Melibea, joven mujer de la alta nobleza, y antes que eso humana. Siente y padece. Esta sería una buena justificación a los actos que decide cometer, actos imperdonables en aquel tiempo, solo por satisfacer a las serpientes que, como ella decía "muerden mi corazón." Fue capaz de poner en juego su bien más preciado, la honra, entregando su cuerpo a su amado Calisto, quien era el primero que deseaba saciar su apetito sexual. Pero además decide acabar su vida con un pecado mortal, el suicidio. Es interesante preguntarnos el porqué de este hecho. ¿Por qué una mujer rica y bella ha de acabar su vida tan pronto y de una manera tan mal vista? Recordemos que ella fue la única que sintió aquel fuego más dulce llamado amor y no podría soportar tener una vida sin el hombre que ella amaba de verdad y con el que había decidido traicionar a su familia y traicionarse a sí misma. Y es que las pasiones que sienten los humanos pueden más, da igual las circunstancias en las que cada uno se encuentre. En la obra aparece bien claro, casi todos los personajes son atraídos por el dinero y el deseo, llegando incluso a poner su vida en peligro. Pero en el caso contrario, si Melibea no hubiera decidido aquel trágico final, ¿cómo hubiera continuado su vida? ¿Sería la misma mujer ante los ojos de una sociedad extremadamente teocéntrica?