Partner of love, cupid of my heart

The Beginning

Todo comenzó cuando finalmente mi banda favorita One Ok Rock vendría a mi país justo un día antes de que yo me fuera a Japón de intercambio por parte de la universidad de artes en la que estudio. Afortunadamente tenía dinero ahorrado y pude comprar los boletos apenas estuvieron disponibles. Yo nunca había sido de esas personas con suerte que se ganan cosas en los concursos es más ni en las rifas de la escuela ganaba algo, sin embargo, de alguna forma fui una de las ganadoras de un Meet and Greet!! Imaginen mi emoción cuando me enteré que vería de cerca y hablaria con mis idolos, aquellos cuya musica me inspiraba en muchos sentidos.

El gran día llegó y traté de irme lo más temprano que me dejaron (mis padres me dijeron que estaba loca por querer ir a formarme a las 8 am) así que terminé llendome a la 1 pm y oh sorpresa ya había unas 100 personas o más formadas.

-bravo! Gracias papás por hacer que no me tocara hasta enfrente, ahora haber si no muero aplastada entre la multitud- susurré incorporándome a la fila.

La verdad era que este sería mi primer concierto, en realidad era lo más emocionante que había pasado en lo que llevo de vida. Patetico ¿no? Mi vida era aburrida, no tenía anécdotas interesantes que contar, salvo las idioteces que hacía con mis amigas pero no era nada del otro mundo, y es que cuando eres tímida y casi no sales no hay mucho que hacer.

Las siguientes fueron las horas mas largas de mi vida (peor que una clase de historia o matemáticas) y cada vez me emocionaba más, aún no podía creer que estaba ahí. Cuando finalmente la fila se empezó a mover ya se estaba poniendo obscuro. Al fin estaba dentro y aunque los señores del lugar repetían "no corran, no corran" me valió un pepino y corrí, no quedé tan atrás, estaba relativamente cerca del escenario justo frente a aquel ya famoso microfono rojo. Dos horas más de eterna espera pero entonces no se qué pasó que alguien gritó y luego todos gritaron y puff!! Comenzaron a empujar hacia adelante y al centro, de alguna forma terminé quedando del lado derecho del escenario.

-Que salvajes, todavía ni empieza-suspiré- al menos sigo mas o menos cerca-

Finalmente las luces se apagaron y el lugar quedó invadido de gritos de euforia que aumentaron cuando salió Tomoya a tocar su batería, luego salió Ryota seguido de Toru y tocaron un pequeño intro. Yo estaba que no me la creía, estaba muy cerca de Toru. Poco después Taka salió y el lugar estalló en gritos.

Todo el concierto me la pasé saltando, gritando, cantando y demás. Grabé todo aunque seguro salía todo movido por tanto brinco. Juro que durante "The Beginning" Toru me vio como por dos segundos. En fin al final él arrojó una de sus plumillas en mi dirección pero me agarró desprevenida y se me cayó, justo cuando la tomé del piso una bota negra y pesada me aplastó la mano.
-es mía, sueltala!- dijo la chica pelirroja dueña de la bota

-Pero yo la agarré, ahora quitate que me lastimas-
-Sueltala ahora!- la chica presionó más su pie contra mi mano. Solté un grito y quité de inmediato la mano por el dolor, entonces la chica tomó la plumilla y gritó como si el mismo Toru se la hubiera dado en persona.
-Pinche vieja, esa plumilla era mia. Casi me deja sin mano- dije muy molesta.

El concierto finalizó y todos, menos los que teníamos pase para verlos, se fueron. Desafortunadamente la pelirroja tenía pase. Formamos una fila para esperar a entrar y conocer a los chicos.
-ahora vuelvo, debo ir al baño no tardo- le dije al guardia que esperaba con nosotros
-pero no tardes o no te dejaré entrar ya casi pasan-
-no tardaré- corrí lo más rápido que pude al baño y me metí en un cubículo para cambiarme de playera (no iba a pasar con ellos llena de sudor, iba bien preparada) saqué un cepillo y me arreglé mi esponjado y húmedo cabello negro, me puse un poco de perfume y me dispuse a salir...
-pero ¿qué demonios?- la puerta del cubículo no abría -no no no, esto no puede estar pasando ¡¡abre carajo!!- nada, continué forcejeando hasta que: SPLASH!! Se escuchó. Mi celular se había caído de mi bolsa y había ido a parar directo al escusado.
-No juegues... qué demonios hice para merecer esto?!!- con todo el asco del mundo metí la mano y saqué mi celular -ya estás muerto cierto basura?!- le hablé idiotamente al aparato que efectivamente había dejado de funcionar. Suspiré enojada y me volteé hacia la puerta -abrete de una buena vez porquería!!- le di una fuerte patada a la puerta y finalmente me dejó salir, la señora del aseo justo iba entrando y me miró con reproche por haberle hecho eso a la puerta pero me valió y salí corriendo. Sin embargo de la nada me estampé con el señor de los refrescos que iba pasando en dirección opuesta y ambos caímos al suelo al igual que sus bebidas, otras cayeron encima de mí empapándome y arruinando mi ropa y cabello.
-maldita niña ahora ayudame a recoger!-
-Lo siento no puedo, tengo prisa- salí corriendo para descubrir que la fila para el M&G ya no estaba. Se me hizo un hueco en el estomago, había llegado tarde y el guardia luego se me acercó para decirmelo. No tuve de otra, me retiré del lugar y fui a casa.

Gané el M&G para nada, perdí la oportunidad de conocerlos y hablarles ya que sabía japonés, ya no tenía celular y por consiguiente las fotos y videos que tomé habian quedado en el olvido. Solo tenía la experiencia del concierto en mi memoria.

-peor es nada, al menos fuiste y los viste en vivo- me consoló mi madre. Tenía razón y al día siguiente me iba a Japón a estudiar!

En la tarde del día siguiente me llevaron al aeropuerto y luego de una despedida de mis padres y hermana que me sacó unas lagrimas subí al avión. Busqué mi asiento que estaba del lado del pasillo y saqué de mi mochila un libro y mi ipod que para variar se cayó y fue a dar a los pies del chico a mi lado de la otra fila, él igual estaba del lado del pasillo.

-Etto, esto es tuyo??- dijo dándome el aparato, su voz se me hizo muy familiar.

-Hai, sumimasen... - levanté la mirada y no lo podía creer, era él sin duda alguna-¿¡Taka!?-