Fantasy System

Cap-68

Capítulo 68: La pequeña fiesta

Ed se despertó tarde. Se fue rápidamente para llegar a su clase. Afortunadamente su maestro fue incluso más tarde.

"Todos, no habrá clases esta semana debido al torneo". Inmediatamente, el estado de ánimo fue mejor en clase. A nadie le gustaba ir a clase, excepto unos pocos seleccionados, así que fueron buenas noticias. "Tendrás este tiempo para entrenar. Una sala de entrenamiento estará abierta a cada clase para que no tengas que preocuparte por los horarios. O simplemente puedes elegir entrenar en tus habitaciones". Harry estaba a punto de salir del aula pero se detuvo. Aparentemente, recordó algo.

"La academia quiere que nosotros, maestros, les brindemos apoyo a todos, por lo que si necesitan algo pueden venir a la oficina de maestros. Pero por favor no, quiero ser libre esta semana". Como de costumbre, la pereza de Harry superó su desvergüenza. Les dejó la llave de la sala de entrenamiento y se fue. Ed fue a hablar con sus amigos antes de que todos se fueran.

"Oye, ayer recibí carne rara y planeo cocinarla. ¿Les gustaría unirse?" Ed fue directo al preguntarles.

Hayato y Stephanie respondieron positivamente mientras Emilia parecía querer negarse, pero Ed no se lo permitió. "Quiero que todos vengamos y lo disfrutemos, no trates de rechazarlo. Planeo invitar a Leon también, así que cuanto más mejor". Emilia estaba convencida y aceptó unirse. Solo Ellie, que estuvo callada durante un rato, no estuvo de acuerdo. Sin embargo, todos sabían la razón, así que Emilia y Stephanie, como compañeras, la convencieron de unirse.

"Bueno, entonces, me iré a buscar a Leon. Solo ven a mi habitación al atardecer". Ed se fue después de decirles. "Qué maravilloso sería si tuviera un teléfono ahora" Ed tuvo que buscar a Leon hasta encontrarlo, no pudo evitar recordar la grandeza de la tecnología. Sin embargo, Ed tenía algo más, aunque no mejor, aún bastante útil. Activó su Mapa y buscó puntos verdes. Rápidamente encontró dos puntos verdes y siguió adelante. Estaba cerca de una sala de entrenamiento, por lo que Leon probablemente estaba entrenando. Esperó afuera un rato antes de que tomaran su descanso.

La clase C era diferente de la clase E. Principalmente su maestra, que estaba bastante entusiasmada por entrenarlos. Ed le pidió permiso para hablar con Leon.

"Voy a cocinar algunas cosas buenas hoy al anochecer, asegúrate de que estés presente", Ed le dijo a Leon lo que iba a suceder y quería irse rápidamente para que no se interpusiera en su entrenamiento.

"¡Ah, oh! ¿Puedo traer a Liza conmigo?" Leon detuvo rápidamente a Ed y le preguntó.

'Liza debería ser su compañera de clase del otro día' Después de darse cuenta de esto, Ed tenía una sonrisa tortuosa en su rostro, lo que asustó a Leon.

"¡¿Qué pasa con esa sonrisa ?! ¡No es lo que piensas!" Se defendió rápidamente.

"¡Claro, claro que puedes invitarla! ¡Me aseguraré de reservarte dos asientos uno al lado del otro!" Ed bromeó con su amigo un poco antes de irse.

Ed regresó a su habitación y comenzó a prepararse. Iba a usar la mitad del cuerpo como anfitrión para sus amigos, mientras que la otra mitad estaba reservada para Raikou y el resto. Ed retiró los artículos que necesitaba de su inventario y comenzó a cocinar. Incluso hizo utensilios especiales que no encontró en el mercado con su habilidad de herrería.

Usó la carne de pechuga como plato por sí sola, mientras la cocinaba en aceite y la horneaba. También hizo un poco de pollo frito, que echó de menos durante tanto tiempo. Todos sus platos fueron hechos con las mejores especias que pudo encontrar en el mercado de la capital. Cada plato que hizo se almacenó instantáneamente en su inventario, manteniéndolo caliente y listo para usar. Ed pasó casi cuatro horas para preparar toda la cucaracha. No sabía si debía reír o llorar. El ingrediente que quería durante tanto tiempo desapareció en un solo día, pero definitivamente valdría la pena.

Todavía había algo de tiempo antes del atardecer, así que Ed entrenó a su Ren solo esta vez. Ayer practicó Shunpo la mayor parte del tiempo y no pudo entrenar mucho en Ren. Ahora podría mantener este estado durante aproximadamente una hora, lo que fue una mejora impresionante teniendo en cuenta que no entrena tanto como quiere.

El tiempo pasó y Ed estaba esperando en su habitación después de ducharse. Muy pronto, alguien llamó a su puerta. Fue Hayato, quien trajo algunas bebidas. "Afortunadamente no es alcohol" Ed no toma ninguna bebida alcohólica. Era simplemente una aversión.

La gente comenzó a venir uno tras otro. El último en llegar fue Ellie. Ed los reunió a todos y se sentaron en la cocina. Era lo suficientemente grande como para sentarse con espacio de sobra.

"Bueno, entonces comencemos!" Ed puso los platos en una mesa que había conseguido. Actuaba como un mago a propósito. Cada vez que movía sus manos sobre la mesa, salía un plato. Después de que todos los platos estuvieron fuera, todos tomaron una copa y comenzaron a comer felices.

Ed realmente hizo que Leon y Liza se sentaran juntos a propósito. Recibió una mirada de odio y aprecio por parte de Leon, pero simplemente se encogió de hombros. Todos la estaban pasando bien, incluso Ellie, que había estado deprimida últimamente, parecía estar mejorando a medida que comía más y más comida.

"Ed, ¿podría ser esto carne de cucaracha?" Aparentemente, Emilia sabía de qué era la carne.

"Sí, lo es. Un conocido mío se unió a la subasta, y pude asegurar algo para mí". Ed no quería decirles que se unió a la subasta él mismo. No necesitaban saber de todos modos. Cuando los demás escucharon que era carne de cucaracha, asintieron con la cabeza como si entendieran cómo era tan bueno.

Muy pronto, casi todos los platos fueron limpiados, y todos simplemente charlaron juntos.

"¡No seré fácil para ti en el torneo si estamos unidos!" Leon estaba de buen humor y simplemente desafió a casi todos los presentes.

"No voy a ir fácil tampoco", respondió Ed a su desafío con un desafío y todos se rieron juntos.

"¡Ed, tengo algo que pedirte!" Fue Ellie quien habló. Parecía dudar sobre esto y usó todo su coraje. Ed fue tomado por sorpresa y no pudo responder.

"¡Quiero que me entrenes!"