🍬Lie in your eyes🍬

Señor mentiroso

Imagínate que yo no soy yo, que soy la otra persona que esperabas ver...

-Esta cena no está resultando como yo quisiera
Enviado a las 9:51 p.m.

-¿Qué sucedió, cariño?
Enviado a las 9:53 p.m.

-Mi novia es demasiado aburrida, estoy seguro que un mapache es más interesante que ella.
Enviado a a las 9:54 p.m.

-😂😂 ¡por dios! Sí que es aburrida entonces tu novia
Enviado a las 9:55 p.m.

-Así es, lo bueno es que me dejo solo, y estoy hablando contigo😏 con eso m quito el aburrimiento al menos hasta que vuelva.
Enviado a las 9:56 p.m.

-pero justo en este momento podríamos estar haciendo otras cosas🥺😉
Enviado a las 9:57 p.m.
Visto ✅✅

En el preciso momento en el que quise contestar aquel mensaje, ella apareció con una sonrisa, su ropa impecable, y su peinado algo desaliñado por el transcurrir del día.

—Disculpa si tarde mucho en el sanitario, puse algo de agua en mi cabello, y este quedo algo...

Odiaba que comenzara a hablar sobre ese tipo de cosas. Lo detestaba, porque no me interesaban en lo absoluto, mi querida novia no sabía jamás preguntar sobre deportes que me gustasen o mi trabajo, no, a ella le encantaba hablar sólo sobre cómo lucia su cabello, y los planes a futuro que quería pasar junto a mí.

Bah. Si supiera que lo que menos quiero es pasar tiempo con ella.

—...y entonces encontré algo perfecto para ti, sé que no te agradan tanto los regalos, pero... ¡sólo ábrelo! —en ese momento enfoque mi vista en ella, y la encontré sonriendo animadamente mientras me tendía una pequeña caja envuelta en papel verde y un moño del mismo color, sólo que de distintas tonalidades.

Mi color favorito.

Hice una mueca al darme cuenta del brillo en los ojos de aquella chica, y como a la vez sus ojos se opacaban por la pequeña irritación que se le lograba ver.  Ojos con signos de que había llorado, y yo, como distraído y ciego, no me lograba percatar.

—Gracias... ¿puedo abrirlo? —al final ignore aquel detalle, y decidí poner mi atención en el detalle de mi novia, mi dulce novia.

Ah, ella y sus cursilerías baratas.

Comence por romper la envoltura sin muchas ceremonias de por medio, encontrándome con una cajita de cuero color negra, la destape con interes, y me encontré con la cartera que había estado pensando comprar desde hacía un mes.

Pero eso no era todo...

¡Feliz Aniversario Shaoran! Te amo.

Lo olvidé. Olvidé nuestro primer año de relación.

Me lamenté internamente, incomodandome al instante por aquel "pequeño" detalle.

Pero no me culpen, tal vez mis obligaciones como el trabajo y la universidad no me dejaban tiempo para pensar en aquella bonita joven sentada delante mío, ni en nuestra relación de -ahora-, un año.

Porque a veces los hombres olvidamos este tipo de detalles. Sí, es eso. Ella no puede culparme.

—Oh... muchas gracias amor, y feliz aniversario para ti también —dije mientras dejaba el obsequio en la mesa en la cual cenábamos, y me disponía a sonreir algo incomodo.