de la carrera de medicina. Tuve un percance con un estudiante de economía, el y yo estuvimos en la reunión de los partidos políticos universitario. Que son una mierda. El trato de asaltarme en son de broma cuando yo fui al baño, no lo entendí hasta muy tarde, termine atacandolo como mi padre me enseño, obligandome a pelear con el cuando yo tenia problemas y si yo perdía, dormía en la entrada de la cada con el frío y los rasgos mas grandes de esposo tiempos. Los hippies-dijo Donoban Cog.

La comida no duro mucho en los platos, apesar de que todo era abundante.

-Lo lleve a mi apartamento y allí vi como el aun seguía sangrando del estomago, lo mantenía amarrado con los cables de mis viejas e inútiles computadoras. Busque que hacer y decidí ir quitando sus órganos, venderlos y obtener una gran familia. El estaba sufriendo en la parte de mi dormitorio, además de que también moría de hambre y sed. Murió a los 3 días despues de ya no tener casi nada, yo había conseguido bastante dinero en ese negocio y pude ir formando una vida-menciono Donoban Cog.

Todo se quedo en silencio por unos cuantos segundos, lo típico de todas las comidas, despues de una falsa tos de parte de la madre. Un par de minutos despues, dejo de sonar aquel extraño ruido, raras flamas de fuego rojizo salieron del suelo y se estaban comiendo poco a poco cada muro de la casa.

-¿Que sucede?-dice Miguel asustado.
-Sabes que estas en un lugar diferente a la realidad. Tu has estado en coma durante los últimos meses, despues de que el orfanato colabsara-dijo su madre.
-No... Yo salí y fui a la para de autobús mas cercana, huí hasta llegar al aeropuerto de Tenoria-dijo Miguel.
-Eso es lo que tu mente te quizo mostrar, nada de esto existe ya. Estamos lejos... Moriremos en algún momento sin importar lo que hallamos hecho, nuestro legado es el que nos tendrá vivo-dijo landor mirando el fuego.
-Entonces, ¿e escucha tanto tiempo mi corazón?-dijo Miguel para despues caer rendido en la silla.
-En efecto, el autobús ya casi llega a esta eestación tu debes estar allí. Nosotros te acompañamos-dijo Donoban Cog.
-bien-dijo Miguel con una lágrima en el ojo.

Otro latido sono, el fuego desapareció en ese instante, así que Miguel y el resto de su familia salieron de la casa para despues ir a la parada que estaba en frente. Entre ellos no habían casi palabras, sus silencios incómodo ya parecían ser su conversacion. Miguel solo tenia pesar y confusión, saber que todo lo que el hacia y había logrado era producto de su cabeza, no lo tenia nada alegre. Veía a lo lejos el túnel a lo desconocido, la última entrada.

-Aun no estoy listo-dijo Miguel *mete sus manos a los bolsillos de su suéter*
-Nadie lo esta, sabes-dijo Donoban Cog.
-¿Que es lo que hay mas allá?-dijo Miguel.
-No hay nada-dijo Donoban Cog-nunca veras a nadie del otro lado porque, no hay otro lado.

El autobús llegó, Miguel subió en silencio al saber aquello, tenis miedo y remordimiento. El autobús se dispuso a continuar 5 minutos despues que todos subieran. Miguel estaba mirando por la ventana con su cara triste, sentía como poco a poco su cuerpo se sentía mas ligero, sus ojos se cerraban porque tenia cansancio.
Llegaron al túnel y el fuego volvió, todo se mecía de tal forma que se iban volviendo las cosas ceniza.

-Todo va a estar bien Miguel-dijo su madre. Acariciaba su cabello.
-Es hora de relájese-dijo landor.
-Y sobre todo... De decir adiós-dijo Donoban Cog.

Los tres se volvieron ceniza al poco tiempo, Miguel seguía siendo el, completo mientras su corazón iba atiendo mas y mas, su pulso se estabilizaba y un último brillo llego a sus ojos antes de dormir. Fue la cara de sus tres familiares.

En el hospital, Miguel mejoraba cada vez mas al punto de estar casi por completo estabilizado.

-¡Ah!-grito Miguel al despertar.

Habían varios médicos alrededor de Miguel, todos revisando el cuerpo de Miguel y su estabilidad. Se veía cansado y bastante agobiado. Todos lo dejaron un momento solo.

-Este es el mundo real. Eh despertado... *supiera* Eh despertado-dijo Miguel triste.