Fics Tatu

QUIÉN TE HACE SENTIR...

Autor:  Tsvidersja Vselodovich

Aclaración.- Todos los hechos aqui narrados son ficticios. Derechos de autoría, de propiedad y etc. no se dañan en esta historia.

Nota.- Les resultará algo extraño este fic pero se me ocurrió a partir de una canción de U2, se llama "Stay". Disfrutenlo!

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Desde que recuerdo siempre has tenido la misma rutina, mejor dicho, desde que estás con él. Cuando era yo quien te abrazaba tiernamente luego de que haciamos el amor, nuestros cuerpos debiles ante la tentación de un campo solitario, el cuerpo rozando con el verde pasto. Ahora él te llena de sus abrazos violentos, mis palabras dulces él las borra con sus insultos, diciendote que eres una inutil, haciendote creer que lo que pasó conmigo fue por culpa de las drogas o mi estupida inocencia, logrando hacerte llorar con esas mentiras!

Recuerdo que eras la alegría que contagiaba a todos los que te miraban, de ese modo me cautivaste, al verte entrar sonriente al camerino del grupo, tus ojos brillando...

Cuando te fijaste en mi, oh! Dios mío! Jamás pensé que mi sueño se hiciera realidad, así pasaron los años sin molestarnos; en casa, recuerdo que solías quedarte a mirar la publicidad por la T.V. mientras yo iba por las sodas, te sabías de memoria todos los talk-shows. Nos entreteníamos con la radio, con la maravillosa T.V. a satelite, donde puedes ir a cualquier parte: a Miami, a Nueva Orleans, a Londres, a Berlín... todas esas ciudades a las que alguna vez fuimos, sin soltarnos las manos ni el corazón.

Nunca te toqué de la misma forma, y nunca te llamé ni te escribí cuando estaba lejos, porque nunca me fui, siempre estuve contigo, en ningún momento me alejé de ti.

Las largas filas de arboles en la avenida, empezando a enfadarse al ver tu belleza cuando paseabamos. Hundiendome en el pasado, esos tiempos en los que cambié el té y las noches de insomnio por tus besos y caricias, sólo eramos tú y yo en nuestro propio mundo de ingenuidad.

Son las 10 de la mañana, sales de tu casa, caminas por el boulevard buscando una tienda, te detienes al encontrarla y entras por un paquete de cigarrillos; la verdad es que tú no fumas, ni siquiera quieres aprender a fumar, está demás preguntar para quién son. Veo que te fijas que te den el cambio correcto mientras sales disfrazada de "accidente de automovil": las ruedas están girando pero, sin embargo, tú estás de cabeza.

Luces rojas en tu pelo, mañana gris en tus ojos. Por eso tropiezas con un agujero que está en el asfalto, te pregunto: Eres una asesina o una victima?; supongo que todo depende de quién esté a tu alrededor, pero tu único entorno se ha vuelto él, te convertiste en una ermitaña alejando a nuestros amigos, rechazando su ayuda.

Sabes? Si respondes no será a mí, si te dieras cuenta de que miras a través de mi... y que si miras ves a través de mi; que cuando yo trato de tocarte tú no sientes nada, ni por casualidad te enteras que lo intento.

Sigo mirandote, regresas a casa, le entregas los cigarrillos, te abofetea por no comprarlos de la marca que pidió; la gente sabe esto, es un secreto a voces, cuando tu hermana te dice que lo dejes tú dices que cuando él te golpea no te importa, porque cuando él te hiere te sientes viva? es eso?

Las horas pasan, para ti lentas, para mi corren más rápido que la luz, el atardecer refleja los rizos rojos de tu cabello en el horizonte; escapas por algunas horas luego de que él se queda dormido y borracho, has venido a mi encuentro, en el parque que tiene nuestro nombre grabado en los arboles. Has llorado por mucho rato, seco tus lagrimas con el viento, y pienso... si pudieras regresar hoy, cuando la noche te despierte, o si al menos pudiera quedarme siempre contigo y el día me mantuviera con su confianza, quedarme... regresar... y la noche nos sería suficiente.

Te levantas, vas de vuelta a tu infierno normal, te digo que no te vayas todavía pero no me puedes escuchar y si escucharas no te podría llamar, si saltaras de mi mano podrías creer que si el mundo entero gritara sólo te escucharía a ti.

De cualquier modo me quedaré, y la noche otra vez te despertará, me quedaré, con la confianza que el día me tiene, me quedaré con los demonios que tú ahogaste; me quedaré con el espiritú que encontré para poder verte aunque la noche no me sea suficiente.

Quién podrá hacerte sentir de la misma forma como yo lo hacía, quién podrá conocerte y amarte como yo, quién te tocará y te protegerá como yo lo hago!!

- Todavía pienso en ti, mi amor, estaré siempre aquí esperandote; viviré para seguir amandote y cuando sea necesario volaremos lejos en el cielo de tus ojos. Cada día sueño que tú estás a mi lado, Yulia, cuando pueda verte todo estará bien.

Lena... me has respondido, mi pelirroja. Pero ya son las tres de la madrugada, ya está todo tranquilo y no hay nadie merodeando. El silencio cierra tus ojos, ya estás acurrucada en tu cama ocultando mi imagen bajo tus parpados; no se escucha nada, sólo el estrepitoso golpe, ese golpe de un angel guardián que aterriza a los pies de tu cama como todas las noches... Sólo el estrépito... el choque cuando un angel se estrella en el suelo.

FIN