Gracias a Lucía

Capitulo 1 : "Nos deja el avión"

Sofia estaba acostaba en la cama de su habitación con la pequeña de dos meses que dormía contra su pecho, y a su lado estaba Nicolas que miraba a ambas mujeres con una inmensa sonrisa.

Es increíble como un ser tan pequeño e indefenso es capaz de cambiarle la vida a la gente.

El matrimonio Jauregui Cabello intentó por más de dos años convertirse en padres, y por fin lo habían logrado.

La cómoda burbuja en la que se encontraba el matrimonio se rompió gracias al llanto de la pequeña.

- Creo que la nena ya tiene hambre - ríe Nicolas - ¿Qué te parece si bajamos a cenar todos?

Sofia aparta la mirada del bebe y mira a su esposo extrañada, últimamente a Nicolas le gustaba cenar en la cama.

- ¡Anda! Que te tengo una sorpresa - sonríe mientras se acerca al rostro de su esposa y le deposita un suave beso en la frente.

Sofia le acaricia el rostro a Nicolas y se pone de pie mientras acurruca al bebe.

- Ojo que voy exclusivamente por la sorpresa - se burla.

La pareja al llegar a la sala te topa con una pequeña caja de color rojo sobre la mesa, Sofia con una sonrisa mira a Nicolas y le pasa al bebe, para luego tomar la caja y sacudirla cerca de su odio, tratando de descifrar que podía haber dentro de ella.

- Así no adivinaras nunca que hay dentro - ríe - ¡vamos, ábrela!

- Era solo para ponerle un poco de suspenso al asunto - abre la caja y no entiende nada al ver un sobre en ella - más te vale que no sea una broma amor - lo mira con gracia y abre el sobre - y esto es...?

- Nos vamos a Venecia! - contesta emocionado.

- Que? - seria con el ceño fruncido.

- Pues ahí dice - se acerca a Sofia y le señala los dos boletos - sé que es uno de tus sueños conocer Venecia y ...

- Pero no vamos a ir - lo interrumpe.

- ¿Que? Pero ¿por qué? - mirándola directamente a los ojos.

- La razón la tienes entre tus brazos - suspira- que no te das cuenta de que Lucía está muy pequeña para viajar en avión?

- Pero vida - le toma una mano - este es un viaje solo para nosotros, es aquella luna de miel que nunca tuvimos ...

- Con mayor razón, mi respuesta es no - suspira - ¿acaso quieres dejar a la niña sola? no ves que es muy pequeña aun y necesita de nuestros cuidados - ya algo molesta.

- Pero he hablado con Camila y no tiene ningún problema en cuidar a la nena, es solo una semana, tampoco es tanto tiempo, no seas exagerada.

- Exagerada? - con sarcasmo - bueno, si tanto quieres ir a Venecia, que te vaya bien, pero conmigo no cuentes, que tengo una hija de la cual cuidar, ¿sí? - se pone de pie y se va.

- Amor ... - solo suspira al verla irse.

- ¿Tu estas loca? - es lo primero que dice cuando le contestan el teléfono.

- Hola hermana, yo bien, ¿y tú? - contesta con sarcasmo.

- No te hagas la graciosa, que no estoy de humor - suspira - ¿Por qué avalaste la locura de Nicolas?

- Pero de que hablas... - suspira entendiendo a que se refiere - ¿estás hablando del viaje?

- Claro! es una Lo - cu - ra.

- ¿Por qué dices eso Sofía? - sin comprender la conducta de su hermana.

- ¿Qué?, ¿tú tampoco lo entiendes? - comienza a sollozar.

- ¿Qué pasa? ¿estás bien? - preocupada.

- Es que no entiendo - ignorando la pregunta de Camila - Tanto que nos costó ser padres y ahora que lo somos Nicolas quiere que nos alejemos de Lu, es que no sé qué es lo que le está pasando por la cabeza.

- Sofia - le habla con tranquilidad - no lo veas de esa manera, no creo que Nicolas haya hecho esto para alejarse de la niña, es cosa de que veas como se le derrite el alma al mirarla - suspira - quizás solo quiere tener un tiempo contigo, ¿te has puesto a pensar cuanto tiempo de pareja se han dedicado desde que nació Lu?

- Pero nada que ver, él tiene que entender que toda nuestra atención tiene que estar en Lucía.

- ¿Eso es lo que realmente crees? - dice con duda.

Sofia rompe en llanto.

- Quizás tienes razón, es solo que entiéndeme a mí, aun no logro procesar bien que lo que tanto anhelamos, por fin lo tenemos – suspira profundo - entonces ella se ha convertido en mi todo, no quiero despegar la vista de ella, ni nada y me he segado bastante - admite - te dejo Cami que debo hablar con Nicolas.

- No te preocupes Sofia, estoy segura de que este viaje les vendrá muy bien a ambos.

Cuelgan el llamado, Sofia toma a Lucía y la duerme contra su pecho, para luego dejarla acostada en su cuna y salir de la habitación hasta la sala, donde encuentra a Nicolas sentado sobre el sofá con las manos en el rostro, en silencio se sienta a su lado y le toca la pierna.

- Nico, lo siento - es lo primero que dice Sofia - lamento mucho la forma en la que reaccioné hace un rato.

- No te preocupes - levanta la vista y le toma las manos - yo tratando de hacer algo bien y fue super mala idea...

- No lo fue - sonríe - de hecho, ¡ha sido una super buena idea amor! siempre he querido conocer Venecia - Nicolas solo la mira sorprendido - no me mires así - le toma el rostro y lo besa - ya admití que mi reacción no fue buena, pero solo fue por Lu, últimamente me he olvidado de nosotros y solo me he enfocado en ella, y eso no está bien, ¿me perdonas? Prometo compensarte durante el viaje - lo mira con picardía.

- ¡Dios! - la toma por la cintura mientras se pone de pie y le llena el rostro de besos, ocasionando la risa de ambos - ¡que no te imaginas cuanto te amo!

Dos semanas después

- Una vez más, muchas gracias por aceptar quedarte en nuestra casa - sonríe - y te repito cuídame super bien a la bebé, recuerda que cualquier cosa que pase tu nos llamas e inmediatamente nos devolvemos sin importar la hora...

- ¡Hey amor! - Nicolas toma de la cintura a su esposa - que Camila ya sabe todo eso, que se lo has dicho mil veces - ríe y mira su reloj - apuremos nos que nos deja el avión.

- Seguros que no quieren que los deje en el aeropuerto? - insiste Camila - que no me cuesta nada, coloco la silla a esta preciosura en el auto y vamos - toma las llaves de su auto.

- No es necesario, sabes que con esta lluvia no queremos exponer a Lucía a que se enferme, además nuestro transfer ya está afuera de la casa - comenta Nicolas mirando por la ventana - creo que ahora sí es hora de irnos.

Sofia y Nicolas toman sus maletas para salir de la casa, pero antes llenan de besos a la niña y le dicen mil veces cuanto la quieren.

- Y nos quedamos solas - dice Camila mirando ala pequeña que se reía contra sus brazos - ¿ah sí? ¿es muy gracioso? - y se pone a tontear con la niña.

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Después de bastante tiempo, estamos de vuelta 😬