How Can I Say? O.S

Único

[Infidelidad; mención de KookGi; smut; casi 4000 palabras]

Cuando YoonGi conoció a HoSeok pensó que no podía existir alguien con tan buen corazón en el planeta. El chico era simplemente perfecto. Siempre ayudando a los demás y preocupándose por todos más que por él mismo.

Se conocieron al momento en el que Holly, la mascota de YoonGi, se enfermara y tenía que llevarla al veterinario. HoSeok comenzó a trabajar en esa veterinaria el mismo día en el que el mayor fue a llevar a su mascota, fue algo así como un amor a primera vista para ambos.

Con el tiempo, después de muchas citas, decidieron comenzar una relación de manera formal. HoSeok estaba muy enamorado de YoonGi. Poco después optaron por mudarse juntos, HoSeok vendió su departamento y se mudó al de su mayor ya que este era más espacioso para ambos. Poco tiempo después, decidieron casarse.

YoonGi creyó amar a HoSeok por mucho, mucho tiempo. Lo creyó.

—¡Yoonie!—HoSeok salió feliz de la cocina mientras limpiaba sus manos en un pequeño trapo color salmón, otorgó un pequeño beso en la mejilla de su esposo.—¿Qué tal te fue?

YoonGi observó el rostro de HoSeok. Su ojos brillando y una perfecta sonrisa de corazón recibiendole como si realmente se la mereciera.

—Estoy algo cansado. Iré a dormir.—Dijo. Caminó hacía la habitación donde ambos dormían y cerró la puerta.

HoSeok inclinó su cabeza confundido mientras observaba la puerta cerrada de su habitación. Se encogió de hombros y caminó de nuevo a la cocina. Era normal que YoonGi volviera tan cansado de su trabajo, ser contador de una empresa tan grande debía ser agotador.

Escuchó un ladrido por parte de Holly y sonrió cuando lo vio parándose en dos patas.

—Parece que papá no comerá con nosotros.—Dijo. Se inclinó y tomó al perro en brazos para cargarlo a la cocina.—Comeremos nosotros dos.—HoSeok bajó al canino y borró su sonrisa.—Otra vez.—Susurró.

YoonGi se encontraba desnudo frente al espejo, observando todas las marcas rojizas sobre su pecho. Joder. Le había dicho a JungKook que no dejara ninguna jodida marca pero el idiota hizo oídos sordos.
Sususpiró y comenzó a colocarse la pijama, tendría que usar la de invierno al parecer.

HoSeok estaba mirando por la ventana de la habitación con su cabello húmedo. Las estrellas brillando al igual que toda la ciudad.

Escuchó el crujido de la cama y se giró de inmediato para observar a YoonGi metiéndose en ella. Tomó las orillas de su bata y la retiró dejando ver su cuerpo al desnudo.

—Cariño...—Habló HoSeok acercándose a la cama.—¿Qué tal si hoy nos divertimos un poco?—Comenzó a subirse a la cama y YoonGi, al sentirlo, se levantó quedando sentado. El menor aprovechó la oportunidad y se sentó sobre sus piernas.

—No, Seokie, espera.—Sintió como las manos de HoSeok trataban de colarse por debajo de su camisa mientras besaba su cuello.—¡HoSeok!—Dijo, levantando la voz y haciendo que el menor se detuviera asustado.—Estoy cansado. Bájate. Me quiero dormir.

HoSeok parpadeo pero asintió decaído mientras se quitaba de encima de YoonGi. Tomó la bata y se la colocó para volver a acostarse en la cama, dando la espalda al mayor quien también estaba acostado de la misma manera.

—Lo lamento.—Susurró HoSeok. Suprimiendo las lágrimas que amenazaban por salir.

[...]

JungKook miraba a su compañero mientras este acariciaba al gato entre sus brazos, su mirada se notaba decaída, contrario a como siempre estaba en la veterinaria.