Escritos de la noche.

La muerte.

Cojio papel y lapiz para escribir las que serian sus ultimas palabras, pero entonces por su cabeza volaron pensamientos sobre actos pasados, sobre su estado actual y situaciones futuras en las que no estaría presente. Recuerda personas que se fueron antes que ella y tristeza por las que dejará atrás.

Y pensó que la muerte era algo extraño, que con la muerte uno ya no es nada, desaparece, no es ni será nada. Que con la muerte nunca más podrá escuchar a su cantante favorito, ni saber que será de ese chico tan guapo de la televisión. Ni podrá cantar en la ducha, ni bailar descalza por toda la casa, no volvería a sonreír, ni a llorar, ni odiar, ni amar. Todo se acabaría.

Pero con lágrimas en los ojos acabo esa carta con un simple "lo siento".

Y aquella chica, desapareció de la vida...