Blake

85 2 0
                                    

¿Quien dijo que la vida seria fácil? es algo que me suelo preguntar a mi mismo cuando pierdo la noción de mi realidad ~¡tak tak!~ (sonido de martillazos), tal vez mi mente divaga para ignorar lo que sucede a mi alrededor, es lo mejor mientras siga de esta manera, ~¡tak tak tak!~ evitará que me vuelva loco, si no es que ya lo estoy y no me he dado cuenta, eso también podría ser, ~¡tak tak tak!~ creo que al pensar que podría estar loco me hace no estarlo, ¿funciona de esa forma no? bueno y si lo estuviera quien se podría dar cuenta, solo ellos, pero no les importa, de todas formas me ven apetecible, mala suerte para ellos que no podrán ni probarme- ~crash~ atravesé la cabeza de uno de ellos con mi afilado machete y termine te tapar la ventana-

-Esto aguantara la noche- ~tap.. tap.. tap~ (pasos torpes a lo lejos)  me prepare para dormir de lo mas tranquilo.

La luz del sol que pasaba entre las tablas me despertó, eran las 7:00 am, en realidad no tengo idea de que hora era pero no me solía despertar temprano antes, así que ahora siempre digo que despierto temprano para sentirme mas productivo, no tengo donde pueda ver la hora. Fui al segundo piso para revisar todo desde una vista elevada, la casa era muy elegante, parecía vacacional.

~crash! plack... plack~ (vidrio roto y unas tablas que golpearon el suelo)

-¿Que sera eso?- esas cosas suelen romper las ventanas pero no las tablas. Baje lo mas rápido que pude con mi machete preparado para cualquier cosa, siempre lo traigo conmigo, hasta que deje el ultimo escalón.

-¿Donde están los demás? ¡Dime o te mato idiota!- me detuvo una chica pelirroja apuntándome con un arma, se notaba nerviosa.

-¿De que hablas?- la verdad no tenia idea de que hablaba.

-¡Donde están dije!- ~¡PUM!~ disparo al suelo serca de mi pie, la verdad creo que fallo y no fue un tiro amenazante.

-¿¡Hey que haces?! ¡Vas a hacer que esas cosas nos coman!- sinceramente tengo mas miedo de que esas cosas me coman a morir por una bala.

-No te preocupes por eso, preocúpate por quien tiene esta arma ¡idiota!- ~PUM! PUM!~

Alcance a lanzarme atrás de la barra de la cocina -¡Tranquila! tengo dos semanas aquí y no ah venido nadie- le grite mientras estaba en cubierto -¡No mientas estúpido! ¡¿En donde están?! ¡¡¿Donde están?!! me repetía muy eufórica.

De repente se escucho un gran disturbio afuera, yo no bloqueo la puerta muy bien ya que no suelo hacer ruido, así que la tumbaron fácilmente y esas cosas empezaron a entrar, -¡Rápido! ¡sube!- le grite mientras me paraba y empezaba a correr hacia las escaleras, justo al tener una mano en el pasamanos escuche las pocas balas que le quedaban de su revolver ~¡¡PUM PUM!!... ¡¡PUM!~ voltee rápido para ayudarla ya que no me hizo caso y clave mi machete en la cabeza del primer muerto que vi, lo jale sin sacarlo y lo acomode como escudo, empuje de una patada al cadáver para tirar a los demás y a la vez sacar mi machete, luego acabe con los dos que cayeron y uno mas que recién entraba a la casa -¡Pasa! ¡llegas tarde!- ~CRASH~ voló la mitad de su cabeza junto con el copete rizado que tenia y rápido volví a cerrar la puerta pero ahora puse un mueble frente a ella.

-Bueno ahora que te quedaste sin balas.. ¡¿quien demonios eres tu?!- me enoje, era mi turno de gritar.

-Creo que me.. que me.... mordió- su voz sonó tan suave y seca, parecía que hablaba en susurro y su rostro se puso pálido. Rápido revise su herida, era en el tobillo -Tranquila no es mordida- la verdad no lo sabia, preferí decirle que todo estaba bien a tener que arruinarle el poco tiempo que le quedaba con vida, -Deja te pongo una venda, creo haber visto un botiquín por aquí- normalmente suelo ubicar la comida primero al revisar la casa -Esta arriba en el baño- subí rápido, y al entran al baño me pregunte ¿y ella como sabe donde esta?, al bajar le pregunte.

-Esta casa es de mi familia- contesto -quedamos de vernos aquí al separarnos hace unos días al salir de la ciudad, al parecer no llegaron...- sabia el dolor que sentía sin tener idea del paradero de sus seres queridos, así nos paso y pasara a todos.

-Bueno, al parecer con esa venda estarás mejor- hice lo que pude con su herida.

-Aquí solíamos pasar la navidad, es un lugar tranquilo y bonito en invierno- ~guaaaaaar..~
(Un quejido de un muerto andante se escucho a lo lejos) -Si... me lo imagino, me gusta lo que hicieron con el piso, ¿caoba?- intente calmar el clima -Jaja si, si es caoba-.

Pasamos la tarde platicando, me contó que escaparon de una horda de muertos muy serca de aquí, ella los llama como "carroñeros", pues en realidad eso son, tiene sentido. Es bueno tener compañia, su nombre es Natasha Gilmor, pero no eh soltado mi machete, no se si se vaya a convertir.

-Disculpa que me haya comido todo, queda muy poco- había estado comiendo muy agusto últimamente, aveces es bueno olvidarte de lo demás. -Esta bien, ya no era mio de todas formas-

Cenamos y le dije que si quería podía subir a los cuartos, no había entrado en ellos y yo dormiría aquí -Prefiero estar alerta, ni tan serca del peligro pero lo suficiente para saber que hacer, ve arriba no te preocupes-.

Al día siguiente, me despertó el ruido de afuera, al parecer los muertos se han juntado alrededor de la casa, por el ruido de las balas lo mas seguro. Subí a avisarle a Natasha ~tok tok tok~ -¡Natasha! ¡Tenemos que irnos!- no contestaba... ~tok! tok! TOK!~ tocaba su puerta mas fuerte, temía lo peor, abrí la puerta rápidamente y con mi machete firmemente agarrado, ella estaba solo acostada, sin moverse, puse mi mano es su frente, estaba ardiendo y sudando, agarre mi machete y pensé un poco la situación, tenia que matarla antes de irme, no podía dejarla así, puse la punta de mi machete serca de su cabeza por un costado ~RUN RUUUUN!~ -¿Una moto?- baje rápido para ver que era, entre las tablas vi varias personas bajando de una ban con armas y uno en una moto, no se veían amigables, bueno creo que ya nadie se ve amigable en estos tiempos.

-¡Steve revisa la casa! Julia cuida el camino, a cualquier movimiento de carros nos avisas-

Así siguió dándoles ordenes a todos los que venían con el mientras yo empacaba todo lo que podía en mi mochila, una mochila grande como de acampar, así suelo llevarme todo lo que encuentro como en estas situaciones, me quede un poco pensativo sobre Natasha, no quería dejarla así pero si volvía arriba solo iba a ocasionar que los tipos de afuera me dejaran como ella.

-¡La puerta esta bloqueada!-  -¡Revisen por las ventanas!-

Tenia mi mano en la perilla de la puerta trasera cuando cruce miradas con uno de ellos que pudo abrir la puerta de la entrada principal un poco como para asomarse con un rifle, abrí la puerta y salí lo mas rápido que pude ~¡¡TAK TAK TAK!!~ solo escuche como las balas dieron con la puerta, mientras yo volteaba a la ventana del segundo piso sin parar de correr adentrándome en el bosque.

-Fue un gusto conocerte Natasha...-

SobrevivientesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora